Durante años la comunidad vallenata se ha visto afectada por el pésimo estado en que se encuentra la avenida Simón Bolívar, una de las vías más importantes de la ciudad.
En 1967 inició la construcción de una de las avenidas más extensas de Valledupar: La Simón Bolívar, arteria vial que significó desarrollo para la ciudad y que hoy, 47 años después de su cimentación, de servirle a propios y foráneos para que se movilicen, y de pasar por un sinnúmero de reparcheos, será sometida a una profunda restructuración.
La historia
La avenida Simón Bolívar (que comprende gran parte de la carrera 18D y 19), fue construida en el gobierno de José Guillermo “Pepe” Castro, alcalde que contrató un arquitecto para que realizara un diagnóstico a la ciudad, pero éste terminó efectuando el plano de la mencionada avenida.
Según la historia, mientras se estaba en proceso de realización del plano, Fabio Medina, quien en ese entonces era el Personero Municipal, le informó a Castro que la construcción de la anhelada avenida era imposible, debido a la cantidad de pequeñas casas ubicadas en la vía.
Hecho que, al parecer, no fue motivo de obstrucción de la edificación por parte del mandatario de turno, quien decidió comprar los terrenos por un valor de 800 pesos cada una, costo que fue avalado por la Junta Municipal y aceptado por los propietarios.
Fue entonces como se empezó la demolición de dichas viviendas, que fueron derrumbadas con un bulldozer de propiedad del alcalde. La construcción se realizó desde la glorieta Los Músicos hasta la de la Terminal de Transportes de Valledupar.
Años después el gobierno local logró conseguir los recursos para que la Nación aportara la pavimentación. Entre 1992 y 1994 se hizo efectiva la iluminación de la misma, a través del mandato de Rodolfo Campo Soto, quien también aportó la siembra de los árboles de caucho que adornan la vía.
Cabe destacar que ésta es una las avenidas más arborizadas de la capital del Cesar, que inicia en la Terminal de Transportes, y finaliza en el puente de concreto del balneario Hurtado. La arteria cuenta con seis puntos de intercepción: la glorieta ubicada cerca de la terminal, la glorieta de Los Músicos, la de Los Gallos, la de la María Mulata, la de Mi Pedazo de Acordeón y la Pilonera Mayor.
Entre las avenidas Los Militares, La Popa, Pastrana, Sierra Nevada, la 44 o avenida del Folclor, la Simón Bolívar, y la Fundación, son las más prolongadas en su recorrido, y de mayor tráfico, situación que ha ocasionó una serie de problemas por falta de mantenimiento.
Después de cuatro décadas el paso la Simón Bolívar es casi que una odisea. Los inmensos huecos que, desafortunadamente la adornan, hacen que los conductores y pasajeros de toda clase de vehículos tengan pocos espacios transitables, los cráteres obligan a los choferes a realizar peripecias para poder esquivarlos e impedir un accidente o en menor consecuencia evitar que los automotores sufran daños.
Aunque en muchas ocasiones la comunidad ha solicitado de manera urgente una nueva pavimentación o remodelación de la vía, lo único que han podido lograr los gobiernos de turno son algunos reparcheos, los que acostumbran a hacer en época festivalera, decembrina o en tiempo de política. Intervenciones que resultan ser millonarias y que, visiblemente, no superan más de dos tres meses, debido a que luego de ese tiempo se vuelven a observar los huecos.
Otra de los problemas evidentes de la avenida Simón Bolívar es la falta de puentes peatonales, por lo que las personas deben cruzar como puedan por ésta. Aunque también cabe recordar que los ciudadanos poco o nada transitan por el único presente, ubicado cerca de los colegios, Instpecam, Alfonso López y el Casd.
27 años de sufrimiento
La vida útil del pavimento de una vía de gran magnitud y con tráfico constante, según expertos, es de 20 años. Hoy, la avenida Simón Bolívar tiene alrededor de 46 de haber sido construida, lo cual indica que son alrededor de 27 años de ‘calvario’ para los usuarios debido a su mal estado. Hoy presenta un deterioro en su capa asfáltica de más del 80%.
