«EL PILÓN no es de nadie, es de todos, pues está comprometido con el bienestar comunitario y luchará por la integración regional: será pluralista investigativo y honestamente objetivo: siempre presentará las contrapuestas de la moneda, ejercicio que servirá de contexto para expresar su libérrima opinión», así fue descrita la visión del diario en aquella primera edición.
El 17 de septiembre de 1994, el mundo vallenato leyó por primera vez el periódico EL PILÓN. Esa primera edición relataba las expectativas ante el Gobierno del expresidente Ernesto Samper, el panorama para las elecciones territoriales, las pérdidas de la entonces Electrificadora del Cesar, la crisis que ya padecía el Hospital Rosario Pumarejo de López y hechos de la cultura como el XVI Festival Cuna de Acordeones, en La Guajira, y la tradicional celebración de ‘amor y amistad’.
El primer equipo de periodistas que ‘piló’ esas noticias estaba conformado por David Sierra Daza, Jaime García Romero, Dennys Pérez Moreno, Ana María Baute y Pablo Camargo Alí, bajo la edición general de Iván Alejandro Duarte, comunicador social bogotano que llegó a Valledupar en 1989 para trabajar en el área de comunicaciones del gobierno de Rodolfo Campo Soto, primer alcalde del municipio electo por voto popular.
Allí conoció a Dickson Quiroz, secretario de Gobierno de la época, con quien formó una amistad, y más tarde, se unieron para gestar esa nueva apuesta periodística y editorial con valores costumbristas y críticos. Ya existía el Diario Vallenato, dirigido por Lolita Acosta, pero muchos personajes animaron la idea de un informativo impreso más amplio en cuanto a su cobertura, aunque para otros era un idea traída de los cabellos.
“Inició la idea con el doctor Dickson Quiroz, y nos sirvió mucho el referente histórico de Cecilia Villazón, ella desde antes lo había intentado y para mí es de esas precursoras del periodismo impreso en Valledupar, ella fue como una de las grandes madrinas del proyecto, junto a personas muy juiciosas y rigurosas como Normando Suárez, Simón Martínez, Luisa Baute, exdirectora del Sena, y una cantidad de animadores, que a veces me preocupa dar nombres por omitir alguno”, confiesa Duarte.
Lea: Un nombre que forjó la historia periodística de la región
Quiroz y Duarte se asociaron en 1990 y arrancaron con la empresa Siglo XXI para asesorías de imagen, con la cual lograron el músculo financiero para hacer los estudios de mercado de EL PILÓN. Más tarde, conformaron la compañía Crear Impresores, que se convirtió en la litografía más grande de Valledupar en ese momento.
Estas dos empresas fueron la base para la marca de EL PILÓN y su consigna ‘al grano’ con la información, intentando cubrir los acontecimientos del Cesar, La Guajira y el Magdalena. Incluso, durante varios años, existió ‘El Pilón Guajiro’, no era un periódico independiente, sino 4 o 5 páginas dentro de la edición dedicadas a los hechos registrados en esta parte del Caribe, donde aún no se posicionaban los medios que actualmente predominan en ese departamento.
Lea: Así hacemos EL PILÓN para llevarlo a tus manos
En 1997, después de publicarse de manera semanal e interdiaria, el éxito mismo del periódico permitió el diarismo de las ediciones, pero esto también fue posible por el apoyo de muchas personas, entre ellas Patrocinio Jiménez, un barranquillero, conocedor de diagramación y producción y logística periodística, que había colaborado con los medios impresos El Heraldo y La Libertad, recuerdan sus fundadores.
Transcurrían los años y la casa editorial de los vallenatos se había convertido en un diario reconocido y crítico que aportaba a la construcción de la opinión pública en medio del accionar de las guerrillas y el posicionamiento del paramilitarismo, fuerzas que golpearon a cientos de miles de personas en el departamento, incluidos a periodistas.
Lea: “La del arranque”, la última frase de Guzmán Quintero
Guzmán Quintero Torres, quien estaba próximo a cumplir un año como jefe de redacción, fue asesinado un jueves 16 de septiembre de 1999. El nortesantandereano había reportado alianzas entre militares y autodefensas, entre otros hechos irregulares desde mucho antes de ingresar al diario y había recibido amenazas por ello.
Esa noche en la que el periodismo enlutó, Guzmán, de 35 años, había salido de su habitual sala de redacción y se encontraba compartiendo en el hotel Los Cardones, ubicado en la calle 17. Su colega Óscar Martínez, quien lo vio morir cuando intentaban celebrar su cumpleaños de manera informal, narró momentos antes del crimen en una nota titulada ‘“La del arranque”, la última frase de Guzmán Quintero’, la cual fue galardonada en la categoría Prensa en los premios Sirena Vallenata que otorga el Círculo de Periodistas del Valledupar.
“Terminada la segunda cerveza, Guzmán, a sabiendas de que yo no le iba aceptar que siguiéramos bebiendo, de manera escondida le indicó al mesero que pusiera tres más, cuando el cantinero cumplió la orden y yo reaccioné, supuestamente bravo, él con un gesto de picardía me dice: ‘Profe, la del arranque’”, escribió Martínez, segundos después, un hombre armado le disparó al editor.
