El Lunes Santo, cuando se le rinde culto al Santo Patrono de Valledupar, el Ecce Homo, todos los ciudadanos se mezclan en una sola devoción, bien sea para pedirle que obre milagros o bien para agradecerle por los favores recibidos. Este día, no importa si se es un humilde vendedor o si se trata de […]
El Lunes Santo, cuando se le rinde culto al Santo Patrono de Valledupar, el Ecce Homo, todos los ciudadanos se mezclan en una sola devoción, bien sea para pedirle que obre milagros o bien para agradecerle por los favores recibidos. Este día, no importa si se es un humilde vendedor o si se trata de un reconocido artista; todos ante los ojos del Patrono son iguales y comparten una misma fe, que con la devoción al santo se hace fuerte e inquebrantable.
El Lunes Santo, cuando se le rinde culto al Santo Patrono de Valledupar, el Ecce Homo, todos los ciudadanos se mezclan en una sola devoción, bien sea para pedirle que obre milagros o bien para agradecerle por los favores recibidos. Este día, no importa si se es un humilde vendedor o si se trata de […]
El Lunes Santo, cuando se le rinde culto al Santo Patrono de Valledupar, el Ecce Homo, todos los ciudadanos se mezclan en una sola devoción, bien sea para pedirle que obre milagros o bien para agradecerle por los favores recibidos. Este día, no importa si se es un humilde vendedor o si se trata de un reconocido artista; todos ante los ojos del Patrono son iguales y comparten una misma fe, que con la devoción al santo se hace fuerte e inquebrantable.