Así lo manifestó la Asociación de Biotecnología Vegetal Agrícola, Agro-Bio.
En el 2023, Colombia alcanzó un total de 154.677 hectáreas sembradas de cultivos genéticamente modificados, de acuerdo con un reporte de la Asociación de Biotecnología Vegetal Agrícola, Agro-Bio, basado en cifras del Instituto Colombiano Agropecuario – ICA.
Según la organización, el maíz genéticamente modificado se consolidó como el cultivo líder con 142.711 hectáreas sembradas, abarcando el 36 % del total de hectáreas de maíz sembradas, y un 20 % más que en el 2022.
“La cifra de aumento en la superficie sembrada con maíz genéticamente modificado no solo mejora la competitividad de miles de pequeños y medianos agricultores que dependen de este cultivo, sino que también nos pone un paso más adelante en el largo camino que tenemos que recorrer para lograr cubrir la demanda nacional de maíz que cada año es mayor”, afirmó María Andrea Uscátegui, directora ejecutiva de Agro-Bio.
El algodón también fue sembrado, con un total en 7.409 hectáreas, aunque el porcentaje es menor que en el 2022, según el gremio de algodoneros. Por su parte, la soya alcanzó las 4.557 hectáreas sembradas.
Según Agro-Bio, el departamento del Meta sigue siendo el principal productor de productos genéticamente modificados en el país con un total de 61.338 de hectáreas sembradas en 2023, seguido de Tolima con 25.588; Córdoba con 24.521; Valle del Cauca con 14.707 hectáreas y Cesar con 12.041 hectáreas.
Así lo manifestó la Asociación de Biotecnología Vegetal Agrícola, Agro-Bio.
En el 2023, Colombia alcanzó un total de 154.677 hectáreas sembradas de cultivos genéticamente modificados, de acuerdo con un reporte de la Asociación de Biotecnología Vegetal Agrícola, Agro-Bio, basado en cifras del Instituto Colombiano Agropecuario – ICA.
Según la organización, el maíz genéticamente modificado se consolidó como el cultivo líder con 142.711 hectáreas sembradas, abarcando el 36 % del total de hectáreas de maíz sembradas, y un 20 % más que en el 2022.
“La cifra de aumento en la superficie sembrada con maíz genéticamente modificado no solo mejora la competitividad de miles de pequeños y medianos agricultores que dependen de este cultivo, sino que también nos pone un paso más adelante en el largo camino que tenemos que recorrer para lograr cubrir la demanda nacional de maíz que cada año es mayor”, afirmó María Andrea Uscátegui, directora ejecutiva de Agro-Bio.
El algodón también fue sembrado, con un total en 7.409 hectáreas, aunque el porcentaje es menor que en el 2022, según el gremio de algodoneros. Por su parte, la soya alcanzó las 4.557 hectáreas sembradas.
Según Agro-Bio, el departamento del Meta sigue siendo el principal productor de productos genéticamente modificados en el país con un total de 61.338 de hectáreas sembradas en 2023, seguido de Tolima con 25.588; Córdoba con 24.521; Valle del Cauca con 14.707 hectáreas y Cesar con 12.041 hectáreas.