El martes 4 de octubre, en la Asamblea departamental se llevó a cabo un debate de control político para conocer detalles de la construcción y ampliación de la sala de urgencias del Hospital Rosario Pumarejo de López, HRPL, de Valledupar. En esta sesión se conoció que existen diferencias porcentuales y presupuestales.

Ante esto, Esther Mendoza, la secretaria de Infraestructura departamental, mencionó: “El porcentaje de la ejecución es claro. El avance físico ejecutado es del 45,30% y el programado es de 29,00%”. 

Por otro lado, y teniendo en cuenta que existen diferencias entre el avance financiero (55,04%) y el físico (31,85%), afirmó: “Si uno comienza con el anticipo es evidente que va a haber 40%  de avance financiero y 0% de avance en obra, realmente siempre vamos a estar desfasados”. 

Por su parte, el agente especial interventor del hospital, Duver Vargas, quien funge como gerente, señaló que, considerando que la sala de urgencias es la puerta de entrada de la ESE, su construcción debe ejecutarse con la mayor celeridad, brevedad y agilidad posible. 

“Tenemos conocimiento de que, efectivamente, se reactivó la obra a partir del 23 de septiembre y desde hace un mes, de manera paralela y en articulación con las secretarías, venimos trabajando en la dotación biomédica de este servicio. Estamos en conversación con el ente departamental para definir la fuente de financiación y la modalidad de contratación; por ahora tenemos alrededor de 500 equipos biomédicos que se requieren y que equivalen a casi $4.600 millones, según el estudio de mercado”, puntualizó el profesional elegido por la Superintendencia Nacional de Salud para intervenir el centro médico.

Asimismo, manifestó que esta será una de las salas de urgencias más grandes del país, la cual contará con 80 camillas para atender a mujeres embarazadas, adultos, niños y demás personas. “Debemos ir pensando en que una vez se inaugure esta sala de urgencias hay que ampliar la capacidad instalada hospitalaria”.