Lea: Declaran crimen de lesa humanidad el homicidio de Guzmán Quintero
El crimen fue declarado de lesa humanidad por la Fiscalía General de la Nación, pero, 25 años después, el caso sigue impune, pero sus colegas periodistas, desde los más veteranos hasta las nuevas generaciones, así como la ciudadanía y la academia, lo siguen recordando como un referente de ética periodística y valentía.
Los retos en materia de seguridad para los periodistas y la crisis social continuaron, pero el equipo del periódico logró sobreponerse ante las adversidades y continuar la marcha, siendo testigo y protagonista de hechos desgarradores, algunas alegrías e hitos. Una década después, tras años de trabajo, en el 2010 se consolidó la digitalización de este medio.
Con los años, la edición impresa se ha reducido por el auge del sitio web y las redes sociales como Instagram, donde tiene 267.000 seguidores, mientras que en Facebook alcanza 253.000 y en X (antiguo Twitter) 151.000 seguidores que se traducen en lectores. En la actualidad, esa página web alcanza 1.800.000 visitas mensuales.
EL PILÓN, hoy dirigido por el abogado y empresario Juan Carlos Quintero Castro, ha ido más allá de las noticias, convirtiéndose en un gestor cultural y promotor de la democracia. En el 2023, los directivos se atrevieron a organizar la primera Feria del Libro de Valledupar (FELVA) en el mes de junio, un hito para la cultura literaria del municipio que se repitió con mayor fuerza en 2024 y promete mantenerse con el apoyo de los escritores, lectores y las instituciones.
Además de Felva, esta casa editorial ha sido gestora de otras ferias, como la de gastronomía y de salud, así como la estrategia de debates políticos y foros sobre diversos temas de interés público.
La celebración de estos 30 años fue realizada este miércoles 27 de noviembre en el Club Valledupar; escenario desde donde David Sierra, uno de esos primeros periodistas y fundadores, aseguró que el objetivo de ser el diario de los vallenatos se logró, con todas las transformaciones que eso implicó.
Lee: también: EL PILÓN, una historia digital
“Hasta ahora se ha mantenido, como se mantienen en muchas regiones, un periódico símbolo y estamos en esa lucha, allá en la junta directiva estamos ingeniándonos cosas para mantener el periódico, mantener ese liderazgo, y que el medio de comunicación siga siendo la voz del departamento del Cesar”, expresó Sierra.
Por Andrea Guerra Peña / EL PILÓN
«EL PILÓN no es de nadie, es de todos, pues está comprometido con el bienestar comunitario y luchará por la integración regional: será pluralista investigativo y honestamente objetivo: siempre presentará las contrapuestas de la moneda, ejercicio que servirá de contexto para expresar su libérrima opinión», así fue descrita la visión del diario en aquella primera edición.
El 17 de septiembre de 1994, el mundo vallenato leyó por primera vez el periódico EL PILÓN. Esa primera edición relataba las expectativas ante el Gobierno del expresidente Ernesto Samper, el panorama para las elecciones territoriales, las pérdidas de la entonces Electrificadora del Cesar, la crisis que ya padecía el Hospital Rosario Pumarejo de López y hechos de la cultura como el XVI Festival Cuna de Acordeones, en La Guajira, y la tradicional celebración de ‘amor y amistad’.
El primer equipo de periodistas que ‘piló’ esas noticias estaba conformado por David Sierra Daza, Jaime García Romero, Dennys Pérez Moreno, Ana María Baute y Pablo Camargo Alí, bajo la edición general de Iván Alejandro Duarte, comunicador social bogotano que llegó a Valledupar en 1989 para trabajar en el área de comunicaciones del gobierno de Rodolfo Campo Soto, primer alcalde del municipio electo por voto popular.
Allí conoció a Dickson Quiroz, secretario de Gobierno de la época, con quien formó una amistad, y más tarde, se unieron para gestar esa nueva apuesta periodística y editorial con valores costumbristas y críticos. Ya existía el Diario Vallenato, dirigido por Lolita Acosta, pero muchos personajes animaron la idea de un informativo impreso más amplio en cuanto a su cobertura, aunque para otros era un idea traída de los cabellos.
“Inició la idea con el doctor Dickson Quiroz, y nos sirvió mucho el referente histórico de Cecilia Villazón, ella desde antes lo había intentado y para mí es de esas precursoras del periodismo impreso en Valledupar, ella fue como una de las grandes madrinas del proyecto, junto a personas muy juiciosas y rigurosas como Normando Suárez, Simón Martínez, Luisa Baute, exdirectora del Sena, y una cantidad de animadores, que a veces me preocupa dar nombres por omitir alguno”, confiesa Duarte.
Lea: Un nombre que forjó la historia periodística de la región
Quiroz y Duarte se asociaron en 1990 y arrancaron con la empresa Siglo XXI para asesorías de imagen, con la cual lograron el músculo financiero para hacer los estudios de mercado de EL PILÓN. Más tarde, conformaron la compañía Crear Impresores, que se convirtió en la litografía más grande de Valledupar en ese momento.
