Por quinta vez durante sus tres años de mandato, el alcalde de Valledupar, Augusto Uhía Ramírez, ofrece una rendición de cuentas. Lo hizo a los 100 y 300 días, a los 1,000 días y en la vigencia 2018.

Cada rendición es la oportunidad para medir el pulso de lo que se está haciendo en Valledupar.

Durante el evento que se realizó en la mañana del martes en el Centro de Convenciones Crispín Villazón de Armas, el primero en intervenir fue el gobernador del Cesar, Francisco Ovalle.

Su discurso lo centró en el “matrimonio institucional”, como han llamado la buena relación entre las autoridades departamentales y municipales. En ese sentido, enumeró las obras financiadas entre el departamento y municipio, la mayor parte de ellas vías e infraestructura.

A continuación entró el mandatario municipal. Durante más de una hora y media expuso los resultados positivos de sus tres años de mandato. Habló de lo negativo (sin expresar ninguna cifra), pero sobre todo se centró en lo que considera “hechos históricos”. Igual que la autoridad departamental, empezó destacando la alianza entre las dos entidades.

“Valledupar durante muchos años anheló que esto se diera: un matrimonio institucional, que el alcalde trabajara de la mano con el gobernador. Hoy una vez más refrendamos este compromiso”, relató el mandatario, quien recordó el apoyo político de Francisco Ovalle cuando iniciaba su carrera política.

De los puntos por exponer, el primero en desarrollar fue el de la inclusión social. Con el eslogan “La familia es lo primero”, el alcalde dirigió en estos tres años su política social. El mensaje se centró en lo cultural y la reconstrucción de tejido social. En ese aspecto, las críticas estuvieron dirigidas en la forma de trabajo y en los resultados.

“La pregunta es por qué no hay políticas públicas efectivas: porque se han gastado millones en cultura ciudadana y no se ven los resultados, porque no hay una articulación con las entidades de salud. A los problemas hay que buscarle soluciones”, trinó Cristian Guerra, activista político.

Ante esas críticas, el mandatario aseguró que la cultura tiene resultados a largo plazo.

“Algunas personas solo se detienen a narrar lo tangible, hay que narrar lo intangible. Hay un programa que se llama ‘La familia es lo primero’ que ha llegado a más de 60 mil familias a las cuales le hemos enseñado a tener visión”, comentó el mandatario local. Por los resultados o por la política municipal, el tema de la cultura ciudadana ha sido tema central de discusión en los años de gobierno de Augusto Ramírez.

“El éxito de las políticas de cultura ciudadana dependen de la continuidad de los siguientes mandatarios, sino se habrá perdido lo que se avanzó”, advirtió Juan Henker, presidente de la Asocomuna 4.

La particularidad de las políticas de esta alcaldía la resume la frase del mandatario cuando hablaba de las visitas a las zonas vulnerables: “Estas brigadas integrales de familia no es solamente el servicio de salud, es un tema de valores”.

LA PROMESA DE LA POLICÍA METROPOLITANA Y LA FALTA DE POLICÍAS
Uno de los compromisos del alcalde durante los últimos años ha sido la gestión para la creación de la Policía Metropolitana en Valledupar. Durante la rendición de cuentas aseguró que desde el Ministerio del Interior ya tienen una parte de los recursos.

En Valledupar el número de policías es uno de los temas críticos en seguridad. Según cifras oficiales, hay 120 policías por turno en una ciudad con más de medio millón de habitantes. De lograrse la gestión de la Policía Metropolitana llegarían alrededor de 1.000 uniformados para cinco municipios: Valledupar, La Paz, San Diego, Codazzi y Manaure.

“Hay que decirlo, la Policía hace mucho con poco”, aseguró Ramírez Uhía.
En ese tema de seguridad se habló de lo hecho y los retos. “Tenemos instaladas 392 cámaras de seguridad, estamos pagando recompensa. Este tema de recompensa ha ayudado a aclarar crímenes. Por eso, según el informe de la Fiscalía, el año pasado fuimos la segunda ciudad con mayor aclaración de delitos”, aseguró Augusto Ramírez.

“El tema de inseguridad es latente, además de los pocos policías que tenemos. Es necesario retomar con mayor fortaleza los patrullajes y las alarmas comunitarias”, agregó Juan Henker.

EL DESEMPLEO NUNCA MOSTRÓ RESULTADOS POSITIVOS

Según economistas, el actual mandatario se enfrenta a retos no previstos: la migración y el fin del comercio ilegal de gasolina. En primer lugar, la entrada de casi 20.000 migrantes presionó un mercado que no tuvo respuesta, por eso en cuatro años la tasa de desocupados no dejó de crecer hasta alcanzar cifra récord en 2018 con 14,8 %.

En este punto, las políticas y resultados mostrados por el alcalde municipal se centraron en las potencialidades de la economía naranja en Valledupar.

“El turismo es el nuevo petróleo de Colombia, por eso convertimos a Valledupar en eje turístico de la región”, subrayó el mandatario.

Sin embargo, sumado a la informalidad, en la percepción de las personas, el desempleo “no ha tenido una respuesta eficiente”. “Las cifras del Dane son las que hablan y a Valledupar le falta levantar esas cifras. Al alcalde le falta meterle más impulso. Meter a una persona con mayor capacidad en la promoción del empleo en Valledupar. Nosotros tenemos cómo organizar y el alcalde no ha tenido esa visión”, recalcó Erney Galván, vocal de control.

LA INFRAESTRUCTURA Y LOS PARQUES, EL DESTACADO

Con la recién inauguración de la avenida 450 años, la infraestructura es uno de los puntos mejor calificados de los tres primeros años de gobierno del alcalde municipal.

En total fueron 8,33 kilómetros de reconstrucción de la malla vial y 6,5 kilómetros de espacio público, y más de una decena de parques reconstruidos, entre ellos la plaza Alfonso López, aunque muchos señalaron como “innecesaria” esa reparación.

SERVICIO PÚBLICOS: LA DEMANDA CRECE, NO LA OFERTA

Punto importante merecen los servicios públicos. En un comienzo, varios alcaldes de la región se comprometieron a frenar “los abusos de Electricaribe”, en referencia a los cortes y bajones de energía recurrentes en Valledupar y el Caribe. Sin embargo, la percepción comunitaria no ha cambiado. “En los servicios públicos hay algunos problemas. Electricaribe es un punto negro por los apagones. Al comienzo se les hizo unos parones, pero eso quedó ahí, sin papá, sin mamá”, aseveró Juan Henker, presidente de la Asocomuna 4.

En el tema de la salud, Valledupar no está exento de los problemas nacionales. La capital del Cesar tiene uno de los peores servicios de salud del país, según las Preguntas, Quejas y Respuestas de la Superintendencia de Salud. Eso ha redundado en escándalos como la muerte de una menor de 15 años, al parecer por irregularidades en su atención, más las recurrentes denuncias de falta de medicamentos y pago a los profesionales de la salud.

En últimas, los retos en sectores como la salud, educación, servicios públicos y seguridad determinarán el recuerdo que tendrán los vallenatos del mandato de Augusto Ramírez Uhía.

DEIVIS CARO DAZA/ EL PILÓN
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