A pesar que la planta está en el norte del Cesar, es el sur del departamento el que lidera su utilización para el secamiento, trilla y almacenamiento del grano.
El gremio de arroceros del Cesar y La Guajira se reunió este fin de semana en Valledupar en la Asamblea General de Productores, en la cual eligieron a los miembros del Comité Seccional para los próximos dos años y a los delegados del XXXIX Congreso Nacional que será en diciembre en Bogotá.
Durante el evento, el presidente de la junta directiva de Fedearroz, José Vargas Zárate, y el gerente general de la organización, Rafael Hernández Lozano, expusieron un informe de la situación actual del cultivo de arroz en el país, pero también abordaron el panorama de la región, entregando datos sobre el ingreso del arroz paddy verde (con cáscara) a la planta de secamiento, trilla y almacenamiento ubicada en el corregimiento Valencia de Jesús, en Valledupar.
Según cifras oficiales, hasta el 13 de septiembre de este año habían ingresado 3.315 toneladas a este molino, la mayoría de ellas (1.260 toneladas) provenían de la producción del municipio de Aguachica, es decir, el 38 % de todo el arroz procesado en esta infraestructura.
En segundo lugar aparece Valledupar con 868 toneladas (26 % de lo almacenado) y le sigue el municipio de San Alberto, con 647 toneladas que equivalen a un 19 %. (Ver gráfica). A esta planta también llega materia prima de Fundación (Magdalena), Montería y otros lugares del departamento de Córdoba.
El gerente de Fedearroz anunció en el mes de junio la ampliación de la estructura, con una inversión de $4.600 millones provenientes de la subasta de Col-Rice. Por su parte, los mismos productores han hecho un llamado a que los agricultores del norte y centro del Cesar utilicen más este centro de acopio.
Lea: Molino de arroz en Valencia de Jesús será ampliado con una inversión de $4.600 millones
“Yo resalto la importancia de este molino de Valencia que se creó precisamente para los agricultores del norte, centro del Cesar y sur de La Guajira…, veo con alguna sorpresa de que lo están utilizando más la gente del sur del Cesar, entonces yo insisto a todos ustedes que están acá a que le vendamos realmente nuestra cosecha al molino o a la Federación”, expresó Carlos Oyana, productor de Chiriguaná, durante la reunión.
El agricultor agregó que el 70 % de su cosecha la vende en este molino administrado por Fedearroz, decisión que tomó luego de comparar los precios que manejan otros molinos de la zona.
“Los precios de la Federación están por encima de los molinos de la zona, entonces no me explico por qué nuestros pequeños y medianos agricultores no utilizan o no han estado utilizando de manera más eficiente el molino que se creó precisamente para esta zona”, anotó Oyana.
Es preciso recordar que gran parte del arroz producido en Aguachica se ha procesado en Santander, pero parte del gremio optó por hacerlo en Valledupar, lo cual se debe, según Hernández, a diferentes factores, entre ellos un mejor pago, atención y trato.
“Es la confianza que le da a un agricultor llevar el arroz a su casa, a su gremio, donde va a tener un tratamiento como lo merece. Ojalá pudiéramos comprar 300.000 toneladas de arroz en el país y mirar cuáles son los cambios en la comercialización”, dijo el gerente general.
Por Redacción EL PILÓN.
A pesar que la planta está en el norte del Cesar, es el sur del departamento el que lidera su utilización para el secamiento, trilla y almacenamiento del grano.
El gremio de arroceros del Cesar y La Guajira se reunió este fin de semana en Valledupar en la Asamblea General de Productores, en la cual eligieron a los miembros del Comité Seccional para los próximos dos años y a los delegados del XXXIX Congreso Nacional que será en diciembre en Bogotá.
Durante el evento, el presidente de la junta directiva de Fedearroz, José Vargas Zárate, y el gerente general de la organización, Rafael Hernández Lozano, expusieron un informe de la situación actual del cultivo de arroz en el país, pero también abordaron el panorama de la región, entregando datos sobre el ingreso del arroz paddy verde (con cáscara) a la planta de secamiento, trilla y almacenamiento ubicada en el corregimiento Valencia de Jesús, en Valledupar.
Según cifras oficiales, hasta el 13 de septiembre de este año habían ingresado 3.315 toneladas a este molino, la mayoría de ellas (1.260 toneladas) provenían de la producción del municipio de Aguachica, es decir, el 38 % de todo el arroz procesado en esta infraestructura.
En segundo lugar aparece Valledupar con 868 toneladas (26 % de lo almacenado) y le sigue el municipio de San Alberto, con 647 toneladas que equivalen a un 19 %. (Ver gráfica). A esta planta también llega materia prima de Fundación (Magdalena), Montería y otros lugares del departamento de Córdoba.
El gerente de Fedearroz anunció en el mes de junio la ampliación de la estructura, con una inversión de $4.600 millones provenientes de la subasta de Col-Rice. Por su parte, los mismos productores han hecho un llamado a que los agricultores del norte y centro del Cesar utilicen más este centro de acopio.
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“Yo resalto la importancia de este molino de Valencia que se creó precisamente para los agricultores del norte, centro del Cesar y sur de La Guajira…, veo con alguna sorpresa de que lo están utilizando más la gente del sur del Cesar, entonces yo insisto a todos ustedes que están acá a que le vendamos realmente nuestra cosecha al molino o a la Federación”, expresó Carlos Oyana, productor de Chiriguaná, durante la reunión.
El agricultor agregó que el 70 % de su cosecha la vende en este molino administrado por Fedearroz, decisión que tomó luego de comparar los precios que manejan otros molinos de la zona.
“Los precios de la Federación están por encima de los molinos de la zona, entonces no me explico por qué nuestros pequeños y medianos agricultores no utilizan o no han estado utilizando de manera más eficiente el molino que se creó precisamente para esta zona”, anotó Oyana.
Es preciso recordar que gran parte del arroz producido en Aguachica se ha procesado en Santander, pero parte del gremio optó por hacerlo en Valledupar, lo cual se debe, según Hernández, a diferentes factores, entre ellos un mejor pago, atención y trato.
“Es la confianza que le da a un agricultor llevar el arroz a su casa, a su gremio, donde va a tener un tratamiento como lo merece. Ojalá pudiéramos comprar 300.000 toneladas de arroz en el país y mirar cuáles son los cambios en la comercialización”, dijo el gerente general.
Por Redacción EL PILÓN.