Los ciudadanos aseguraron que deben pagar recibos de hasta de $100.000 por el servicio de agua potable a pesar de que lo tienen por dos o cuatro horas al día.
Al borde del desespero están los residentes del barrio Villalba de la ciudad de Valledupar debido a que no cuentan de manera permanente con el servicio de agua potable en el sector. De acuerdo con la comunidad, el preciado líquido solo está en las ‘plumas’ de sus hogares entre dos y cuatro horas al día.
Así lo dio a conocer Aristides López, residente de este sector, quien aseveró que desde hace más de ocho días tienen racionamiento de agua. Acotando así que el líquido llega a sus tuberías domiciliarias en las horas de la madrugada y se va alrededor de las ocho de la mañana.
“Estamos todos los moradores del barrio Villalba preocupados por esta emergencia sanitaria porque solo tenemos agua por alrededor de cuatro horas. Al parecer hay manipulación de las válvulas que permiten el flujo del agua al barrio”, comentó López.
De acuerdo con la comunidad, presuntamente algunos funcionarios de la empresa Emdupar estarían manipulando las válvulas “para enviarle agua al barrio Francisco Javier”, el cual se encuentra ubicado a una larga distancia del barrio Villalba.
Debido a la falta de presión del agua y su aparente escasez, algunos miembros de esta comunidad han tenido que comprar turbinas “para jalar el agua”, tal es el caso de Yamile González, habitante de este sector, quién aseveró que a duras penas con la turbina llena baldes con agua para bañarse.
“Es agonizante estar sin agua porque hasta para cocinar es un suplicio porque uno necesita agua. Le toca a uno levantarse en la madrugada y colocar baldes en todas las plumas de la casa para agarrar la mayor cantidad de agua posible para los oficios del día”, manifestó la vallenata.
Precisó que la comunidad en varias ocasiones ha presentado la queja a Emdupar, pero la dificultad no ha sido resuelta por lo que “se encuentran desesperados” porque pagan un servicio que no lo tienen en su totalidad.
Al respecto, José María Arregoces, miembro de esta comunidad comentó que el “agua llega poquita y ni con la suficiente presión para subir al tanque aéreo” por lo que su casa se ha llenado de baldes, poncheras y botellones para recoger el agua que llega a su vivienda por dos o cuatro horas.
“Hasta la lavadora la lleno con agua para que mi esposa, mis dos hijos y yo nos podamos bañar. Es algo insólito que nosotros tengamos que hacer eso cuando pagamos recibos de $80.000, $90.000 y hasta $120.000 por el servicio. Emdupar viene a hacer mediciones y no nos resuelven el problema”, explicó.
Comentó que tiene un local de comidas rápidas en el sector de La Nevada y en esa zona sus empleados le han dicho que nunca se va el agua en sus casas. “Es un contraste grande porque aquí somos estrato cinco, los servicios son más costosos y no gozamos de un servicio normal de agua potable”.
Jorge Alberto Meza, residente del barrio Villalba desde hace 11 años, aseveró que viven una crisis con el servicio de agua potable desde hace tres años, la cual ha venido empeorando porque hay casas en las que llega y en otras no debido a que no tienen turbinas ni tanques de agua en donde puedan almacenarla.
“Hay una sentencia de la Corte Constitucional que manifiesta que en ningún lugar pueden suspender el servicio de agua potable. Debe mantenerse un mínimo vital para que las personas puedan subsistir en sus hogares, pero eso aquí no se cumple porque solo lo tenemos por tres horas hasta el otro día que venga” dijo Meza.
Con tristeza en su voz aseguró que está considerando mudarse porque “no es vida pasar esta penuria con el agua”. Este adulto mayor que tiene que arrear pesados baldes con agua y administrar el preciado líquido de manera minuciosa, puntualizó que en vez de bajar el precio de la factura este aumenta.
Por Namieh Baute Barrios
Los ciudadanos aseguraron que deben pagar recibos de hasta de $100.000 por el servicio de agua potable a pesar de que lo tienen por dos o cuatro horas al día.
Al borde del desespero están los residentes del barrio Villalba de la ciudad de Valledupar debido a que no cuentan de manera permanente con el servicio de agua potable en el sector. De acuerdo con la comunidad, el preciado líquido solo está en las ‘plumas’ de sus hogares entre dos y cuatro horas al día.
Así lo dio a conocer Aristides López, residente de este sector, quien aseveró que desde hace más de ocho días tienen racionamiento de agua. Acotando así que el líquido llega a sus tuberías domiciliarias en las horas de la madrugada y se va alrededor de las ocho de la mañana.
“Estamos todos los moradores del barrio Villalba preocupados por esta emergencia sanitaria porque solo tenemos agua por alrededor de cuatro horas. Al parecer hay manipulación de las válvulas que permiten el flujo del agua al barrio”, comentó López.
De acuerdo con la comunidad, presuntamente algunos funcionarios de la empresa Emdupar estarían manipulando las válvulas “para enviarle agua al barrio Francisco Javier”, el cual se encuentra ubicado a una larga distancia del barrio Villalba.
Debido a la falta de presión del agua y su aparente escasez, algunos miembros de esta comunidad han tenido que comprar turbinas “para jalar el agua”, tal es el caso de Yamile González, habitante de este sector, quién aseveró que a duras penas con la turbina llena baldes con agua para bañarse.
“Es agonizante estar sin agua porque hasta para cocinar es un suplicio porque uno necesita agua. Le toca a uno levantarse en la madrugada y colocar baldes en todas las plumas de la casa para agarrar la mayor cantidad de agua posible para los oficios del día”, manifestó la vallenata.
Precisó que la comunidad en varias ocasiones ha presentado la queja a Emdupar, pero la dificultad no ha sido resuelta por lo que “se encuentran desesperados” porque pagan un servicio que no lo tienen en su totalidad.
Al respecto, José María Arregoces, miembro de esta comunidad comentó que el “agua llega poquita y ni con la suficiente presión para subir al tanque aéreo” por lo que su casa se ha llenado de baldes, poncheras y botellones para recoger el agua que llega a su vivienda por dos o cuatro horas.
“Hasta la lavadora la lleno con agua para que mi esposa, mis dos hijos y yo nos podamos bañar. Es algo insólito que nosotros tengamos que hacer eso cuando pagamos recibos de $80.000, $90.000 y hasta $120.000 por el servicio. Emdupar viene a hacer mediciones y no nos resuelven el problema”, explicó.
Comentó que tiene un local de comidas rápidas en el sector de La Nevada y en esa zona sus empleados le han dicho que nunca se va el agua en sus casas. “Es un contraste grande porque aquí somos estrato cinco, los servicios son más costosos y no gozamos de un servicio normal de agua potable”.
Jorge Alberto Meza, residente del barrio Villalba desde hace 11 años, aseveró que viven una crisis con el servicio de agua potable desde hace tres años, la cual ha venido empeorando porque hay casas en las que llega y en otras no debido a que no tienen turbinas ni tanques de agua en donde puedan almacenarla.
“Hay una sentencia de la Corte Constitucional que manifiesta que en ningún lugar pueden suspender el servicio de agua potable. Debe mantenerse un mínimo vital para que las personas puedan subsistir en sus hogares, pero eso aquí no se cumple porque solo lo tenemos por tres horas hasta el otro día que venga” dijo Meza.
Con tristeza en su voz aseguró que está considerando mudarse porque “no es vida pasar esta penuria con el agua”. Este adulto mayor que tiene que arrear pesados baldes con agua y administrar el preciado líquido de manera minuciosa, puntualizó que en vez de bajar el precio de la factura este aumenta.
Por Namieh Baute Barrios