Esa misma noche, los molestos usuarios se dirigieron a la Alcaldía y con aerosoles marcaron la entrada principal, a manera de protesta.
Inconformes por las prolongadas interrupciones en el servicio de energía eléctrica, pobladores de Chimichagua, Cesar, destruyeron la noche del domingo ventanas y puertas de vidrio de la sede comercial de Electricaribe en el municipio.
Esa misma noche, los molestos usuarios se dirigieron a la Alcaldía y con aerosoles marcaron la entrada principal, a manera de protesta.
La molestia radica en que durante el pasado domingo, los chimichagüeros contaron con el servicio de energía y pese que en la noche fue activado, no fue constante. Lo que calificaron como un atropello y abuso por parte de Electricaribe.
A raíz del hecho, la empresa encargada de la comercialización de energía eléctrica, rechazó a través de comunicado de prensa las vías de hecho, argumentando que las interrupciones en el servicio se debieron a fuertes lluvias en la zona.
El gerente de Electricaribe en el Cesar, Ramiro Castilla Andrade, explicó que tras un mantenimiento programado durante el día se restableció el fluido eléctrico a las 5:30 de la tarde, pero un vendaval que azotó el sur del departamento sacó de operación los circuitos El Paso, Chimichagua, Astrea, Arjona y Chiriguaná.
El vocero señaló además que los inconvenientes con el servicio en las líneas 591, 593 y 594 también afectaron a poblaciones del sur del Magdalena. “Una vez identificados los daños, varias brigadas técnicas y de poda realizaron las labores oportunamente hasta restablecer la energía en su totalidad”.
Ante esta situación, la empresa Electricaribe hizo un llamado a las comunidades al diálogo y la concertación, teniendo en cuenta que la operación de las redes puede ser impactada por eventos de fuerza mayor.
Por Jennifer Polo / EL PILÓN
Esa misma noche, los molestos usuarios se dirigieron a la Alcaldía y con aerosoles marcaron la entrada principal, a manera de protesta.
Inconformes por las prolongadas interrupciones en el servicio de energía eléctrica, pobladores de Chimichagua, Cesar, destruyeron la noche del domingo ventanas y puertas de vidrio de la sede comercial de Electricaribe en el municipio.
Esa misma noche, los molestos usuarios se dirigieron a la Alcaldía y con aerosoles marcaron la entrada principal, a manera de protesta.
La molestia radica en que durante el pasado domingo, los chimichagüeros contaron con el servicio de energía y pese que en la noche fue activado, no fue constante. Lo que calificaron como un atropello y abuso por parte de Electricaribe.
A raíz del hecho, la empresa encargada de la comercialización de energía eléctrica, rechazó a través de comunicado de prensa las vías de hecho, argumentando que las interrupciones en el servicio se debieron a fuertes lluvias en la zona.
El gerente de Electricaribe en el Cesar, Ramiro Castilla Andrade, explicó que tras un mantenimiento programado durante el día se restableció el fluido eléctrico a las 5:30 de la tarde, pero un vendaval que azotó el sur del departamento sacó de operación los circuitos El Paso, Chimichagua, Astrea, Arjona y Chiriguaná.
El vocero señaló además que los inconvenientes con el servicio en las líneas 591, 593 y 594 también afectaron a poblaciones del sur del Magdalena. “Una vez identificados los daños, varias brigadas técnicas y de poda realizaron las labores oportunamente hasta restablecer la energía en su totalidad”.
Ante esta situación, la empresa Electricaribe hizo un llamado a las comunidades al diálogo y la concertación, teniendo en cuenta que la operación de las redes puede ser impactada por eventos de fuerza mayor.
Por Jennifer Polo / EL PILÓN