Aunque el contrato para la rehabilitación de la avenida Simón Bolívar en Valledupar tiene fecha de inicio del 7 de octubre de 2014, las obras físicas empezaron un mes después (7 de noviembre), con la intervención de 2,4 kilómetros que una vez terminados acabarían con el calvario que padecieron los conductores que durante años se movilizaron por esta vía llena de huecos.

Como reza en el contrato, la obra tiene un plazo de 16 meses, es decir que en febrero de 2016 deberían terminarla; sin embargo esta ha sufrido algunos atrasos y se necesita una adición en tiempo y recursos para poder cumplir con los trabajos. Fueron 29.600 millones de pesos inicialmente y se necesitan cinco mil más que se están gestionando.

Esta situación tiene molestos a algunos habitantes del sector que viven del comercio y aseguraron que por los trabajos en la vía, sus ventas han bajado. Eso, sin desconocer lo bueno de la obra una vez sea terminada. Lo que genera el inconformismo de los vecinos de la Simón Bolívar, son los atrasos que se han presentado pues ya llevan un año esperando que la vía sea habilitada por completo.

Entre los trabajos recientes se tienen: la pavimentación casi total del carril oriental y se encuentra habilitado en sentido norte- sur, permitiendo que los conductores transiten por la vía.

De igual manera, se inició la pavimentación en la calzada occidental de lo cual ya hay 60 metros en concreto. “La dinámica de trabajo en ese costado es mucho más rápido porque de este lado solamente hay que instalar el colector de aguas lluvias y una tubería muy pequeña de agua potable”, expresó Luis Gabriel Rivera Arias, gerente del Siva.

El funcionario dio a conocer que se necesitan siete meses más para terminar todos los trabajos faltantes en la obra, por lo que esperan terminar con el contrato a mediados de septiembre, debido a que hasta el momento va en un avance del 47 % en lo que es la calzada vehicular, siempre y cuando no se presenten más inconvenientes.

“En los espacios públicos, el avance de obra es menor porque es manual y vivimos haciendo convocatorias de vinculación de mano de obra porque es muy volátil y el contratista ha encontrado problemas con eso”, acotó Rivera Arias.

Tanto el Siva como el contratista de la obra y el interventor coinciden en afirmar que los atrasos de la obra se deben en buena parte a los problemas que han tenido con los catastros de las redes húmedas que maneja el municipio de Valledupar y que consideran inexactos y obsoletos pues no coinciden con lo que realmente han encontrado.

Otra de las cosas que atrasó la obra, según el Gerente del Siva, fue los problemas que tuvieron con la comunidad inicialmente. “Estuvieron parqueados más de un mes con un cajón y no pudimos avanzar mucho y reiteradamente la comunidad se quejaba hasta que aceptó definitivamente la obra”, acotó.

Son 220 personas las que trabajan actualmente en esta obra y el contratista aseguró que los trabajos van conforme a los alcances que han tenido. “Vamos con 300 metros de pavimento y casi 400 en asfalto. Esta semana estamos con 200 metros más de asfalto y estamos aumentando los rendimientos conforme a lo que fue la calzada oriental”, explicó Raúl Eduardo Franco, director de obra de la empresa contratista.

En cuanto al punto donde termina la obra, el Gerente del SIVA dio a conocer que no se intervendrá hasta la glorieta de La Ceiba, si no unos metros antes porque hay que definir más adelante si se expande esta intersección o si se hace un puente para regular el tráfico en ese sector. Dijo que esa parte le corresponde a la administración.

Placas agrietadas
Las obras de la avenida Simón Bolívar no han sido terminadas y ya algunos habitantes del sector se están quejando por las condiciones en que se encuentran algunas placas que se han agrietado, lo que genera desconfianza de la calidad de la obra en la comunidad.

Por esta situación, el ente gestor del Siva recibió un derecho de petición en el que piden explicación al respecto.

El Gerente de la entidad explicó que esta situación se debe a la manera en que se manipula el concreto pero eso no significa que vayan a tener una obra en malas condiciones. Esas lozas no se recibirán hasta que no se haga la reposición total. “Sobre eso siempre tenemos la interventoría, el contratista y el proveedor han respondido y han dado las garantías. Está todo bajo control”, indicó Luis Gabriel Rivera.

