Es necesario comprender el carácter oficial a través del cual el Estado administra los bienes públicos, interactúa con la ciudadanía y presta servicios básicos considerados de interés común, junto con el comportamiento adecuado de los funcionarios y de los ciudadanos. En ese sentido, se puede concluir que el interés público tiene soporte en el comportamiento unido y complejo que exige la mejor disposición del ciudadano y del mismo servidor público.

La eficiencia y legitimidad del Estado dependen en buena medida de su capacidad para convocar e interactuar con la sociedad en la construcción conjunta de lo público. El departamento del Cesar vive en alto riesgo de insalubridad por la propagación del dengue y es claro que, paralelo a las políticas de salud públicas, el primer objetivo de vida del ser humano será la de tener perfecta salud y cada persona o núcleo familiar deben ser responsable de velar por ella, también será fundamental construir un estilo de vida sano que incluya conceptos tales como actitud positiva frente a la vida, hábitos alimenticios correctos, práctica del deporte, manejo del tiempo con esparcimiento adecuado, así como de salud física y mental.

Valledupar en los últimos años ha sido afectada por la expansión urbana en forma desordenada y el advenimiento de núcleos poblacionales, que en su gran mayoría desconocen el verdadero concepto de calidad de vida y la responsabilidad que les obliga a velar por la salubridad personal y de su familia, independientemente de las políticas que sobre la materia ejecuten las entidades públicas.

El dengue es una consecuencia de la falta de calidad de vida y el descuido personal y familiar para el manejo de un entorno habitacional adecuado que garantice vida sana. Si bien es cierto, la Secretaría de Salud Pública del municipio de Valledupar y organismos afines cumplen programas de prevención y atención contra el dengue, a través de medidas de control como la fumigación y visitas puerta a puerta de carácter persuasivo para sensibilizar a la población para atender situaciones relacionadas con el almacenamiento voluntario o involuntario de agua en botellas, llantas, albercas y tanques, floreros, entre otros lugares que sirven para que el mosquito Aedes Aegypti deposite sus larvas, también es cierto que la comunidad mediante las Juntas de Acción Comunal, los veedores ciudadanos, padres de familias, directivos de Instituciones Educativas, jóvenes, tenderos, sacerdotes y pastores de las iglesias en las diferentes comunas de la ciudad están obligados a desarrollar y cumplir labores más comprometidas y con alta responsabilidad para prevenir y controlar semejante amenaza, porque más que nadie toda persona está obligada a tener las mínimas condiciones de asepsia personal y familiar para preservar la salud y la vida de los suyos.

Según conceptos de expertos epidemiólogos, el dengue no sólo aparece en periodo invernal, actualmente el Cesar y Valledupar viven un intenso verano y sin embargo, se tienen registrados crecientes de casos de dengue en los primeros 45 días del 2013. Lo anterior podría determinar que gran culpa de la propagación de la enfermedad está en la desidia de la población, bajo nivel de cultura y responsabilidad ciudadana, la cual a última hora reclama acciones permanentes de los organismos competentes, los cuales como es de conocimiento público mantienen activas las redes y protocolos de prevención y control del dengue.

No es hora de señalar ni culpar a nadie, es el momento de actuar mancomunadamente de manera activa y unida, porque el dengue es responsabilidad de todos!