Este 2022 representa un reto grande en temas ambientales, tanto para los veedores de la naturaleza como para las entidades competentes.
Ante un 2021 tan crítico en temas ambientales en Valledupar, la necesidad de implementar políticas públicas que permitan mejorar la calidad de nuestros recursos naturales crece desenfrenadamente al compás de los días.
Sin embargo, hay que dejar claro que para lograr este objetivo es indispensable generar conciencia y compromiso interinstitucional y ciudadano para que, en un futuro no muy lejano, la capital del Cesar sea reconocida por ser una ciudad limpia.
El Foro Ambiental del Cesar, colectivo que se ha convertido en protector y veedor de la naturaleza de Valledupar, mencionó que este 2022 la ‘batalla por el medio ambiente’ continúa, y a través de sus redes sociales manifestaron: “Se requiere voluntad política y una institucionalidad fuerte y capaz de afrontar estos desafíos, con miras a la protección del medio ambiente en nuestro territorio”.
Sin lugar a dudas Valledupar se ha ido reconociendo como una ciudad verde debido a sus innumerables árboles de todas las especies y colores, sin embargo, en esta misma ciudad desde hace un tiempo se vienen denunciando unas podas de árboles antitécnicas, calificadas de esa manera por la secretaria de Desarrollo Económico, Medio Ambiente y Turismo local, Emma Carrascal.
“Ya hemos realizado unas revisiones con Afinia, Interaseo y Corpocesar para el tema de las podas, porque se están haciendo muy agresivas, además, no les están echando los sellantes y por ahí se nos están apolillando los árboles.
También se están haciendo podas muy agresivas por parte de los ciudadanos y estamos revisando de qué manera podemos tener un contrato con una persona que nos genere una poda técnica que proteja los árboles”, sostuvo la funcionaria.
Uno de los temas que más ha generado controversia e inconformidad en la ciudadanía, es la aún inconclusa escombrera municipal, la cual durante muchos años han esperado los vallenatos con la ilusión de que los 33 puntos críticos convertidos en basureros a cielo abierto a lo largo y ancho de la ciudad, puedan desaparecer y con ello erradicar también la crisis de salubridad que de allí se deriva.
Al respecto, la secretaria de Desarrollo Económico, indicó: “Una de las metas más grandes que tenemos este año es poner a funcionar la escombrera municipal, ya que con esta solucionamos la meta del Plan de Desarrollo; la reconversión laboral, debido a que la empresa que entre a operar tendría la obligación de emplear y capacitar a los carromuleros; y además, solucionaríamos el tema de salubridad”.
Siguiendo con su intervención, la funcionaria explicó que los 8 puntos limpios que se requieren para que la escombrera municipal entre en funcionamiento ya están habilitados, sin embargo, otro de los requisitos para que este ‘sueño’ de los vallenatos se cumpla depende de la negociación de terceros.
“Para habilitar los 8 puntos limpios teníamos que inscribir el Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos, Pegir, ante Corpocesar, y ya lo hicimos, es decir, ya están habilitados, de igual forma, el lugar donde estará ubicada la escombrera. Pero como sabemos, el espacio de la escombrera municipal es de un privado y los 8 puntos satélites deben ser operados por un privado también, ellos tienen que hacer una negociación.
Inicialmente Interaseo, que tiene toda la infraestructura, estaba negociando con el privado para ser el operador de estos 8 puntos, pero no llegaron a un acuerdo; así que nos trajimos a una universidad de Bogotá que trajo una propuesta, ellos van a hacer una prueba piloto aquí en Valledupar para replicarla en toda la Costa.
Ellos serían los encargados de hacer el cerramiento y vigilancia de los puntos, recepción y clasificación de los residuos, de alimentar la escombrera y allá se haría el aprovechamiento de los residuos”, explicó.
