Hasta la fecha se han presentado 25 casos de rabia bovina en el departamento y la mejor estrategia para que esta enfermedad no se propague es la prevención.
El Cesar ha sido un departamento donde siempre se ha presentado los brotes de rabia, por sus condiciones ambientales, por su altura sobre el nivel del mar y por su ecología es posible contar con la presencia del murciélago hematófago, animal que transmite la enfermedad.
Las colonias de los murciélagos se infectan y se movilizan de acuerdo a las necesidades que tengan y los animales que tienen el virus se desplazan y muerden a los bovinos y de esa manera se va transmitiendo.
Francisco Javier Daza Ovalle, epidemiólogo del Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, aseveró que el Cesar ocupa el segundo lugar donde más casos de rabia bovina se presentan, “teniendo en cuenta los casos denunciados y los que han sido verificados por medio de estudios de laboratorio, el departamento está en el segundo lugar a nivel nacional de departamentos con rabia bovina, donde se han detectado más de 20 casos”.
De acuerdo con la información del Sistema de vigilancia Epidemiológica Veterinaria del ICA, los focos positivos a las enfermedades se han ubicado en zonas aledañas a quebradas de ríos, piedemonte de cordilleras, alturas por debajo de los 1.500 metros sobre el nivel del mar y zonas boscosas, es así como la distribución de estos focos indica la presencia de la enfermedad en la mayoría de los departamentos del país.
Cabe destacar que según los estudios que hace la autoridad agropecuaria, los meses de mayor presencia de la enfermedad en los últimos 10 años han sido febrero y agosto, información que resulta útil para la implementación de medidas sanitarias de prevención.
Es necesario recalcar que esta enfermedad representa un gran riesgo por ser de carácter zoonótico ya que se trasmite de los humanos al hombre, por eso se hace necesario que al momento de tener sospecha de la presencia del virus en un animal, se contacte con la autoridad agropecuaria para que se proceda a hacer los análisis y se tomen las medidas necesarias.
Olga Lucía Díaz Martínez, subgerente de Protección animal del ICA, ratificó la información ofrecida por Daza Ovalle, cuando explicó que “en el Cesar es bastante frecuente la presencia de rabia bovina, hasta la fecha han sido 25 casos ya confirmados por medio de análisis en laboratorios; pero lo grave de esta situación es que los productores no vacunan porque la vacuna es costosa”.
La vacunación en especies domésticas susceptibles en los principales municipios de riesgo identificados es el único medio para prevenir esta enfermedad: la vacuna cintra la rabia silvestre está a cargo de ganaderos y médicos veterinarios en ejercicio particular, quienes deben sensibilizarse sobre la importancia de aplicarla.
“La gente hace una vacunación y no vuelve a vacunar, hay que hacer una campaña continua porque en el año, donde no hay brotes importantes de rabia entonces las personas al año siguiente no vacunan y la enfermedad vuelve a aparecer”, explicó Díaz quien agregó que “el ICA hace captura de murciélagos para que las colonias de estos sean eliminadas pero es necesario que la gente vacune, hay un problemas de concientización porque en el Cesar hay las condiciones para que el murciélago se reproduzca y las personas deben saber que la única manera de combatir esta enfermedad es por medio de la vacuna”.
Recomendaciones
Los funcionarios del Instituto Colombiano Agropecuario ratificaron que lo mejor es vacunar a los animales contra la rabia silvestre y que se avise a la entidad o a las autoridades de salud sobre la presencia de murciélagos hematófagos para que tomen las medidas pertinentes; esto permite a los productores del sector pecuario mitigar los efectos de incremento del ataque de los murciélagos ocasionados por la ola invernal.
Por Freddy Oñate Acevedo / EL PILÓN
Hasta la fecha se han presentado 25 casos de rabia bovina en el departamento y la mejor estrategia para que esta enfermedad no se propague es la prevención.
El Cesar ha sido un departamento donde siempre se ha presentado los brotes de rabia, por sus condiciones ambientales, por su altura sobre el nivel del mar y por su ecología es posible contar con la presencia del murciélago hematófago, animal que transmite la enfermedad.
Las colonias de los murciélagos se infectan y se movilizan de acuerdo a las necesidades que tengan y los animales que tienen el virus se desplazan y muerden a los bovinos y de esa manera se va transmitiendo.
Francisco Javier Daza Ovalle, epidemiólogo del Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, aseveró que el Cesar ocupa el segundo lugar donde más casos de rabia bovina se presentan, “teniendo en cuenta los casos denunciados y los que han sido verificados por medio de estudios de laboratorio, el departamento está en el segundo lugar a nivel nacional de departamentos con rabia bovina, donde se han detectado más de 20 casos”.
De acuerdo con la información del Sistema de vigilancia Epidemiológica Veterinaria del ICA, los focos positivos a las enfermedades se han ubicado en zonas aledañas a quebradas de ríos, piedemonte de cordilleras, alturas por debajo de los 1.500 metros sobre el nivel del mar y zonas boscosas, es así como la distribución de estos focos indica la presencia de la enfermedad en la mayoría de los departamentos del país.
Cabe destacar que según los estudios que hace la autoridad agropecuaria, los meses de mayor presencia de la enfermedad en los últimos 10 años han sido febrero y agosto, información que resulta útil para la implementación de medidas sanitarias de prevención.
Es necesario recalcar que esta enfermedad representa un gran riesgo por ser de carácter zoonótico ya que se trasmite de los humanos al hombre, por eso se hace necesario que al momento de tener sospecha de la presencia del virus en un animal, se contacte con la autoridad agropecuaria para que se proceda a hacer los análisis y se tomen las medidas necesarias.
Olga Lucía Díaz Martínez, subgerente de Protección animal del ICA, ratificó la información ofrecida por Daza Ovalle, cuando explicó que “en el Cesar es bastante frecuente la presencia de rabia bovina, hasta la fecha han sido 25 casos ya confirmados por medio de análisis en laboratorios; pero lo grave de esta situación es que los productores no vacunan porque la vacuna es costosa”.
La vacunación en especies domésticas susceptibles en los principales municipios de riesgo identificados es el único medio para prevenir esta enfermedad: la vacuna cintra la rabia silvestre está a cargo de ganaderos y médicos veterinarios en ejercicio particular, quienes deben sensibilizarse sobre la importancia de aplicarla.
“La gente hace una vacunación y no vuelve a vacunar, hay que hacer una campaña continua porque en el año, donde no hay brotes importantes de rabia entonces las personas al año siguiente no vacunan y la enfermedad vuelve a aparecer”, explicó Díaz quien agregó que “el ICA hace captura de murciélagos para que las colonias de estos sean eliminadas pero es necesario que la gente vacune, hay un problemas de concientización porque en el Cesar hay las condiciones para que el murciélago se reproduzca y las personas deben saber que la única manera de combatir esta enfermedad es por medio de la vacuna”.
Recomendaciones
Los funcionarios del Instituto Colombiano Agropecuario ratificaron que lo mejor es vacunar a los animales contra la rabia silvestre y que se avise a la entidad o a las autoridades de salud sobre la presencia de murciélagos hematófagos para que tomen las medidas pertinentes; esto permite a los productores del sector pecuario mitigar los efectos de incremento del ataque de los murciélagos ocasionados por la ola invernal.
Por Freddy Oñate Acevedo / EL PILÓN