Por Abdel Martínez Pérez
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Muchos litros de agua potable que aún no han sido cuantificados por parte de Emdupar, se perdieron desde la noche del martes hasta la mañana de hoy, debido al hurto de los medidores de algunas viviendas y locales comerciales ubicados en la carrera 9 entre las calles 12 y 13 del barrio Cañaguate.

Según la denuncia de la comunidad afectada, al parecer los responsables del robo de esos contadores de agua fueron algunos indigentes que aprovecharon que se tratan de unos aparatos fabricados con cobre, cuyo material es perseguido debido al precio que tiene en las chatarrerías.

Para los afectados, esta acción vandálica merece su rechazo debido a que la ciudad afronta problemas con el suministro de agua para que ahora este líquido se desperdicie.

Ante este inconveniente, las directivas de la Empresa de Servicios de Valledupar, Emdupar, solicitó mano dura para quienes vienen cometiendo esos actos criminales contra la red del acueducto y exhortaron a la comunidad, especialmente a quienes aún tienen medidores de agua antiguos, para que sean cambiados por plásticos debido a que no son perseguidos por los vándalos porque no son apetecidos en el mercado negro.

Operarios de la empresa prestadora del servicio solucionaron la pérdida de agua potable en la mañana, de manera inicial realizaron una conexión directa, mientras adquieren los aparatos recomendados por la entidad. Mientras tanto, las autoridades locales anunciaron que estarán atentos en horarios nocturnos y de madrugada, para tratar de capturar a quienes se dedican a esa ilícita actividad. 

Puntos de vista

Kelly Jhoana Campo, afectada. "Esto es grave, porque Valledupar está racionando el agua y por culpa de vándalos, el líquido que necesitan otras familias, se pierde en las calles sin ningún control".

Víctor Algarín, afectado. "Esta fue una labor de los indigentes, porque una persona cuerda con sus sentidos bien puestos, no hace una cosa de esa, que perjudica a numerosas familias vallenatas".