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Don Pilo - 4 diciembre, 2016

En Tobías Daza están cansados de trochas polvorientas

A los problemas de las calles sin pavimento se suma la falta de agua, que debe ser comprada a vendedores ambulantes.

 A los problemas de las calles sin pavimento se suma la falta de agua, que debe ser comprada a vendedores ambulantes.
A los problemas de las calles sin pavimento se suma la falta de agua, que debe ser comprada a vendedores ambulantes.
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Una queja constante en el barrio Tobías Daza, en el suroccidente de Valledupar, es la falta de pavimentación en sus calles a las que comparan con trochas en las que en temporada de sequía permanecen llenas de polvo y con las lluvias se convierten en lodazales y ríos naturales que dificultan la entrada y salida a sus viviendas.

“Las calles están todas deterioradas, hace un mes la Secretaría de Obras pasó máquinas para aplanar la calle, pero ese mismo día llovió y el trabajo se perdió. Necesitamos una solución definitiva”, así lo manifestó a EL PILÓN, Adalberto Vega, presidente de la Junta de Acción Comunal de este barrio, en donde los conductores se rehúsan a transitar porque se averían sus vehículos.

De otro lado, Vega comentó sobre la falta de agua en el barrio, que llega esporádicamente por lo que deben algunos habitantes comprar el líquido a vendedores ambulantes.

Y el ‘rosario’ de quejas en Tobías Daza no culmina. También reclaman la limpieza de los lotes enmontados.

Son diversas las denuncias que realiza la comunidad del barrio Tobías Daza, entre ellas la falta de pavimento, de agua y de rutas de buses.

Por Jennifer Polo Cambronell

Don Pilo
4 diciembre, 2016

En Tobías Daza están cansados de trochas polvorientas

A los problemas de las calles sin pavimento se suma la falta de agua, que debe ser comprada a vendedores ambulantes.


 A los problemas de las calles sin pavimento se suma la falta de agua, que debe ser comprada a vendedores ambulantes.
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Una queja constante en el barrio Tobías Daza, en el suroccidente de Valledupar, es la falta de pavimentación en sus calles a las que comparan con trochas en las que en temporada de sequía permanecen llenas de polvo y con las lluvias se convierten en lodazales y ríos naturales que dificultan la entrada y salida a sus viviendas.

“Las calles están todas deterioradas, hace un mes la Secretaría de Obras pasó máquinas para aplanar la calle, pero ese mismo día llovió y el trabajo se perdió. Necesitamos una solución definitiva”, así lo manifestó a EL PILÓN, Adalberto Vega, presidente de la Junta de Acción Comunal de este barrio, en donde los conductores se rehúsan a transitar porque se averían sus vehículos.

De otro lado, Vega comentó sobre la falta de agua en el barrio, que llega esporádicamente por lo que deben algunos habitantes comprar el líquido a vendedores ambulantes.

Y el ‘rosario’ de quejas en Tobías Daza no culmina. También reclaman la limpieza de los lotes enmontados.

Son diversas las denuncias que realiza la comunidad del barrio Tobías Daza, entre ellas la falta de pavimento, de agua y de rutas de buses.

Por Jennifer Polo Cambronell