De acuerdo al experto, ese lote puede ser motor de desarrollo muy importante para consolidar una alternativa de vivienda, pero también de espacio público y de infraestructura urbana que hace falta en la ciudad.
Luego de tres años y seis meses como gerente de la Cámara Colombiana de la Construcción, Camacol, seccional Cesar, Miguel Villazón Blay dialogó con EL PILÓN sobre su balance en este cargo, enfatizando que como está planteado el proyecto de construcción en el lote del Idema representaría una falta de planeación donde perdería la ciudad, por lo que hace un llamado a la administración municipal a replantear la iniciativa.
Para mí es un balance positivo porque logramos consolidar a Camacol como un gremio representativo en el Cesar, donde la voz del sector constructor fue tenida en cuenta por los medios de comunicación, por las autoridades y comunidad en general. Logramos consolidar a Camacol como un gremio técnico, que brinda respuestas y soluciones en torno al sector constructor y pudimos percibir la evolución que ha tenido el sector constructor. Lo dejamos posicionado, organizado y estructurado, sobre todo sostenible en el tiempo.
Cuando tomé a Camacol tenía uno o dos años de existencia en Valledupar; pasó de ser una seccional a regional en un tiempo muy corto. Le faltaba visibilidad y más dinamismo, creo que lo tomé en un momento decisivo, pues no se escuchaba mucho sobre la entidad; fue un reto importante lograr los objetivos que la junta me solicitó.
Tres años y seis meses.
Porque me vive a hacer una maestría a España en una universidad prestigiosa; era una oportunidad que no podía desaprovechar.
Consolidar al sector productivo del departamento para que todos hablaran el mismo idioma. Lo dejamos organizado con el Comité Intergremial, pero creemos que la gente debe ‘comerse’ más el cuento que el sector privado es el más relevante, porque es el que genera recursos y empleo.
Faltó tiempo para consolidar programas como el Club Maestros a la Obra, que es un programa que capacita a la base del sector, faltó tiempo para consolidar a Expoupar como una feria sólida en la región, donde la oferta de vivienda está disponible, para consolidar el Comité Intergremial. El nuevo gerente tiene que consolidar este tipo de cosas.
Muchas; como financieras y consolidar al sector constructor. Al principio fue complicado que creyeran en el proyecto de Camacol, administrativas por parte de la Alcaldía se dieron todas las dificultades; encontramos una administración que estaba presta a ayudar, pero no a actuar; los cambios de secretarios de Planeación fue algo que no ayudó mucho.
La de siempre, creo que Valledupar no se puede permitir una falta de planeación en ese sentido; ese lote no es para unos pocos, es para toda la ciudad. Ese lote puede ser motor de desarrollo muy importante para consolidar una alternativa de vivienda, pero también de espacio público, de infraestructura urbana que hace falta en la ciudad.
Ese lote puede ser la llave maestra para catapultar un desarrollo de ciudad. Valledupar no aguanta más que improvisemos; no se tiene claro el tipo de proyectos, el valor del lote y el proyecto no concuerda con el uso que debería tener el lote.
POR: ANNELISE BARRIGA RAMÍREZ / EL PILÓN
[email protected]
De acuerdo al experto, ese lote puede ser motor de desarrollo muy importante para consolidar una alternativa de vivienda, pero también de espacio público y de infraestructura urbana que hace falta en la ciudad.
Luego de tres años y seis meses como gerente de la Cámara Colombiana de la Construcción, Camacol, seccional Cesar, Miguel Villazón Blay dialogó con EL PILÓN sobre su balance en este cargo, enfatizando que como está planteado el proyecto de construcción en el lote del Idema representaría una falta de planeación donde perdería la ciudad, por lo que hace un llamado a la administración municipal a replantear la iniciativa.
Para mí es un balance positivo porque logramos consolidar a Camacol como un gremio representativo en el Cesar, donde la voz del sector constructor fue tenida en cuenta por los medios de comunicación, por las autoridades y comunidad en general. Logramos consolidar a Camacol como un gremio técnico, que brinda respuestas y soluciones en torno al sector constructor y pudimos percibir la evolución que ha tenido el sector constructor. Lo dejamos posicionado, organizado y estructurado, sobre todo sostenible en el tiempo.
Cuando tomé a Camacol tenía uno o dos años de existencia en Valledupar; pasó de ser una seccional a regional en un tiempo muy corto. Le faltaba visibilidad y más dinamismo, creo que lo tomé en un momento decisivo, pues no se escuchaba mucho sobre la entidad; fue un reto importante lograr los objetivos que la junta me solicitó.
Tres años y seis meses.
Porque me vive a hacer una maestría a España en una universidad prestigiosa; era una oportunidad que no podía desaprovechar.
Consolidar al sector productivo del departamento para que todos hablaran el mismo idioma. Lo dejamos organizado con el Comité Intergremial, pero creemos que la gente debe ‘comerse’ más el cuento que el sector privado es el más relevante, porque es el que genera recursos y empleo.
Faltó tiempo para consolidar programas como el Club Maestros a la Obra, que es un programa que capacita a la base del sector, faltó tiempo para consolidar a Expoupar como una feria sólida en la región, donde la oferta de vivienda está disponible, para consolidar el Comité Intergremial. El nuevo gerente tiene que consolidar este tipo de cosas.
Muchas; como financieras y consolidar al sector constructor. Al principio fue complicado que creyeran en el proyecto de Camacol, administrativas por parte de la Alcaldía se dieron todas las dificultades; encontramos una administración que estaba presta a ayudar, pero no a actuar; los cambios de secretarios de Planeación fue algo que no ayudó mucho.
La de siempre, creo que Valledupar no se puede permitir una falta de planeación en ese sentido; ese lote no es para unos pocos, es para toda la ciudad. Ese lote puede ser motor de desarrollo muy importante para consolidar una alternativa de vivienda, pero también de espacio público, de infraestructura urbana que hace falta en la ciudad.
Ese lote puede ser la llave maestra para catapultar un desarrollo de ciudad. Valledupar no aguanta más que improvisemos; no se tiene claro el tipo de proyectos, el valor del lote y el proyecto no concuerda con el uso que debería tener el lote.
POR: ANNELISE BARRIGA RAMÍREZ / EL PILÓN
[email protected]