Un proyecto salvador
Luego de conocer que la Gobernación del Cesar aportaría recursos para la pavimentación de la avenida Simón Bolívar, revivieron las esperanzas para los que constantemente usan esta vía. La gran noticia se conoció a finales del año 2013 por parte del gobernador Luis Alberto Monsalvo, quien decidió desentrabar el Sistema Integrado de Transporte de Valledupar, ejecución que sería un imposible sin la reposición de las redes húmedas, puesto que sin ello no se podría realizar la pavimentación.
Con dicha inversión se repondrán las redes de acueducto y alcantarillado pluvial y sanitario en la Simón Bolívar y el anillo de la calle 44 hasta empalmar con la carrera 4 en la comuna dos.
La cifra mencionada se suma a otros 40.000 millones de pesos que la administración aporta para la pavimentación de vías dentro del macroproyecto que dotará a Valledupar de un moderno sistema de transporte. Recursos quefueron recuperados por el gobierno departamental a través del Fondo de Pensiones Territoriales, Fonpet.
La intervención de la avenida Simón Bolívar, según KatrizzaMorelli Aroca, gerente del Sistema Integrado de Transporte de Valledupar, Siva, será de 2.4 kilómetros que se realizará entre la glorieta del Terminal de Transportes y la de Los Músicos, que tendrá una construcción de espacio público de 5 metros de ancho de lado y lado, con una ciclo ruta por el lado más occidental.
Pronta intervención
Según Morelli Aroca, la firma del acta de inicio de la intervención de la avenida Simón Bolívar está muy próxima, puesto que ya el pasado ocho de mayo se colgaron pliegos en la página web correspondiente. Hecho que se hizo posible luego de cuatro meses de esperar que el Gobierno Nacional emitiera unos decretos reglamentarios para las licitaciones de obras públicas en el país.
“Teníamos cierre del proceso licitatorio para esta semana, pero a raíz de una cantidad de observaciones de los futuros proponentes, por lo que tendríamos que esperar un poco más de tiempo, porque siempre es una propuesta algo compleja: son 30 mil millones de pesos, con esto estamos llegando a una fecha de adjudicación cercana al 20 de julio. Entonces creemos que en la segunda semana de agosto estaríamos pensando en tener el acta de inicio firmada” aseguró la gerente del Siva.
La funcionaria pública aseguró que esta es una obra muy grande, nunca antes vista en la ciudad, puesto que no sólo comprende la rehabilitación del pavimento y del espacio público correspondiente de dicha vía en la cual se hará la reposición de redes de acueducto y alcantarillado, sino que además se construirá un colector de aguas lluvias, se optimizará el Canal de Panamá hasta el río Guatapurí, lo que genera la intervención de 2.4 kilómetros de arteria.
Morelli Aroca indicó que “esta es una intervención que, desde el Sistema Estratégico de Transporte, le hemos metido el hombro desde hace mucho tiempo, primero en la consecución de los recursos en las redes húmedas y ahora en este proceso licitatorio que no deja de ser complejo y tedioso, pero ya estamos muy cerca”.
Morelli explicó que la licitación está tan cerca, que la semana entrante el Sistema Integrado de Transporte Público de Valledupar comenzará a recibir propuestas de las entidades que pretenden quedarse con la ejecución de esta importante obra para la ciudad y así evaluar y adjudicar el proyecto.
Siva pide paciencia
Con el fin de que la comunidad entienda sobre el tiempo que se realizará la inmensa y significativa intervención Katrizza Morelli Aroca, solicitó a la comunidad tener paciencia, debido a que tan pronto se inicien los trabajos podrían presentarse quejas de movilidad, entre otras afectaciones.
“A veces los seres humanos tendemos mucho a querer tener las obras casi que de una mañana a otra, y esto no se hace con magia, son trabajos que van a costar sacrificios y algunos traumatismos a la ciudad. Vamos a tratar de hacer los trabajos con la mayor agilidad posible, pero que desde ya se les pide todo el acompañamiento, apropiación y la paciencia” explicó.
Es un tramo que viene deteriorado desde hace muchos años y no queremos seguirle poniendo pañitos de agua tibia (reparcheo), sino buscarle una solución definitiva con la construcción en concreto rígido y significa una valorización importante en temas de predios que se encuentran alrededor de la avenida.