Estas dos empresas fueron la base para la marca de EL PILÓN y su consigna ‘al grano’ con la información, intentando cubrir los acontecimientos del Cesar, La Guajira y el Magdalena. Incluso, durante varios años, existió ‘El Pilón Guajiro’, no era un periódico independiente, sino 4 o 5 páginas dentro de la edición dedicadas a los hechos registrados en esta parte del Caribe, donde aún no se posicionaban los medios que actualmente predominan en ese departamento.
Lea: Así hacemos EL PILÓN para llevarlo a tus manos
En 1997, después de publicarse de manera semanal e interdiaria, el éxito mismo del periódico permitió el diarismo de las ediciones, pero esto también fue posible por el apoyo de muchas personas, entre ellas Patrocinio Jiménez, un barranquillero, conocedor de diagramación y producción y logística periodística, que había colaborado con los medios impresos El Heraldo y La Libertad, recuerdan sus fundadores.
Transcurrían los años y la casa editorial de los vallenatos se había convertido en un diario reconocido y crítico que aportaba a la construcción de la opinión pública en medio del accionar de las guerrillas y el posicionamiento del paramilitarismo, fuerzas que golpearon a cientos de miles de personas en el departamento, incluidos a periodistas.
Lea: “La del arranque”, la última frase de Guzmán Quintero
Guzmán Quintero Torres, quien estaba próximo a cumplir un año como jefe de redacción, fue asesinado un jueves 16 de septiembre de 1999. El nortesantandereano había reportado alianzas entre militares y autodefensas, entre otros hechos irregulares desde mucho antes de ingresar al diario y había recibido amenazas por ello.
Esa noche en la que el periodismo enlutó, Guzmán, de 35 años, había salido de su habitual sala de redacción y se encontraba compartiendo en el hotel Los Cardones, ubicado en la calle 17. Su colega Óscar Martínez, quien lo vio morir cuando intentaban celebrar su cumpleaños de manera informal, narró momentos antes del crimen en una nota titulada ‘“La del arranque”, la última frase de Guzmán Quintero’, la cual fue galardonada en la categoría Prensa en los premios Sirena Vallenata que otorga el Círculo de Periodistas del Valledupar.
“Terminada la segunda cerveza, Guzmán, a sabiendas de que yo no le iba aceptar que siguiéramos bebiendo, de manera escondida le indicó al mesero que pusiera tres más, cuando el cantinero cumplió la orden y yo reaccioné, supuestamente bravo, él con un gesto de picardía me dice: ‘Profe, la del arranque’”, escribió Martínez, segundos después, un hombre armado le disparó al editor.
Lea: Declaran crimen de lesa humanidad el homicidio de Guzmán Quintero
El crimen fue declarado de lesa humanidad por la Fiscalía General de la Nación, pero, 25 años después, el caso sigue impune, pero sus colegas periodistas, desde los más veteranos hasta las nuevas generaciones, así como la ciudadanía y la academia, lo siguen recordando como un referente de ética periodística y valentía.
Los retos en materia de seguridad para los periodistas y la crisis social continuaron, pero el equipo del periódico logró sobreponerse ante las adversidades y continuar la marcha, siendo testigo y protagonista de hechos desgarradores, algunas alegrías e hitos. Una década después, tras años de trabajo, en el 2010 se consolidó la digitalización de este medio.
Con los años, la edición impresa se ha reducido por el auge del sitio web y las redes sociales como Instagram, donde tiene 267.000 seguidores, mientras que en Facebook alcanza 253.000 y en X (antiguo Twitter) 151.000 seguidores que se traducen en lectores. En la actualidad, esa página web alcanza 1.800.000 visitas mensuales.
EL PILÓN, hoy dirigido por el abogado y empresario Juan Carlos Quintero Castro, ha ido más allá de las noticias, convirtiéndose en un gestor cultural y promotor de la democracia. En el 2023, los directivos se atrevieron a organizar la primera Feria del Libro de Valledupar (FELVA) en el mes de junio, un hito para la cultura literaria del municipio que se repitió con mayor fuerza en 2024 y promete mantenerse con el apoyo de los escritores, lectores y las instituciones.
Además de Felva, esta casa editorial ha sido gestora de otras ferias, como la de gastronomía y de salud, así como la estrategia de debates políticos y foros sobre diversos temas de interés público.
La celebración de estos 30 años fue realizada este miércoles 27 de noviembre en el Club Valledupar; escenario desde donde David Sierra, uno de esos primeros periodistas y fundadores, aseguró que el objetivo de ser el diario de los vallenatos se logró, con todas las transformaciones que eso implicó.
Lee: también: EL PILÓN, una historia digital
“Hasta ahora se ha mantenido, como se mantienen en muchas regiones, un periódico símbolo y estamos en esa lucha, allá en la junta directiva estamos ingeniándonos cosas para mantener el periódico, mantener ese liderazgo, y que el medio de comunicación siga siendo la voz del departamento del Cesar”, expresó Sierra.
Por Andrea Guerra Peña / EL PILÓN