En ese sentido, advirtió que “la parte municipal ya está lista, solo falta un acuerdo que debe hacerse entre el municipio y Emdupar, para permitir que estas personas sean los operadores”. No está de más decir que al entrar en funcionamiento la escombrera se necesita conciencia y costumbre ciudadana para no arrojar desechos y escombros en lugares no habilitados, para esto se impondrán sanciones ambientales.
A raíz de la contaminación que se evidencia en la margen derecha del río Guatapurí, lugar en el que son arrojados desechos, escombros y todo tipo de basura, la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, ha interpuesto varias medidas sancionatorias y pecuniarias a la Alcaldía de Valledupar como principal responsable.
De ese modo, a través de la Resolución 165 del 27 de agosto de 2019 se impuso a la entidad municipal, además de la multa, una medida compensatoria consistente en la reforestación de la margen derecha, sin embargo, no ha sido cumplida.
Ante esto, EL PILÓN dialogó con Emma Carrascal para conocer los motivos por los cuales no se ha llevado a cabo la reforestación impuesta por la máxima autoridad ambiental del Cesar.
“Como administración tenemos una deuda y es la reforestación de la margen derecha. En el mes de diciembre recibimos 7.370 árboles para hacerla, el Ideam nos había dicho que en noviembre, diciembre y enero estaríamos en el fenómeno de la niña, pero por alguna razón en todas las partes del país está lloviendo menos en la costa, por lo que no pudimos hacer la siembra; esta se hará cuando sea temporada de lluvias”.
“Nos hemos quedado cortos, no logramos todo lo que hubiéramos querido lograr”, dijo la funcionaria, quien afirmó que a pesar de todos los esfuerzos que se han gestado desde la sectorial, no se ha logrado el objetivo, sin embargo, indicó que esto se debe a que el medio ambiente de la ciudad estuvo abandonado durante mucho tiempo y hoy en día las deudas son altísimas.
“Yo le pido a la ciudadanía que me tenga paciencia, llevo 7 meses en el cargo y traigo unas cargas ambientales de hace 30 años”, finalizó.
Ketty Gutiérrez Maestre/EL PILÓN
Este 2022 representa un reto grande en temas ambientales, tanto para los veedores de la naturaleza como para las entidades competentes.
Ante un 2021 tan crítico en temas ambientales en Valledupar, la necesidad de implementar políticas públicas que permitan mejorar la calidad de nuestros recursos naturales crece desenfrenadamente al compás de los días.
Sin embargo, hay que dejar claro que para lograr este objetivo es indispensable generar conciencia y compromiso interinstitucional y ciudadano para que, en un futuro no muy lejano, la capital del Cesar sea reconocida por ser una ciudad limpia.
El Foro Ambiental del Cesar, colectivo que se ha convertido en protector y veedor de la naturaleza de Valledupar, mencionó que este 2022 la ‘batalla por el medio ambiente’ continúa, y a través de sus redes sociales manifestaron: “Se requiere voluntad política y una institucionalidad fuerte y capaz de afrontar estos desafíos, con miras a la protección del medio ambiente en nuestro territorio”.
Sin lugar a dudas Valledupar se ha ido reconociendo como una ciudad verde debido a sus innumerables árboles de todas las especies y colores, sin embargo, en esta misma ciudad desde hace un tiempo se vienen denunciando unas podas de árboles antitécnicas, calificadas de esa manera por la secretaria de Desarrollo Económico, Medio Ambiente y Turismo local, Emma Carrascal.
“Ya hemos realizado unas revisiones con Afinia, Interaseo y Corpocesar para el tema de las podas, porque se están haciendo muy agresivas, además, no les están echando los sellantes y por ahí se nos están apolillando los árboles.
También se están haciendo podas muy agresivas por parte de los ciudadanos y estamos revisando de qué manera podemos tener un contrato con una persona que nos genere una poda técnica que proteja los árboles”, sostuvo la funcionaria.
