José Rodrigo Dajud Durán, director Comercial de Electricidad Colombia,  a cargo de Electricaribe y Energía Social precisó que en manos de la administración municipal de Valledupar, está la legalización de por lo menos ocho barrios de invasión, que entrarían al sistema de Energía Social. 

“Las redes que hoy operan en las zonas subnormales no son operadas por Electricaribe, sino por Energía Social, porque son redes que crea la misma comunidad y que alguna forma alcaldes como gobernadores aportan dinero que van de cara a buscar las mejora de la calidad de vida”, explicó Dajud Durán. 

De igual forma, manifestó que los barrios que actualmente están bajo la cobertura de Energía Social son: Villa Yaneth, Villa Haidith, los 10 barrios de la margen derecha del río Guatapurí y tres invasiones en los corregimientos de Aguas Blancas y Valencia de Jesús. 

Y entre las invasiones que multiplicarían por seis veces la cobertura de Energía Social en Valledupar,  se destacan Los Guasimales, Altos de Pimienta, Bello Horizonte II, Tierra Prometida, Emmanuel, El Cambuche, Brisas de la Popa y Divino Niño. 

“El promedio de factura por grupo de familia es de 25 mil pesos, pero solo estamos recaudando un promedio del 20% de lo que ponemos al cobro, el resto va vía subsidios que otorga el Estado”, precisó el funcionario de la empresa de energía.

Insistió en el compromiso de la compañía por mejorar la prestación del servicio con obras de adecuación de redes, como la que ayer entregó en el barrio Villa Yaneth, al noroccidente de la capital del Cesar.

“Estamos adecuando redes, no normalizando, adecuando para que el barrio mejore sus redes internamente.  La comunidad colocó unos postes, nosotros la mano de obra”, puntualizó.

Caso Villa Haidith

Alfonso Medina, líder comunitario del barrio Villa Haidith, denunció cobros exagerados de Energía Social  en este sector. 
“Villa Haidith está dividido en dos partes, el sector normalizado que lo cobra Electricaribe y el sector subnormal donde cobra Energía Social.

En el sector subnormal están llegando recibos de hasta de 180 mil pesos, donde una señora que apenas tiene una nevera, un abanico, el televisor y cuatro focos paga 180 mil pesos”, expresó. 

Ante esta queja José Rodrigo Dajud Durán, explicó que “en los barrios subnormales no hay medición casa a casa, debido a que es centralizada. Pero hay barrios de estos a los que se le cuelgan otros barrios y como el consumo pasa a través del medidor del primero, cuando se hace la repartición equitativa el cobro es mayor”. 

Agregó que en estos casos se hace una revisión en el sitio de la anomalía, para corroborar si hay sobrecargas en el sistema o posibles errores de facturación.  

Por Martín Elías Mendoza 

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