Por Merlin Duarte García/El Pilón
Durante años la comunidad vallenata se ha visto afectada por el pésimo estado en que se encuentra la avenida Simón Bolívar, una de las vías más importantes de la ciudad.
En 1967 inició la construcción de una de las avenidas más extensas de Valledupar: La Simón Bolívar, arteria vial que significó desarrollo para la ciudad y que hoy, 47 años después de su cimentación, de servirle a propios y foráneos para que se movilicen, y de pasar por un sinnúmero de reparcheos, será sometida a una profunda restructuración.
La historia
La avenida Simón Bolívar (que comprende gran parte de la carrera 18D y 19), fue construida en el gobierno de José Guillermo “Pepe” Castro, alcalde que contrató un arquitecto para que realizara un diagnóstico a la ciudad, pero éste terminó efectuando el plano de la mencionada avenida.
Según la historia, mientras se estaba en proceso de realización del plano, Fabio Medina, quien en ese entonces era el Personero Municipal, le informó a Castro que la construcción de la anhelada avenida era imposible, debido a la cantidad de pequeñas casas ubicadas en la vía.
Hecho que, al parecer, no fue motivo de obstrucción de la edificación por parte del mandatario de turno, quien decidió comprar los terrenos por un valor de 800 pesos cada una, costo que fue avalado por la Junta Municipal y aceptado por los propietarios.
Fue entonces como se empezó la demolición de dichas viviendas, que fueron derrumbadas con un bulldozer de propiedad del alcalde. La construcción se realizó desde la glorieta Los Músicos hasta la de la Terminal de Transportes de Valledupar.
Años después el gobierno local logró conseguir los recursos para que la Nación aportara la pavimentación. Entre 1992 y 1994 se hizo efectiva la iluminación de la misma, a través del mandato de Rodolfo Campo Soto, quien también aportó la siembra de los árboles de caucho que adornan la vía.
Cabe destacar que ésta es una las avenidas más arborizadas de la capital del Cesar, que inicia en la Terminal de Transportes, y finaliza en el puente de concreto del balneario Hurtado. La arteria cuenta con seis puntos de intercepción: la glorieta ubicada cerca de la terminal, la glorieta de Los Músicos, la de Los Gallos, la de la María Mulata, la de Mi Pedazo de Acordeón y la Pilonera Mayor.
Entre las avenidas Los Militares, La Popa, Pastrana, Sierra Nevada, la 44 o avenida del Folclor, la Simón Bolívar, y la Fundación, son las más prolongadas en su recorrido, y de mayor tráfico, situación que ha ocasionó una serie de problemas por falta de mantenimiento.
Después de cuatro décadas el paso la Simón Bolívar es casi que una odisea. Los inmensos huecos que, desafortunadamente la adornan, hacen que los conductores y pasajeros de toda clase de vehículos tengan pocos espacios transitables, los cráteres obligan a los choferes a realizar peripecias para poder esquivarlos e impedir un accidente o en menor consecuencia evitar que los automotores sufran daños.
Aunque en muchas ocasiones la comunidad ha solicitado de manera urgente una nueva pavimentación o remodelación de la vía, lo único que han podido lograr los gobiernos de turno son algunos reparcheos, los que acostumbran a hacer en época festivalera, decembrina o en tiempo de política. Intervenciones que resultan ser millonarias y que, visiblemente, no superan más de dos tres meses, debido a que luego de ese tiempo se vuelven a observar los huecos.
Otra de los problemas evidentes de la avenida Simón Bolívar es la falta de puentes peatonales, por lo que las personas deben cruzar como puedan por ésta. Aunque también cabe recordar que los ciudadanos poco o nada transitan por el único presente, ubicado cerca de los colegios, Instpecam, Alfonso López y el Casd.
27 años de sufrimiento
La vida útil del pavimento de una vía de gran magnitud y con tráfico constante, según expertos, es de 20 años. Hoy, la avenida Simón Bolívar tiene alrededor de 46 de haber sido construida, lo cual indica que son alrededor de 27 años de ‘calvario’ para los usuarios debido a su mal estado. Hoy presenta un deterioro en su capa asfáltica de más del 80%.