Por su parte, el interventor de la obra, Vincenzo Puccini Lucchesi, dijo que su función es exigir que se haga una obra de buena calidad. “Hemos tenido muchos tropiezos realmente por premura o presiones políticas y eso realmente influye en el acabado final y por eso se han presentado fisuras en algunas placas. Eso es lógico y típico de cualquier obra, pero estamos en pro de que se hagan las reparaciones y se cumplan los estándares de calidad exigidos”, acotó.

Otra de las quejas de la comunidad es la presunta reducción de las calzadas, por lo que el Siva aclaró que estas no se redujeron sino que los espacios que eran utilizados como parqueo, es decir el empedrado que nunca estuvo destinado para eso, desaparecieron y serán utilizados para tener andenes más anchos e implementar la ciclo-ruta.

Se refirió también a los cruces que fueron eliminados para mejorar el flujo vehicular y aseguró que sólo quedarán algunas intersecciones semafóricas y que le corresponde al tránsito priorizar los recursos para estas que estarán ubicadas en la calle 21, 28 y 36. “Ya hemos hecho la solicitud a esta dependencia y estamos esperando una respuesta”, dijo Rivera Arias.

No concuerdan los planos con lo que existe
El interventor de la obra habló de los atrasos que ha tenido la rehabilitación de la avenida Simón Bolívar, aseguró que son considerables por lo que se está solicitando una adición en tiempo y dinero, haciendo además una nueva reevaluación de lo que son las necesidades para atender las metas físicas.

“Hay muchos factores que han influido en el atraso. Primero por licencia, después por la falta de acompañamiento en lo que le compete a Emdupar con las redes húmedas que han sido muy deficientes porque no concuerdan los planos con lo que realmente existe y eso ha influido notoriamente”, acotó.

Por su parte, el Director de obra dijo que son muchos inconvenientes. “Desafortunadamente hemos encontrado tuberías que nos han atrasado el alcance de las obras porque no sabíamos que existían”, puntualizó.

Los proyectos que vienen
El SIVA dio a conocer que para mejorar la movilidad en la capital del Cesar se tienen varios proyectos que deben ser priorizados. El primero es la intervención de la 44 desde la glorieta de la Terminal hasta la carrera cuarta que empalma hasta el colegio Francisco Molina Sánchez. “Ya están comprometido esos recursos y se espera que el próximo mes se inicien las obras, por lo pronto estamos adelantando la socialización con la comunidad”, dijo Luis Gabriel Rivera.

Otro proyecto, que contará con el apoyo de la Gobernación del Cesar será la intervención de la carrera 27 hasta la urbanización de Nando Marín, para lo que se necesitan 19 mil millones de pesos para las redes más lo que cuesta la vía. “Eso son vías nuevas y son 2,5 kilómetros. Hay que hacer un esfuerzo grande”, acotó el funcionario.

Así mismo está la intervención de la avenida 450 Años que es un proyecto que está en el banco de proyectos de la Gobernación y fue viabilizado desde el 2015, por lo que hay que apropiar esos recursos para que se ejecute la obra.

En la misma avenida Simón Bolívar se realizará la rehabilitación del espacio público desde la glorieta de Los Músicos hasta la Pilonera Mayor; así como la recuperación de unos tramos viales y espacio público en el Centro Histórico de la ciudad.

Por último se refirió a la avenida Fundación que es otro proyecto pero no está priorizado para este año porque no se tiene claridad de dónde va a salir el recurso para las redes.

PUNTOS DE VISTA
Albeiro Alvear: Nos ha perjudicado en la demora. Tratándose de una vía pública era para que hubieran implementado dos turnos para agilizar, sobre todo por el comercio que se ha visto afectado. Del resto, va a ser muy bueno porque se va a mejorar el flujo vehicular.

Álvaro Areisa: Es una obra que nos ha beneficiado a pesar de las dificultades que hemos tenido con los clientes. Pero cuando se termine va a ser muy bueno para todos.

Aníbal Carvajalino: Es una obra muy buena pero están muy demorados los trabajos y nos tiene al borde de la locura porque las ventas se nos han bajado y ya llevamos un año así.

Miriam Carrascal: Es una buena obra pero ha demorado mucho en terminarla. Sin embargo una vez terminada nos va a beneficiar a todos los que vivimos por el sector.

El concreto de la avenida Simón Bolívar tiene un espesor entre 16 y 22 centímetros, dependiendo del suelo y una vida útil de 20 a 25 años.

Los atrasos que ha tenido la obra se deben en gran parte a que los planos de las redes húmedas no coinciden con lo que la empresa contratista ha encontrado en este sector de la ciudad.

Andreina Bandera / EL PILÓN
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