La cosecha suele comenzar a finales de septiembre, pero esta vez inició en los primeros días de octubre. EL PILÓN dialogó con diferentes caficultores.
La ola invernal que atravesó el departamento del Cesar y el país atrasó la cosecha de café y deterioró vías terciarias, cuentan agricultores consultados por EL PILÓN.
“En algunos municipios la producción disminuyó hasta en un 40%”, precisa Álvaro Osorio, director ejecutivo del Comité de Cafeteros del Cesar, La Guajira y Bolívar.
Además de los problemas climáticos y logísticos, el precio de fertilizantes como la urea ha incrementado por el conflicto entre Rusia (uno de los principales productores en el mundo) y Ucrania, guerra que ha hecho más costoso el proceso para los agricultores de Colombia.
Hace dos años, 50 kilos de este producto costaban alrededor de $80 mil; ahora puede alcanzar los $240 mil, según fuentes oficiales.
Según el Banco Mundial, dicho compuesto químico ha alcanzado el precio más alto de la última década, una razón es la tendencia al alza del gas, materia prima de la urea.
Osorio asegura que la carga de café está entre $1 millón novecientos mil y 2 millones de pesos: “Precio que ha favorecido, pero no puedo imaginar la caficultura con los costes de insumos que tenemos”, agregó.
Le puede interesar: La apuesta para duplicar el valor del café cesarense
Agustín Codazzi y Pueblo Bello son los territorios de mayor producción (15%) de este grano alto en cafeína, un estimulante del sistema nervioso central.
Este diario conversó con un caficultor que se definió simplemente como Carlos, en la vereda Montegrande, zona rural de Pueblo Bello, y quien aseguró que espera recoger los frutos de la planta de café hasta mediados de diciembre.
“Ese precio actual al campesino no le sirve porque tiene que luchar para mantener la mata (sic) en producción y tener el sustento de ahí”, expresó el hombre que tiene 31 años trabajando en este sector.
Carlos anotó que además de café, debe vender cacao y otros productos para sostenerse en esta población ubicada vía a la Sierra Nevada de Santa Marta.
Cindy León comercializa una marca de café orgánico en el caso urbano de Pueblo Bello, pero que se produce en una finca en la vereda Nueva Bélgica desde hace dos años.
León dijo a EL PILÓN que para lograr mayores ventas de este producto “el Gobierno debe promover el turismo y apoyar los eventos donde se exponen las marcas locales”.
Los turistas que llegan a este municipio cesarense buscan donde tomar café, resultado de ello es que han aumentado los establecimientos comerciales para degustar la bebida y otros derivados.
US$2,17 es el precio en el que se cotiza la libra de café en el mercado internacional, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane.
Lea: “Estamos en los mejores precios en la historia del café”: caficultores del Cesar
La cosecha suele comenzar a finales de septiembre, pero esta vez inició en los primeros días de octubre. EL PILÓN dialogó con diferentes caficultores.
La ola invernal que atravesó el departamento del Cesar y el país atrasó la cosecha de café y deterioró vías terciarias, cuentan agricultores consultados por EL PILÓN.
“En algunos municipios la producción disminuyó hasta en un 40%”, precisa Álvaro Osorio, director ejecutivo del Comité de Cafeteros del Cesar, La Guajira y Bolívar.
Además de los problemas climáticos y logísticos, el precio de fertilizantes como la urea ha incrementado por el conflicto entre Rusia (uno de los principales productores en el mundo) y Ucrania, guerra que ha hecho más costoso el proceso para los agricultores de Colombia.
Hace dos años, 50 kilos de este producto costaban alrededor de $80 mil; ahora puede alcanzar los $240 mil, según fuentes oficiales.
Según el Banco Mundial, dicho compuesto químico ha alcanzado el precio más alto de la última década, una razón es la tendencia al alza del gas, materia prima de la urea.
Osorio asegura que la carga de café está entre $1 millón novecientos mil y 2 millones de pesos: “Precio que ha favorecido, pero no puedo imaginar la caficultura con los costes de insumos que tenemos”, agregó.
Le puede interesar: La apuesta para duplicar el valor del café cesarense
Agustín Codazzi y Pueblo Bello son los territorios de mayor producción (15%) de este grano alto en cafeína, un estimulante del sistema nervioso central.
Este diario conversó con un caficultor que se definió simplemente como Carlos, en la vereda Montegrande, zona rural de Pueblo Bello, y quien aseguró que espera recoger los frutos de la planta de café hasta mediados de diciembre.
“Ese precio actual al campesino no le sirve porque tiene que luchar para mantener la mata (sic) en producción y tener el sustento de ahí”, expresó el hombre que tiene 31 años trabajando en este sector.
Carlos anotó que además de café, debe vender cacao y otros productos para sostenerse en esta población ubicada vía a la Sierra Nevada de Santa Marta.
Cindy León comercializa una marca de café orgánico en el caso urbano de Pueblo Bello, pero que se produce en una finca en la vereda Nueva Bélgica desde hace dos años.
León dijo a EL PILÓN que para lograr mayores ventas de este producto “el Gobierno debe promover el turismo y apoyar los eventos donde se exponen las marcas locales”.
Los turistas que llegan a este municipio cesarense buscan donde tomar café, resultado de ello es que han aumentado los establecimientos comerciales para degustar la bebida y otros derivados.
US$2,17 es el precio en el que se cotiza la libra de café en el mercado internacional, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane.
Lea: “Estamos en los mejores precios en la historia del café”: caficultores del Cesar