Para verificar cuál es el tratamiento que le dan a las aguas residuales que son arrojadas a la red de alcantarillado de Valledupar y cómo es la disposición final en el río Cesar, la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, adelanta seguimiento y control a establecimientos como lavaderos de vehículos, clínicas, hospitales, empresas lácteas, restaurantes, entre otros.

La entidad se apoya en conjunto con Emdupar y la Policía Nacional para además de verificar dicho procedimiento, orientar a los usuarios en el cumplimiento de los documentos y procedimientos que debe realizar para lograr  disminuir las cargas contaminantes que se vierten dicha fuente hídrica.

“Es importante que se trabaje con los usuarios que hacen vertimientos de aguas residuales no domésticas a la red de alcantarillado y articular las instituciones que tienen el control sobre el recurso hídrico”, indicó la directora encargada de Corpocesar, Yolanda Martínez.

Los establecimientos anteriormente mencionados deben contar con permisos de concesión de aguas subterráneas y legalización del uso de la red de alcantarillado, así como muestreo de las aguas residuales para verificar la calidad del vertimiento en concordancia con la normatividad ambiental vigente y  permitir la inspección del abastecimiento de agua (pozo, acueducto u otros), y finalmente la verificación del estado del sistema de tratamiento de aguas residuales no domésticas.