Con el lanzamiento de los Juegos Parasuramericanos Valledupar 2026, llevada a cabo este viernes 11 de julio en la Plaza Alfonso López, esta ciudad inicia de manera oficial la cuenta regresiva para el desarrollo de ese evento de carácter continental e internacional.
Ese certamen constituye una nueva apuesta de ciudad en la que no se puede bajar la guardia y se requiere mantener arriba el empeño y entusiasmo desplegado en otros eventos de ese mismo nivel, entre ellos los Juegos Bolivarianos 2022 que le permitieron a Valledupar demostrar que reúne las condiciones para afrontar este tipo de pruebas.
Precisamente, fueron los Juegos Bolivarianos 2022 los que hicieron posible sentar las bases para iniciar ese proceso hacia la consolidación de ciudad de diversos eventos y acabar con la tradicional creencia que acá solo era folclor y Festival Vallenato. Se ha demostrado que en esta capital hay gente para todo eso y muchos más.
Es meritorio destacar que gracias a los Juegos Bolivarianos 2022, Valledupar ya cuenta con una moderna infraestructura deportiva que ahora será adaptada para la alta competencia paralímpica. Con una inversión acumulada de más de $5.200 millones para organización y adecuación de escenarios.
Y qué bueno que esta vez sea por una causa con mucho sentido social. Estos Juegos Parasuramericanos, además del espíritu deportivo que encarnan, representan una mirada diferente de la concepción que se tiene de Valledupar como ciudad y su aporte para este tipo de poblaciones.
Queda un año para que Valledupar se aliste y pueda garantizar que los atletas paralímpicos tengan acceso a rampas, baños, señalética y transporte adecuados para ellos y también para el público en condición de discapacidad. En eso no se puede tener el menor descuido, se debe ser celoso con el cumplimiento de normas técnicas. Importante que después de estos juegos a Valledupar le quedará una buena infraestructura para el servicio de las personas con limitaciones físicas.
Sin duda alguna que será grande el impacto social de estos Juegos Parasuramericanos. Según el comité organizador y la Alcaldía, estas justas son “una apuesta muy importante… para que Valledupar sea la ciudad modelo… y transformar imaginarios frente a las personas con discapacidad”, como lo registró EL PILÓN.
El deporte paralímpico se convertirá así en una escuela para mejorar la conciencia comunitaria sobre la capacidad y el derecho que tiene esta población a también ser protagonistas.
Será de suma importancia la presencia de unos 1.200 paratletas de más de 12 países, de ellos 10 son suramericanos y dos son invitados centroamericanos, lo cual pone a Valledupar como ciudad protagonista en el ámbito internacional. Además, incluir al municipio de Agustín Codazzi como subsede expande el alcance del evento y promueve dinámicas regionales de cooperación e intercambio cultural y deportivo.
Otro factor interesante es que eventos de talla internacional atraen visitantes y medios de comunicación. Los especialistas del Ministerio del Deporte ya destacan que estos Juegos “dinamizan la economía de la región y el país”.
Además, la organización incluye formación para estudiantes, voluntarios y personal técnico, con lo cual se fortalecerán las competencias logísticas, deportivas y se preparará al capital humano para futuros eventos y proyectos sociales que necesitarán de gente especializada que actúe como guías turísticos y atención a personas en condición de discapacidad.
Valoremos entonces en su justa dimensión este importante certamen y actuemos en consecuencia para que Valledupar quede como una excelente anfitriona.
