Este 19 de noviembre se conmemoran 46 años de este claustro que tiene una medida de inspección y vigilancia del Ministerio de Educación Nacional, MEN.
La bacterióloga Hedilka Jiménez Ríos asumió el cargo de vicerrectora académica de la Universidad Popular del Cesar, UPC, en julio de este año con el objetivo de “elevar la calidad educativa”.
Cuatro meses después de su posesión, EL PILÓN entrevistó a Jiménez Ríos para conocer cómo avanza su gestión.
La funcionaria aseguró que está trabajando para mejorar diferentes indicadores educativos; reconoce casos de docentes con 15 años de vinculación, pero que no han continuado formándose.
Cuando busqué el Plan de Desarrollo 2017-2026 encontré que debemos mejorar la formación de nuestros profesores, sobre todo la de los ocasionales, de medio tiempo y tiempo completo que son los que han tenido una vinculación con la universidad de 5, 10, 15 y más años, por alguna razón no han aumentado sus niveles de formación y es necesario que lo hagan para que los planes de estudio puedan mejorar en los diferentes programas.
Nuestra meta es trabajar alineados con la Vicerrectoría de Investigación y Extensión para que podamos tener metas claras con cada uno de los programas y sus planes de estudio. Hay que elevar el rigor académico para que los promedios de los estudiantes sean mejores.
Es que en la costa Caribe es muy difícil la educación en maestrías y doctorados por los costos y la pertinencia de los programas.
La educación en Colombia está más ubicada hacia la región Andina porque la mayoría de los posgrados buenos se concentran entre Bogotá, Medellín, Bucaramanga… ni siquiera alcanza el bolsillo para trasladarse cada ocho o quince días a ciudades más cercanas como Barranquilla.
Por eso estamos haciendo convenios con algunas universidades para ver qué descuentos podemos obtener para lograr mejorar la formación avanzada de los profesores.
Los tipos de maestrías o doctorados que deben hacer los profesores, según los perfiles que faltan, los deben definir los directores de departamentos con los decanos, sin obligar a los docentes, obviamente, pero sí orientándolos porque los vamos a apoyar como universidad.
Tenemos dos programas acreditados: Licenciatura en Matemática y el programa de Lengua Castellana y Literatura.
Pero los pares académicos del Ministerio de Educación nos evaluaron recientemente los programas de Ingeniería Agroindustrial y Electrónica. La visita al programa de Microbiología está agendada. Estarían pendientes Enfermería e Ingeniería de Sistemas, este último en la seccional Aguachica.
Vamos bien porque el Ministerio dice que con siete programas podemos acreditarnos institucionalmente, pero tenemos una medida de inspección y vigilancia del Gobierno nacional que esperamos que levanten para salir de esa nube negra en la que hemos estado.
Por Andrea Guerra Peña / EL PILÓN.
Este 19 de noviembre se conmemoran 46 años de este claustro que tiene una medida de inspección y vigilancia del Ministerio de Educación Nacional, MEN.
La bacterióloga Hedilka Jiménez Ríos asumió el cargo de vicerrectora académica de la Universidad Popular del Cesar, UPC, en julio de este año con el objetivo de “elevar la calidad educativa”.
Cuatro meses después de su posesión, EL PILÓN entrevistó a Jiménez Ríos para conocer cómo avanza su gestión.
La funcionaria aseguró que está trabajando para mejorar diferentes indicadores educativos; reconoce casos de docentes con 15 años de vinculación, pero que no han continuado formándose.
Cuando busqué el Plan de Desarrollo 2017-2026 encontré que debemos mejorar la formación de nuestros profesores, sobre todo la de los ocasionales, de medio tiempo y tiempo completo que son los que han tenido una vinculación con la universidad de 5, 10, 15 y más años, por alguna razón no han aumentado sus niveles de formación y es necesario que lo hagan para que los planes de estudio puedan mejorar en los diferentes programas.
Nuestra meta es trabajar alineados con la Vicerrectoría de Investigación y Extensión para que podamos tener metas claras con cada uno de los programas y sus planes de estudio. Hay que elevar el rigor académico para que los promedios de los estudiantes sean mejores.
Es que en la costa Caribe es muy difícil la educación en maestrías y doctorados por los costos y la pertinencia de los programas.
La educación en Colombia está más ubicada hacia la región Andina porque la mayoría de los posgrados buenos se concentran entre Bogotá, Medellín, Bucaramanga… ni siquiera alcanza el bolsillo para trasladarse cada ocho o quince días a ciudades más cercanas como Barranquilla.
Por eso estamos haciendo convenios con algunas universidades para ver qué descuentos podemos obtener para lograr mejorar la formación avanzada de los profesores.
Los tipos de maestrías o doctorados que deben hacer los profesores, según los perfiles que faltan, los deben definir los directores de departamentos con los decanos, sin obligar a los docentes, obviamente, pero sí orientándolos porque los vamos a apoyar como universidad.
Tenemos dos programas acreditados: Licenciatura en Matemática y el programa de Lengua Castellana y Literatura.
Pero los pares académicos del Ministerio de Educación nos evaluaron recientemente los programas de Ingeniería Agroindustrial y Electrónica. La visita al programa de Microbiología está agendada. Estarían pendientes Enfermería e Ingeniería de Sistemas, este último en la seccional Aguachica.
Vamos bien porque el Ministerio dice que con siete programas podemos acreditarnos institucionalmente, pero tenemos una medida de inspección y vigilancia del Gobierno nacional que esperamos que levanten para salir de esa nube negra en la que hemos estado.
Por Andrea Guerra Peña / EL PILÓN.