La iniciativa busca recuperar el espacio público y organizar en un nuevo lugar a los vendedores que por tanto tiempo han estado al margen de la avenida Los Militares.
Como parte de las medidas para hacer recuperación del suelo y espacio público en Valledupar que ha emprendido la administración local, durante la próxima semana se iniciará la reubicación de los más de 40 puestos de comidas que se han establecido sobre la avenida Los Militares, tanto en el exterior de la Institución José Eugenio Martínez como de la acequia La Solución.
Este comercio, que se había fortalecido en los últimos años en este sector del suroccidente de la ciudad, será trasladado a un predio del municipio ubicado en el barrio Villa Miriam. “Pudimos concertar de manera pacífica, de manera entendible y ellos han acatado la disposición del desalojo de estos señores”, expresó el secretario de Gobierno, Gonzalo Arzuza.
También se refirió a que el propósito que tienen con esta nueva ubicación es organizar una especie de punto de encuentro popular, modelo de proyecto concebido a través de contenedores, que les brinde a los vendedores calidad de vida y trabajo así como al usuario, a la vez que se recupera el espacio público que en esta zona ya presentaba una problemática desbordada entre la que se estaban camuflando vendedores de drogas según anunciaron las autoridades.
En cuanto a la percepción de la comunidad vecina donde serán ubicados estos puestos que en su mayoría son de comidas rápidas, el presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Villa Miriam, José Zuleta, aseguró que “todo el mundo está contento porque sienten una sensación de tranquilidad, sienten que se va a dar un uso adecuado al lote que por más de 30 años había estado sin adecuación”.
Zuleta, quien también trabaja de manera directa en la coordinación de este proyecto, explicó que buscan crear todo un ambiente atractivo para la comunidad, que cuente con alumbrado público, puntos de agua, baños portátiles, adecuación ornamental, una plaza central para los comensales y una zona recreacional para que sea un sitio de afluencia familiar.
Además, los vendedores recibirán capacitación de manipulación de alimentos y un reglamento interno a fin de que haya una buena convivencia.
La iniciativa busca recuperar el espacio público y organizar en un nuevo lugar a los vendedores que por tanto tiempo han estado al margen de la avenida Los Militares.
Como parte de las medidas para hacer recuperación del suelo y espacio público en Valledupar que ha emprendido la administración local, durante la próxima semana se iniciará la reubicación de los más de 40 puestos de comidas que se han establecido sobre la avenida Los Militares, tanto en el exterior de la Institución José Eugenio Martínez como de la acequia La Solución.
Este comercio, que se había fortalecido en los últimos años en este sector del suroccidente de la ciudad, será trasladado a un predio del municipio ubicado en el barrio Villa Miriam. “Pudimos concertar de manera pacífica, de manera entendible y ellos han acatado la disposición del desalojo de estos señores”, expresó el secretario de Gobierno, Gonzalo Arzuza.
También se refirió a que el propósito que tienen con esta nueva ubicación es organizar una especie de punto de encuentro popular, modelo de proyecto concebido a través de contenedores, que les brinde a los vendedores calidad de vida y trabajo así como al usuario, a la vez que se recupera el espacio público que en esta zona ya presentaba una problemática desbordada entre la que se estaban camuflando vendedores de drogas según anunciaron las autoridades.
En cuanto a la percepción de la comunidad vecina donde serán ubicados estos puestos que en su mayoría son de comidas rápidas, el presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Villa Miriam, José Zuleta, aseguró que “todo el mundo está contento porque sienten una sensación de tranquilidad, sienten que se va a dar un uso adecuado al lote que por más de 30 años había estado sin adecuación”.
Zuleta, quien también trabaja de manera directa en la coordinación de este proyecto, explicó que buscan crear todo un ambiente atractivo para la comunidad, que cuente con alumbrado público, puntos de agua, baños portátiles, adecuación ornamental, una plaza central para los comensales y una zona recreacional para que sea un sitio de afluencia familiar.
Además, los vendedores recibirán capacitación de manipulación de alimentos y un reglamento interno a fin de que haya una buena convivencia.