Una de las tradiciones en la Semana Mayor como lo es comer dulces típicos sirvió para reactivar la economía de esas mujeres especialistas en la ‘cocina dulce’.
La feria gastronómica ‘Valledupar en boca de todos’ versión dulce en el marco de la Semana Santa, desarrollada en diferentes parques de la ciudad, benefició a más de 100 mujeres cabezas de hogar.
Así lo aseguraron los organizadores de la actividad: los representantes de la Oficina de Cultura y la Secretaría de Gobierno de Valledupar, la fundación La Matrona y sus Mujeres Artesanas luego de cumplir los protocolos de bioseguridad en los 50 puntos de venta en los parques El Viajero, los Algarrobillos, Garupal, Primero de Mayo, La Provincia y el parque de las Madres.
Cabe recordar que la fundación La Matrona y sus Mujeres Artesanas realizan desde el año 1996 la tradicional Feria del Dulce en la plaza Alfonso López durante la Semana Mayor, pero este año fue distribuido en diferentes sectores de la ciudad por la contingencia del covid-19.
Lee aquí también: Los dulces ‘santos’ se tomaron a Valledupar
Anteriormente, las recetas eran compartidas de generación en generación con el propósito de preservar la tradición, sin embargo este pensamiento ha ido evolucionando y el comercio ha tomado ventaja, convirtiéndose la elaboración de los dulces en una forma de ganarse la vida.
Por otro lado, un importante movimiento se dio en el Callejón de la Purrututú, en donde ya están en su recta final los murales que hacen parte del Plan de Embellecimiento del centro histórico y del barrio Cañahuate impulsado por la administración municipal a través de la Oficina de Cultura con el que se busca convertir esta zona de Valledupar en un distrito artístico y cultural.
“Nos complace mucho que los vallenatos hayan disfrutado durante la Semana Santa de los distintos murales que instalamos en el callejón de la Purrututú y en la carrera cuarta con calle 11, este último en honor al maestro Jorge Oñate, y que hacen parte del plan de embellecimiento del Centro Histórico abanderado por el alcalde Mello Castro”, puntualizó el jefe de la Oficina de Cultura, Carlos Liñan.
Una de las tradiciones en la Semana Mayor como lo es comer dulces típicos sirvió para reactivar la economía de esas mujeres especialistas en la ‘cocina dulce’.
La feria gastronómica ‘Valledupar en boca de todos’ versión dulce en el marco de la Semana Santa, desarrollada en diferentes parques de la ciudad, benefició a más de 100 mujeres cabezas de hogar.
Así lo aseguraron los organizadores de la actividad: los representantes de la Oficina de Cultura y la Secretaría de Gobierno de Valledupar, la fundación La Matrona y sus Mujeres Artesanas luego de cumplir los protocolos de bioseguridad en los 50 puntos de venta en los parques El Viajero, los Algarrobillos, Garupal, Primero de Mayo, La Provincia y el parque de las Madres.
Cabe recordar que la fundación La Matrona y sus Mujeres Artesanas realizan desde el año 1996 la tradicional Feria del Dulce en la plaza Alfonso López durante la Semana Mayor, pero este año fue distribuido en diferentes sectores de la ciudad por la contingencia del covid-19.
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Anteriormente, las recetas eran compartidas de generación en generación con el propósito de preservar la tradición, sin embargo este pensamiento ha ido evolucionando y el comercio ha tomado ventaja, convirtiéndose la elaboración de los dulces en una forma de ganarse la vida.
Por otro lado, un importante movimiento se dio en el Callejón de la Purrututú, en donde ya están en su recta final los murales que hacen parte del Plan de Embellecimiento del centro histórico y del barrio Cañahuate impulsado por la administración municipal a través de la Oficina de Cultura con el que se busca convertir esta zona de Valledupar en un distrito artístico y cultural.
“Nos complace mucho que los vallenatos hayan disfrutado durante la Semana Santa de los distintos murales que instalamos en el callejón de la Purrututú y en la carrera cuarta con calle 11, este último en honor al maestro Jorge Oñate, y que hacen parte del plan de embellecimiento del Centro Histórico abanderado por el alcalde Mello Castro”, puntualizó el jefe de la Oficina de Cultura, Carlos Liñan.