Uno de los temas que más ha generado controversia e inconformidad en la ciudadanía, es la aún inconclusa escombrera municipal, la cual durante muchos años han esperado los vallenatos con la ilusión de que los 33 puntos críticos convertidos en basureros a cielo abierto a lo largo y ancho de la ciudad, puedan desaparecer y con ello erradicar también la crisis de salubridad que de allí se deriva.
Al respecto, la secretaria de Desarrollo Económico, indicó: “Una de las metas más grandes que tenemos este año es poner a funcionar la escombrera municipal, ya que con esta solucionamos la meta del Plan de Desarrollo; la reconversión laboral, debido a que la empresa que entre a operar tendría la obligación de emplear y capacitar a los carromuleros; y además, solucionaríamos el tema de salubridad”.
Siguiendo con su intervención, la funcionaria explicó que los 8 puntos limpios que se requieren para que la escombrera municipal entre en funcionamiento ya están habilitados, sin embargo, otro de los requisitos para que este ‘sueño’ de los vallenatos se cumpla depende de la negociación de terceros.
“Para habilitar los 8 puntos limpios teníamos que inscribir el Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos, Pegir, ante Corpocesar, y ya lo hicimos, es decir, ya están habilitados, de igual forma, el lugar donde estará ubicada la escombrera. Pero como sabemos, el espacio de la escombrera municipal es de un privado y los 8 puntos satélites deben ser operados por un privado también, ellos tienen que hacer una negociación.
Inicialmente Interaseo, que tiene toda la infraestructura, estaba negociando con el privado para ser el operador de estos 8 puntos, pero no llegaron a un acuerdo; así que nos trajimos a una universidad de Bogotá que trajo una propuesta, ellos van a hacer una prueba piloto aquí en Valledupar para replicarla en toda la Costa.
Ellos serían los encargados de hacer el cerramiento y vigilancia de los puntos, recepción y clasificación de los residuos, de alimentar la escombrera y allá se haría el aprovechamiento de los residuos”, explicó.
En ese sentido, advirtió que “la parte municipal ya está lista, solo falta un acuerdo que debe hacerse entre el municipio y Emdupar, para permitir que estas personas sean los operadores”. No está de más decir que al entrar en funcionamiento la escombrera se necesita conciencia y costumbre ciudadana para no arrojar desechos y escombros en lugares no habilitados, para esto se impondrán sanciones ambientales.
A raíz de la contaminación que se evidencia en la margen derecha del río Guatapurí, lugar en el que son arrojados desechos, escombros y todo tipo de basura, la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, ha interpuesto varias medidas sancionatorias y pecuniarias a la Alcaldía de Valledupar como principal responsable.
De ese modo, a través de la Resolución 165 del 27 de agosto de 2019 se impuso a la entidad municipal, además de la multa, una medida compensatoria consistente en la reforestación de la margen derecha, sin embargo, no ha sido cumplida.
Ante esto, EL PILÓN dialogó con Emma Carrascal para conocer los motivos por los cuales no se ha llevado a cabo la reforestación impuesta por la máxima autoridad ambiental del Cesar.
“Como administración tenemos una deuda y es la reforestación de la margen derecha. En el mes de diciembre recibimos 7.370 árboles para hacerla, el Ideam nos había dicho que en noviembre, diciembre y enero estaríamos en el fenómeno de la niña, pero por alguna razón en todas las partes del país está lloviendo menos en la costa, por lo que no pudimos hacer la siembra; esta se hará cuando sea temporada de lluvias”.
“Nos hemos quedado cortos, no logramos todo lo que hubiéramos querido lograr”, dijo la funcionaria, quien afirmó que a pesar de todos los esfuerzos que se han gestado desde la sectorial, no se ha logrado el objetivo, sin embargo, indicó que esto se debe a que el medio ambiente de la ciudad estuvo abandonado durante mucho tiempo y hoy en día las deudas son altísimas.
“Yo le pido a la ciudadanía que me tenga paciencia, llevo 7 meses en el cargo y traigo unas cargas ambientales de hace 30 años”, finalizó.
Ketty Gutiérrez Maestre/EL PILÓN