Hay que recibir con beneplácito el anuncio de la pronta inauguración de la Biblioteca Pública Municipal El Arco Iris, de Valledupar, la cual se considera que es una obra con gran sentido comunitario en razón a su ubicación en un sector popular de la ciudad.
La espera fue larga, pero por fortuna ya es una realidad y el próximo 12 de septiembre abrirá sus puertas al público en el barrio Rafael Escalona, de Valledupar. Se espera que con esta inauguración se cierre el ciclo de dificultades, aplazamientos y retos administrativos que por mucho tiempo puso a prueba la paciencia y las expectativas de la comunidad vallenata.
Recordemos que de esta obra comenzó a hablarse desde el año 2014 hasta la finalización de su infraestructura en 2023, pasando por la espera de dotación y los estragos de una inundación. La biblioteca ha sido una promesa aplazada, pero como bien dice el refrán, “más vale tarde que nunca”.
Con la apertura de El Arcoíris, allí en unas modernas instalaciones, se podrá materializar un derecho fundamental, tal es el acceso a la cultura, la información y la educación para todos, en este caso para un amplio sector popular de Valledupar.
Se espera también que esta institución deje de ser la “biblioteca sin libros”, como había sido denominada por algunos en medio de críticas generadas por una aparente falta de planificación integral y que dio paso a diversos inconvenientes.
Debemos reconocer que la dotación inicial de 2.400 libros es un avance, sin embargo, quedan pendientes algunas tareas encaminadas a superar limitaciones tecnológicas que condicionan su potencial en una era digital. En este sentido, el llamado es a mirar y concebir la cultura como una prioridad, con políticas sostenidas que aseguren la preservación en buen estado de la infraestructura física de esta biblioteca, lo mismo que su funcionamiento, mantenimiento y evolución en atención de las exigencias requeridas de manera constante.
Sería bueno entonces que el acto de inauguración de la biblioteca El Arco Iris se constituya en ese primer paso para consolidarla como en un verdadero centro de encuentro comunitario, en un refugio para los saberes, en un espacio donde los niños, jóvenes y adultos de Valledupar puedan soñar, aprender y construir ciudadanía con base en la pluralidad de conocimientos allí obtenidos.
Importante sería que los colegios de esa zona de Valledupar organicen, de manera coordinada y articulada con las autoridades educativas del municipio y también del departamento del Cesar, programas y jornadas encaminadas a estimular y despertar el interés por la lectura en jóvenes y población en general. Esta biblioteca sería una herramienta propicia para potenciar al máximo los posibles semilleros de escritores o amantes de las letras existentes en los distintos barrios de la ciudad y que necesitan ser descubiertos y visibilizados.
Consideramos que esta biblioteca es el inicio de un proyecto que contempla una nueva etapa para el desarrollo cultural de Valledupar.
Bienvenido el Arcoíris, con todos sus colores de conocimientos para el crecimiento y formación cultural de los sectores populares de nuestra ciudad. Hay que insistir en la lectura de niños, jóvenes y adultos; bien dice el mensaje central de la FELVA, la Feria del Libro que organiza EL PILÓN, ‘Leer es volar’; sí, hacia un Arco Iris de conocimiento, creación y sanas ilusiones.
