Por ANNELISE BARRIGA RAMIREZ
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La Biblioteca Pública Departamental ‘Rafael Carrillo Lúquez’ amenaza con extinguirse ante el vencimiento de su vida jurídica, lo que preocupa a sus visitantes y funcionarios.

Esta entidad, sin ánimo de lucro, fue creada bajo la figura de corporación,  el 10 de junio del 2003 con una duración de 10 años, lo que significaría que el 10 de junio del presente año se terminaría el plazo pactado, lo que por ley, según juristas, conduce a la disolución y liquidación de la misma.

Esta situación pondría en riesgo la posibilidad de que cesarenses accedan de forma gratuita a más de 20 mil libros de diferentes áreas del conocimiento y a las actividades culturales que se realizan dentro de la institución; además, afectaría la vida laboral de 17 empleados que trabajan en ésta.

Por esta razón los corporados de la Biblioteca Biblioteca Pública Departamental ‘Rafael Carrillo Lúquez’(representantes de la Alcaldía, Gobernación y Universidad de Santander, UDES) han sido citados en varias oportunidades la pasada semana a Asamblea Extraordinaria, con el objeto de buscar mecanismos que le permitan seguir vigente, según manifestó la coordinadora del ente, Ruby Estela Sánchez Angarita.

Invitar a otras entidades (empresas privadas, universidades, banca, entre otras) a que se unan a la Corporación; prorrogarla por 10 años más; o cambiarle la razón social, son algunas de los planteamientos que han surgido de los encuentros, sin que hasta el momento exista una decisión definitiva.

¿Cómo se sostiene la Biblioteca?

Las diferentes actividades de la biblioteca son posibles gracias a un convenio con la Gobernación a través de la oficina de Coordinación de Cultura, que viabiliza un presupuesto determinado, explicó Sánchez Angarita. Así por ejemplo, el proyecto de este año se plasmó desde marzo hasta el 10 de junio por un monto aproximado de 400 millones de pesos.

“Aunque la Biblioteca Pública Departamental ‘Rafael Carrillo Lúquez’ posee tres corporados, el único que aporta económicamente es la Gobernación del Cesar, pese a que los estatutos establecen que todos deben aportar, lo que se ha convertido en una debilidad para la entidad.  La UDES en un momento dado brindó la experiencia y asesoría de profesionales que ayudaron al fortalecimiento de la entidad”, aseveró la Coordinadora de la Biblioteca.

Posibles repercusiones

Si los habitantes del Cesar dejaran de contar con la la Corporación Biblioteca Departamental ‘Rafael Carrillo Lúquez’ perderían:

• La posibilidad de tener a su disposición las salas: General, Infantil, literatura y patrimonial.
• El auditorio ‘Consuelo Araújo Noguera’ para la realización de eventos académicos y sociales.
• Espacios como Cita con la Música, Encuentro con Juglares; Parques Llenos, Viernes Culturales, los Cine Club de los martes, entre otros.
• Extensión bibliotecaria con colegios y centros sociales como El Cromi, la Casa de la Adolescente Embarazada, la cárcel, entre otras.
• Préstamo de salones para eventos relacionados con la lectura y la cultura.

¿Qué dicen los corporados?

El rector de la UDES seccional Cesar, Carlos Darío Morón Cuello, aseguró que el rumbo final de la Corporación Biblioteca Pública Departamental está en manos del alcalde de Valledupar, Fredys Socarrás Reales; y del gobernador del Cesar, Luis Alberto Monsalvo.

“El rector general de la UDES tiene toda la disposición de seguir vinculado a la Corporación y que ésta siga en funcionamiento, puesto que forma parte del patrimonio cultural, es un ícono de la ciudad, es un activo importante que debemos defender, no sólo nosotros como corporados sino toda la región, formando un colectivo integrado por colegios, universidades, industrias lácteas y mineras, ya que es un ente que beneficia a todos”, enfatizó.

Al indagarle sobre sus aportes a la entidad, dijo que inicialmente apoyaron con rubros  (cinco millones de pesos) y más adelante lo siguieron haciendo pero con mano de obra: Ingenieros y tecnólogos que hicieron todo el montaje de las TIC (Tecnologías de la Información y Comunicación). 

Por su parte, el coordinador de Cultura Municipal, Alberto Muñoz Peñaloza, como representante de la Alcaldía, manifestó que la idea es prorrogar la Corporación por 10 años más.

“La Biblioteca ha prestado servicios bien importantes a la comunidad del Cesar, por lo que se hace urgente resolver su situación jurídica”, precisó el funcionario, quien coincidió con el Rector de la UDES, al manifestar que cuando nació la entidad la Administración Municipal hizo un aporte económico (por cinco millones de pesos), pero que en los estatutos no se estableció la continuidad de los aportes, por lo que no lo han seguido haciendo.

Debilidades del ente

Entre las falencias que posee la Biblioteca, de acuerdo a su Coordinadora, están: Falta de recursos como la inexistencia de computadores e impresoras actualizadas por lo que necesitarían que los corporados respalden más a la entidad, pues los que están son viejos, viven dañados y requieren de mucho mantenimiento.

Otro de los aspectos por mejorar es la infraestructura. Sus instalaciones presentan humedad, sobre todo en la Sala Infantil; el primer, segundo y tercer piso tienen goteras que atentan con la durabilidad de los libros y elementos de la Biblioteca. “Este es un edificio que ya tiene 10 años, aunque le han hecho reparaciones, no son aptas para lo que necesita. Ya presentamos un proyecto de reparaciones locativas, especialmente de impermeabilización del techo”, afirmó Sánchez Angarita.

La Sala Infantil también presenta filtración del agua por un espacio que existe entre el Palacio de Justicia y la Biblioteca.

“Desde que asumí la Coordinación de la Biblioteca supe de la situación y trabajo desde ese día para mantenerla vigente. La idea es seguir adelante ‘contra viento y marea’ para el beneficio de la comunidad”: Ruby Estela Sánchez Angarita.

PUNTOS DE VISTA

Dairis Ovalle, psicóloga. “La Biblioteca es un templo de lectura que beneficia a grandes y chicos, por tal razón los gobernantes deben luchar por mantenerla vigente”.

Karina Ramírez, licenciada en Biología. “La Biblioteca es una entidad que presta muchos beneficios a la comunidad, en especial a la población estudiantil, que encuentra el lugar ideal para investigar. Todos debemos luchar para que se conserve”.