Nos complace registrar que al cierre de la versión número 58 del Festival de la Leyenda Vallenata, una vez más queda demostrado que, pese a las nuevas tendencias y amenazas del modernismo musical, sigue vigente la esencia de nuestra música vallenata.
Las significativas cantidades de niños y jóvenes acordeoneros participantes en este año 2025 hablan del fértil semillero que sustenta a este folclor vallenato. Sorprendente fue la participación de 159 acordeoneros en las categorías de Acordeón Infantil, Acordeonera Menor, Acordeón Juvenil y Acordeón Aficionado, mientras que a nivel profesional fueron 71 los concursantes.
También fue muy notable el entusiasmo y la participación en las otras competencias del festival como piquera y canción inédita, con la novedad de que este año fueron pocos los compositores famosos y reconocidos los que se animaron a participar con sus nuevas canciones. No obstante, al inicio se inscribieron 260 canciones, de las cuales fueron preseleccionadas 68 para concursar, distribuidas en 49 paseo, 5 merengues, 8 sones y 6 puyas, lo que indica que los cuatro aires del vallenato típico estuvieron presentes de manera representativa en este Festival Vallenato.
Se pudo observar gran concurrencia de público alrededor de cada competencia en los distintos escenarios donde se llevaron a cabo los diferentes concursos, lo cual es otro ingrediente que de demuestra la vigencia del Festival de la Leyenda Vallenata, en especial la asistencia numerosa de familias procedentes de distintos lugares del país y también del exterior.
Mientras centenares de niños y jóvenes sigan soñando con coronarse rey en el Festival Vallenato, al tiempo que la gente conserve vivo ese mismo entusiasmo por los concursos, podemos decir que está asegurada la continuidad de este gran certamen folclórico.
Reiteramos la necesidad de que ese sonido de la caja, guacharaca y acordeón, que por estos días se volvió muy familiar en Valledupar, se promocione más seguido durante todo el año haciendo posible la presentación en esta ciudad del conjunto típico vallenato en los distintos establecimientos comerciales de atención al público, tal como sucede en Bucaramanga y en otras ciudades de naturaleza folclórica.
Todas esas acciones serán de mucha ayuda para seguir perpetuando con fuerza ese legado cultural que permanente debemos impulsar para que no pierda su esencia y su alma basada en los tres instrumentos tradicionales de nuestra música vallenata. Sería la mejor manera de rendirle homenaje a los juglares que mediante largas travesías por la región Caribe se inspiraron para hacer de este folclor todo eso que se conoce en la actualidad.
Por lo pronto la invitación es a deleitarnos en esta noche 3 de mayo en el Parque de la Leyenda con la gran final del concurso de acordeoneros profesionales y el espectáculo musical que los organizadores del Festival ofrecerán como cierre de estas festividades.
Solo esperamos que esta noche el jurado calificador tenga la suficiente sapiencia para elegir y coronar con justos méritos a quien será el Rey Vallenato 2025, que gané el mejor para la grandeza de nuestro folclor.











