Por fuerza mayor, seis empresas contratistas de la multinacional Drummond  suspendieron los contratos de trabajo a más de mil de sus empleados, esto debido a la huelga que vive desde la semana pasada la minera con sede en el centro del Cesar y puertos en Ciénaga y Santa Marta.

Así lo dio a conocer el representante del Ministerio del Trabajo Territorial Cesar, Antonio Junieles Araújo, quien dijo que las contratistas comunicaron la decisión de suspender los contratos amparados en la Ley 50 de 1990, que prevé que en los casos que se presente fuerza mayor, el empleador una vez tome esa determinación, debe de inmediato dar aviso al inspector de Trabajo, autoridad o dirección territorial.

“Esto tiene efecto inmediato y es que cesa la obligación del pago de salarios a los trabajadores y se continúa solo con el pago de la seguridad social, a excepción de ARL (Administradora de Riesgos Laborales).

Esa suspensión de actividad se comunica al Ministerio del Trabajo  para que como autoridad administrativa proceda a las verificaciones de circunstancias de hecho”, explicó Junieles Araújo.

Según el funcionario, el Ministerio no tiene facultad de determinar si hay fuerza mayor, debido a que esta función les corresponde a los jueces laborales.

Las seis empresas que le suspendieron los contratos de trabajo a su personal realizan labores de mantenimiento a maquinaria, alimentación, aseo, entre otros.

Cobretire International que presta servicios de llantería; Diamantec, Tracceco LMTDA y Masa Mecánicos Asociados del área de mantenimiento; Aramark que ofrece servicios de alimentación y Aseres que presta la labor de jardinería y mantenimiento, son las que procedieron a suspender los contratos.

En total se ven afectados con esta decisión 1.066 empleados, informó Junieles Araújo.

El funcionario explicó que en el momento las conversaciones entre trabajadores sindicalizados y la Drummond para llegar a un acuerdo que permita levantar la huelga, se mantienen paralizadas, por lo que continúan con los planes de mantenimiento y sostenimiento.

Como se recordará, el paro en la Drummond estalló el martes de la semana pasada y en los días que lleva, ha afectado el comercio de poblaciones como La Jagua de Ibirico y La Loma (corregimiento de El Paso), de igual modo,  impactará negativamente en las cifras de crecimiento en exportaciones previstas por el gobierno, por lo que se estima que estas disminuirán durante el 2013.

La Drummond es la segunda minera más importante del país, con alrededor de nueve mil empleados, entre directos y contratistas. Es un de las que más aporta en regalías e impuestos al Estado.

Salida negociada

El sindicato Sintradrummond que agrupa una minoría de trabajadores en la multinacional, dijo ayer que quieren una salida negociada al conflicto que hoy se vive en la minera, debido a las afectaciones que hay hoy sobre trabajadores, región, regalías, entre otros.

“Estamos tratando de mediar a través del diálogo que nos identifica, de poder llegar a un acuerdo negociado. El pliego de peticiones que nos diferencia de Sintramienergética, es un punto que creo que se está escondiendo que es el punto 61 del reintegro de unos directivos despedidos en el año 2009 y que la empresa Drummond dice que si no se retira ese punto no siguen las conversaciones”, dijo el presidente de Sintradrummond, Alfredo Moreno.

El sindicato que junto a Agretritrenes, agrupa alrededor de 800 trabajadores plantea un aumento salarial del 6%, además de ajustes en salud, educación y seguridad social.

Entre tanto, Nicolás Maestre, asesor de Sintradrummond, explicó que la posición es respetar la huelga, “porque es un mecanismo legal de votación, hoy hay dos posiciones radicales, una donde Sintramienergética aduce que si no se reintegra a los compañeros  no avanza la negociación, creemos que es muy radical, porque hay unos beneficios más importantes que eso  y la empresa se mantiene en que si no retiran ese punto no avanzan en las oferta, Sintradrummond hace un llamado a la compañía para que nos sentemos lo más pronto posible, Sintradrummond y Agretritrenes y lograr una mejor oferta que tenga un punto de equilibrio”.

Por Sandra Santiago B.
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