El 5 de enero, el gremio de transportadores informó que momentáneamente descartaban un paro camionero. No obstante, los camioneros independientes del Santander anunciaron bloqueos en diversas vías del departamento vecino con el sur del Cesar. Esta decisión surge en medio de crecientes tensiones por el incumplimiento del Gobierno nacional respecto a un acuerdo firmado el 6 de septiembre de 2024. 

La manifestación está programada para comenzar a primera hora del 7 de enero, con puntos de bloqueo en localidades como Lebrija, Piedecuesta y San Alberto.

Oswaldo Pinilla, vocero de los transportadores de hidrocarburos, expresó a Blu Radio su descontento, afirmando que el Gobierno ha ofrecido “solo promesas” mientras se incrementan los precios del ACPM y los peajes, además de que las condiciones de las vías siguen deterioradas.

Pinilla enfatizó que los transportadores no se sienten representados por las organizaciones gremiales, quienes habían garantizado que no habría inconvenientes para los viajeros durante el regreso a casa tras las festividades. “Nosotros somos los pequeños transportadores, los dueños de uno o dos camiones, y somos los que realmente estamos afectados”, afirmó. 

Por su parte, el gremio de transportadores ha declarado estar en “asamblea permanente” y ha indicado que no han establecido una “hora cero” para el paro. Sin embargo, la presión sobre el Gobierno se intensifica debido a la falta de cumplimiento en quince puntos acordados durante la anterior movilización, incluyendo la actualización del SICETAC, un sistema crucial para calcular los costos del transporte. 

La ministra de Transporte ha afirmado que se han tomado medidas para atender las demandas del sector, pero muchos camioneros consideran que estas acciones son insuficientes.

El contexto es complicado: el incremento en el precio del ACPM y las tarifas de peaje ha aumentado lo costos. La ministra ha enumerado varias resoluciones implementadas para mejorar la situación; sin embargo, la percepción entre los camioneros es que estas medidas no han tenido un impacto real en sus operaciones diarias. 

Las autoridades en Santander han establecido un puesto de mando unificado para monitorear posibles bloqueos y garantizar la movilidad en la región. A medida que se acerca la fecha del paro, la incertidumbre crece tanto entre los transportadores como entre los viajeros en el primer puente festivo del año.

Por: Redacción EL PILÓN