Un proyecto salvador
Luego de conocer que la Gobernación del Cesar aportaría recursos para la pavimentación de la avenida Simón Bolívar, revivieron las esperanzas para los que constantemente usan esta vía. La gran noticia se conoció a finales del año 2013 por parte del gobernador Luis Alberto Monsalvo, quien decidió desentrabar el Sistema Integrado de Transporte de Valledupar, ejecución que sería un imposible sin la reposición de las redes húmedas, puesto que sin ello no se podría realizar la pavimentación.
Con dicha inversión se repondrán las redes de acueducto y alcantarillado pluvial y sanitario en la Simón Bolívar y el anillo de la calle 44 hasta empalmar con la carrera 4 en la comuna dos.
La cifra mencionada se suma a otros 40.000 millones de pesos que la administración aporta para la pavimentación de vías dentro del macroproyecto que dotará a Valledupar de un moderno sistema de transporte. Recursos quefueron recuperados por el gobierno departamental a través del Fondo de Pensiones Territoriales, Fonpet.
La intervención de la avenida Simón Bolívar, según KatrizzaMorelli Aroca, gerente del Sistema Integrado de Transporte de Valledupar, Siva, será de 2.4 kilómetros que se realizará entre la glorieta del Terminal de Transportes y la de Los Músicos, que tendrá una construcción de espacio público de 5 metros de ancho de lado y lado, con una ciclo ruta por el lado más occidental.
Pronta intervención
Según Morelli Aroca, la firma del acta de inicio de la intervención de la avenida Simón Bolívar está muy próxima, puesto que ya el pasado ocho de mayo se colgaron pliegos en la página web correspondiente. Hecho que se hizo posible luego de cuatro meses de esperar que el Gobierno Nacional emitiera unos decretos reglamentarios para las licitaciones de obras públicas en el país.
“Teníamos cierre del proceso licitatorio para esta semana, pero a raíz de una cantidad de observaciones de los futuros proponentes, por lo que tendríamos que esperar un poco más de tiempo, porque siempre es una propuesta algo compleja: son 30 mil millones de pesos, con esto estamos llegando a una fecha de adjudicación cercana al 20 de julio. Entonces creemos que en la segunda semana de agosto estaríamos pensando en tener el acta de inicio firmada” aseguró la gerente del Siva.
La funcionaria pública aseguró que esta es una obra muy grande, nunca antes vista en la ciudad, puesto que no sólo comprende la rehabilitación del pavimento y del espacio público correspondiente de dicha vía en la cual se hará la reposición de redes de acueducto y alcantarillado, sino que además se construirá un colector de aguas lluvias, se optimizará el Canal de Panamá hasta el río Guatapurí, lo que genera la intervención de 2.4 kilómetros de arteria.
Morelli Aroca indicó que “esta es una intervención que, desde el Sistema Estratégico de Transporte, le hemos metido el hombro desde hace mucho tiempo, primero en la consecución de los recursos en las redes húmedas y ahora en este proceso licitatorio que no deja de ser complejo y tedioso, pero ya estamos muy cerca”.
Morelli explicó que la licitación está tan cerca, que la semana entrante el Sistema Integrado de Transporte Público de Valledupar comenzará a recibir propuestas de las entidades que pretenden quedarse con la ejecución de esta importante obra para la ciudad y así evaluar y adjudicar el proyecto.
Siva pide paciencia
Con el fin de que la comunidad entienda sobre el tiempo que se realizará la inmensa y significativa intervención Katrizza Morelli Aroca, solicitó a la comunidad tener paciencia, debido a que tan pronto se inicien los trabajos podrían presentarse quejas de movilidad, entre otras afectaciones.
“A veces los seres humanos tendemos mucho a querer tener las obras casi que de una mañana a otra, y esto no se hace con magia, son trabajos que van a costar sacrificios y algunos traumatismos a la ciudad. Vamos a tratar de hacer los trabajos con la mayor agilidad posible, pero que desde ya se les pide todo el acompañamiento, apropiación y la paciencia” explicó.
Es un tramo que viene deteriorado desde hace muchos años y no queremos seguirle poniendo pañitos de agua tibia (reparcheo), sino buscarle una solución definitiva con la construcción en concreto rígido y significa una valorización importante en temas de predios que se encuentran alrededor de la avenida.
Por Merlin Duarte García/El Pilón