El reconocido médico Luciano Aponte López, en su discurso en Valledupar, hace unos meses, cuando fue galardonado por la gobernación de El Cesar y la Alcaldía de Valledupar , la asociación nacional de gastroenterólogos y la comunidad regional por sus 50 años de ejercicio profesional y su destacada labor décadas atrás como Director del Rosario Pumarejo de Lopez, reveló una historia del café en nuestra región: fue el francés  Monsieur Dangond quien estableció los primeros cafetales de Colombia en la Sierra Negra de Villanueva hace dos siglos. Los franceses fueron los grandes propagadores de la plantación en el mundo en los siglos XVII y XVIII . Monsieur se casó con la urumitera Eusebia López, hija del cabo andalús José Antonio López Gutiérrez, a quien denominaban los españoles ” el cabo López”, ascendiente del médico. Esa versión con bastante asidero, según la investigación del Doctor Luciano Aponte, explica que siguiendo el trazo de Perijá hacia el sur los primeros cafetales de uso comercial se establecieran en Santander, como se reconocían ya en 1835 en Salazar de Las Palmas. Algunos sacerdotes jesuitas, como Francisco Romero, ponían como penitencia a sus fieles la siembra del café.