La avenida Simón Bolívar de Valledupar, una de las vías con mayor tráfico y concentración de locales comerciales de la ciudad, ha sido escenario constante de problemas de movilidad y orden público por el parqueo ilegal de vehículos, lo cual incrementa el riesgo de accidentes de tránsito. Sin embargo, esta situación podría mejorar con la habilitación de zonas azules en el sector.
Así lo anunció la Alcaldía de Valledupar, tras una reunión entre el secretario de Gobierno Municipal, Félix Valera, y 18 comerciantes de esta zona, quienes se comprometieron a mejorar desde sus actividades comerciales la convivencia y la movilidad en esta concurrida arteria vial.
“Moderar los decibeles de sus equipos, respetar las normas de espacio público y organizar el estacionamiento de motocicletas, fueron los compromisos adquiridos por 18 comerciantes. Con este ejercicio institucional buscamos promocionar escenarios de sana convivencia en este sector de alta actividad nocturna”, puntualizó la administración municipal.
En ese sentido, la Alcaldía también informó que, para optimizar la movilidad, se proyecta habilitar zonas azules nocturnas entre las 9 p. m., y las 2 a. m., con el fin de que los conductores puedan estacionar en una zona específica y reglamentaria sin obstaculizar el tráfico vehicular.
Además, el ente municipal estableció que quienes incumplan las normas no recibirán permisos de ampliación de horario y podrán ser objeto de sanciones.
Plan piloto
En el 2024, la Secretaría de Tránsito y Transporte Municipal, después de haber realizado un estudio de movilidad, habilitó zonas azules desde la calle 17 hasta el sector conocido como parque ‘Los Varaos’, con el propósito de facilitar la organización vehicular en el sector, y que no se vieran afectados los comerciantes y compradores con la imposición de multas por estacionamiento indebido.
A pesar de que se establecieron estas bahías, actualmente no tienen “una regulación clara”. Así lo manifestó Ricardo Reyes, presidente de la Junta Directiva de Fenalco, Cesar, quien precisó que la medida no está prestando el servicio como lo estipula la ley debido a que debe ser a través de un permiso temporal para que no termine volviéndose un “parqueadero permanente”.
“Después de dos derechos de petición y una tutela, la secretaría nunca certificó los estudios técnicos requeridos para la instalación de estas señales. En esa misma acción se hicieron cuatro solicitudes: la primera, el retiro inmediato de las señales de detección electrónica, y la sentencia salió a favor de los comerciantes de la carrera 11. Efectivamente, ellos retiraron las señales que no cumplían con los requisitos y habilitaron zonas azules que no se han regulado”, precisó Reyes.
¿Más zonas azules en Valledupar?
En la vigencia pasada, cuando se establecieron las bahías para la carrera 11, Fenalco le comunicó a la Alcaldía que dicho plan piloto también se debía implementar en otras zonas del municipio. “Se le pidió al secretario que también se le dé solución a sectores como la carrera 9, la avenida Simón Bolívar, la zona de celulares, el mercado, la Galería Popular, la avenida 19, entre otros”, informó Reyes en aquel entonces.
Dicha petición responde al Acuerdo Municipal 011, en el marco del POT, artículo 155, el cual establece que en los corredores de actividad comercial, de servicios y en el centro tradicional, el municipio debe delimitar y señalizar estos espacios de estacionamiento.
Recientemente, comerciantes del sector del Mercado Público de Valledupar, específicamente de la calle 21 con carrera 15, hicieron un llamado urgente al alcalde de Valledupar y a la Secretaría de Tránsito y Transporte Municipal, solicitando la creación de zonas azules que permitan el parqueo regulado de vehículos en esa zona tradicionalmente comercial de la ciudad.
Los afectados, en su mayoría propietarios de ferreterías y vendedores de productos de la canasta familiar, señalan que los clientes les manifiestan que es “muy complicado” parquear cerca de sus establecimientos para comprar alimentos debido a que corren el riesgo de ser multados. Lo que pone en peligro el sostenimiento de estos negocios que tienen más de 15 años de antigüedad.
Por Namieh Baute Barrios











