Este viernes 1 de noviembre, los comerciantes de disfraces y dulces del centro de Valledupar amanecieron haciendo cuentas de las ventas de Halloween o Día de los Niños que se celebró el 31 de octubre, y algunos de ellos expresaron a EL PILÓN que no tuvieron los resultados esperados. Por ejemplo, Carlos Gómez empezó a exhibir los disfraces 8 días antes de la noche de brujas y no alcanzó a vender todo, pero tiene la esperanza de que este fin de semana con puente festivo termine de comercializar sus productos, principalmente para infantes.  

“Sí se ha vendido, no como otros año, no sé si será la crisis económica, pero sí se ha vendido, como de pronto siguen haciendo fiestas, hoy sacamos otro poquito”, expresó Gómez, quien tuvo mayores ventas entre el 30 y el mismo 31 de octubre.  

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El Hombre Araña, Capitán América, Harley Quinn y Mario Bros fueron de los disfraces más vendidos en este caso, los precios oscilaron entre los $30.000 y los $80.000, rango estimado por la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) tras realizar una encuesta en las principales ciudades del país, en la cual el 42 % de los consultados manifestaron que disponían entre 100 mil y 200 mil pesos para compra de disfraces, accesorios y decoración. Un 30 % manifestó que la inversión era menor de 100 mil pesos; un 12 %, más de 200 mil pesos; un 9 % refirió reutilizar viejos disfraces y un 7 % los haría en casa.

“Primer año que veo así”: comerciante

A Robin Pedrosa también se le quedó gran parte de la mercancía en el estante en la carrera séptima: “En esta temporada nos fue malísimo, primer año que veo así, la economía está por el suelo”, dijo el hombre. Los productos de Pedrosa son accesorios como babuchas, medias veladas, alas, con precios de $8.000 y $10.000. “No saqué la mitad de la plata que invertí”, agregó. 

Este es un panorama complejo teniendo en cuenta que más de la mitad de los comerciantes de la ciudad trabajan bajo la informalidad. Sin embargo, en otros establecimientos de confitería, en el callejón de Pedro Rizo, uno de los comerciantes formales aseguró a esta casa editorial que a su negocio le fue bien, aunque entiende que no a todos les fue así. 

Confiterías 

Según el ciudadano, quien no quiso compartir su identidad, el 70 % de los confites que se vendieron eran de la línea económica, la mayoría chupetas, y solo el 30 % eran dulces ‘caros’.  “Este año se vio menos gente, pero se vendió más que el año pasado”, precisó. Juan Lara también administra un local de piñatería y confites, sitio del que despacharon, en su mayoría, decoraciones de telarañas y dulces surtidos con diseños de terror, pero no lograron superar las ventas del año anterior. 

“No fue tan bueno como lo esperábamos, de pronto por el tema que ha pasado con los niños, la gente está un poco inquieta y no han querido salir mucho por eso. Sin embargo, hubo ventas, hemos visto el espíritu de Halloween. Teníamos bolsitas de dulces desde $5.500 y más grandes a $11.000 y $21.000 con gran variedad”, explicó Lara. 

¿El derrotero de fin de año?

“Esta celebración será un primer indicativo de cómo los colombianos se preparan para las festividades de fin de año; se espera una fuerte recuperación en esta temporada, después de un año muy complicado”, indicó Fenalco nacional. Los comerciantes del centro también esperan mejores resultados en estos dos últimos meses del 2024. Aunque es preciso mencionar que los centros comerciales y muchos restaurantes y bares de la capital cesarense tuvieron más flujo de clientes que un jueves cotidiano. 

Por Redacción Económica.