A Anumahel Jaime Santos, de 45 años de edad, su animal de confianza le jugó ‘una mala pasada’. El hombre como de costumbre se levantó a realizar las labores del campo en su finca y se dispuso a trasladar una carga de productos agrícolas al casco urbano de Codazzi.

Sin embargo, una vez se acercó a alistar la mula para la pesada labor, esta aparentemente estaba resabiada y lo arrastró a unos cuantos metros hasta ocasionarle la muerte.

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El animal, según los familiares del fallecido, por la edad que tiene ya no era fácil de domar pero seguía siendo usada en la finca ubicada en la vereda Iroka, de la serranía de Perijá, porque era buena para el transporte de carga.

“La mula lo estranguló todo, ni ropa tenía, se la había como que arrancado la tierra. La mula lo arrastró con el mismo laso, como que se le enredó en las manos”, manifestó Robinson Díaz, yerno del occiso.

Agregó que el agricultor se encontraba nada más con otros empleados porque tanto su esposa como hijo estaban viajando. Y que estos no notaron el momento exacto en que el animal arrastró a su amo.

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Luego de varios minutos fue que un indígena de la zona sintió ‘algo raro’ y fue a comunicarle su inquietud al empleado del predio que ordeñaba unas vacas. Este salió a darse cuenta y notó que Anumahel Jaimes no estaba, salió a buscarlo, vio la mula, se acercó y vio al hombre tirado.

De inmediato lo llevaron al Hospital de Agustín Codazzi donde no pudieron hacer nada porque Jaime Santos ya no tenía signos vitales.

Su cadáver fue trasladado a Medicina Legal de Valledupar y en la mañana de ayer era reclamado por los familiares.

Anumahel Jaime Santos dejó tres hijos y tenía varios años de dedicar su vida al campo.