El evento fue liderado por la Federación de Comerciantes del Cesar, la cual hace un llamado tanto a la administración municipal como departamental a involucrarse en el encadenamiento del sector productivo de la región.
Este fin de semana tuvo lugar el Segundo Encuentro Binacional de empresarios colombo-venezolanos en la ciudad de Valledupar, capital del departamento del Cesar, con el objetivo de ‘cerrar brechas y abrir caminos’ en el comercio de ambos países.
Uno de los resultados de la rueda de negocios liderada por la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) en el Cesar es el acercamiento comercial entre la empresa cesarense Cemento Vallenato y la compañía Guyana Maritime Services para analizar la posibilidad de transportar este insumo de construcción a otras partes del mundo.
“Ellos están contemplando a Valledupar como un potencial proveedor de cemento y caliza porque están buscando dónde hay piedras, cemento y distintos agregados que se utilizan en construcción y lo colocan donde tengan su cliente, en este caso sería en Guyana, pero andan por todo el Caribe, en Venezuela hacen varias paradas”, explicó Armando Morelli, representante de Cemento Vallenato.
El empresario agregó que no se trataría de “un negocio menor, no sería mandar una mula, sino establecer un suministro permanente de toneladas mensuales, pero eso es solo un acercamiento inicial, aún no se ha concretado”.
En el mercado vallenato están interesados en comprar clínker, un insumo esencial para fabricar cemento, pero que actualmente es importado y escaso. “Lo que se habló con ellos fue sentar una propuesta de compra y venta de mercancía: que en su barco traigan el clínker y nosotros le entregaríamos cemento y piedras para que se lleven el barco cargado”.
Uno de los retos de exportar el cemento que se produce en la Capital Mundial del Vallenato sería el empaque, el cual tendría que ser ajustado a las necesidades del comprador extranjero y las condiciones del transporte marítimo.
Aunque esta es solo una propuesta que tendrá que consolidarse, el director de Fenalco Cesar, Octavio Pico, se muestra optimista ante estas oportunidades que ha propiciado con la Cámara de Comercio de Valledupar, entre otras entidades del orden local y nacional.
“Lo de Cemento Vallenato y todos los que participaron es fortalecimiento empresarial, eso significa transversalmente, empleo, desarrollo e impuestos, pero la administración municipal y departamental, ausentes, entonces pregunto si no es de interés de la municipalidad”, expresó Pico Malaver.
En Valledupar, según expresó el líder gremial: “Deberíamos estar hablando de cursos sobre cómo exportar, ahí debería estar la Secretaría de Desarrollo Económico, Turismo y Medio Ambiente reuniendo a los empresarios porque toca encadenarnos”.
Lea: Negocios de cemento, carbón y agropecuarios, estarían en agenda colombovenezolana
Aunque hace seis meses inició la reapertura total de frontera entre Colombia y Venezuela, Morelli considera que el comercio en esta zona sigue siendo “complicado” por factores como la inseguridad en el trayecto hasta Paraguachón, un punto migratorio en el departamento de La Guajira.
“Poner la carga allá es un tema complicado y después, desde la frontera al destino final, entiendo que tampoco es nada sencillo”, puntualizó el comerciante.
Por Andrea Guerra Peña / EL PILÓN.
El evento fue liderado por la Federación de Comerciantes del Cesar, la cual hace un llamado tanto a la administración municipal como departamental a involucrarse en el encadenamiento del sector productivo de la región.
Este fin de semana tuvo lugar el Segundo Encuentro Binacional de empresarios colombo-venezolanos en la ciudad de Valledupar, capital del departamento del Cesar, con el objetivo de ‘cerrar brechas y abrir caminos’ en el comercio de ambos países.
Uno de los resultados de la rueda de negocios liderada por la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) en el Cesar es el acercamiento comercial entre la empresa cesarense Cemento Vallenato y la compañía Guyana Maritime Services para analizar la posibilidad de transportar este insumo de construcción a otras partes del mundo.
“Ellos están contemplando a Valledupar como un potencial proveedor de cemento y caliza porque están buscando dónde hay piedras, cemento y distintos agregados que se utilizan en construcción y lo colocan donde tengan su cliente, en este caso sería en Guyana, pero andan por todo el Caribe, en Venezuela hacen varias paradas”, explicó Armando Morelli, representante de Cemento Vallenato.
El empresario agregó que no se trataría de “un negocio menor, no sería mandar una mula, sino establecer un suministro permanente de toneladas mensuales, pero eso es solo un acercamiento inicial, aún no se ha concretado”.
En el mercado vallenato están interesados en comprar clínker, un insumo esencial para fabricar cemento, pero que actualmente es importado y escaso. “Lo que se habló con ellos fue sentar una propuesta de compra y venta de mercancía: que en su barco traigan el clínker y nosotros le entregaríamos cemento y piedras para que se lleven el barco cargado”.
Uno de los retos de exportar el cemento que se produce en la Capital Mundial del Vallenato sería el empaque, el cual tendría que ser ajustado a las necesidades del comprador extranjero y las condiciones del transporte marítimo.
Aunque esta es solo una propuesta que tendrá que consolidarse, el director de Fenalco Cesar, Octavio Pico, se muestra optimista ante estas oportunidades que ha propiciado con la Cámara de Comercio de Valledupar, entre otras entidades del orden local y nacional.
“Lo de Cemento Vallenato y todos los que participaron es fortalecimiento empresarial, eso significa transversalmente, empleo, desarrollo e impuestos, pero la administración municipal y departamental, ausentes, entonces pregunto si no es de interés de la municipalidad”, expresó Pico Malaver.
En Valledupar, según expresó el líder gremial: “Deberíamos estar hablando de cursos sobre cómo exportar, ahí debería estar la Secretaría de Desarrollo Económico, Turismo y Medio Ambiente reuniendo a los empresarios porque toca encadenarnos”.
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Aunque hace seis meses inició la reapertura total de frontera entre Colombia y Venezuela, Morelli considera que el comercio en esta zona sigue siendo “complicado” por factores como la inseguridad en el trayecto hasta Paraguachón, un punto migratorio en el departamento de La Guajira.
“Poner la carga allá es un tema complicado y después, desde la frontera al destino final, entiendo que tampoco es nada sencillo”, puntualizó el comerciante.
Por Andrea Guerra Peña / EL PILÓN.