Una inversión en infraestructura educativa para el corregimiento de Boquerón, población que está en proceso de reubicación por la contaminación del carbón, demuestra que en el municipio de La Jagua de Ibirico hicieron ‘fiesta' con los recursos de regalías.
Adicional a esto, durante la vigencia de 2009, la administración local adicionó un 30 por ciento para mayores cantidades de obras por actividades no previstas dentro del contrato.
Según un informe de auditoría de la Contraloría General de la República, Gerencia Cesar, el alcalde de la época, Alfonso Palacio Niño realizó un convenio con la Unión Temporal Segundo Centenario La Jagua por 24 mil 995 millones de pesos, en el cual se presenta un presunto detrimento patrimonial por cuatro mil 600 millones de pesos.
El contralor General gerencia Cesar, José Antonio Soto Murgas explicó que el contrato tuvo un adicional de más de seis mil 200 millones de pesos.
“El reporte de los ingenieros establece un presunto sobrecosto o un presunto detrimento patrimonial a este contrato, la Gerencia Departamental de la Contraloría determinó hallazgos de connotación penal, fiscal y disciplinaria, esta gerencia está obligada a trasladar a la Fiscalía General de la Nación y Procuraduría, los hallazgos para que se inicien los procesos de responsabilidad fiscal”, manifestó Soto Murgas.
El convenio con la Unión Temporal tuvo como objeto la construcción y mejoramiento de las instituciones educativas José Guillermo Castro Castro, escuela mixta número uno y dos; Ana Aguilar, Luis Carlos Galán, Timotea Meneses, José Castro, Agropecuario de La Victoria y Boquerón.
Entre las situaciones detectadas por el ente de control se encuentra también que en los pliegos no están establecidas las cantidades de obra del contrato, solo el presupuesto total, lo que presuntamente viola los principios de transparencia y economía.
El contrato se inició el 15 de marzo de 2010 con un pazo de ejecución de 420 días, pero sufrió tres modificaciones en tiempo de 195 días para un total de 615 días.
Preocupante
Los hallazgos hechos por la Contraloría fueron calificados de preocupantes por la secretaria del Comité de Seguimiento a la Inversión de las Regalías del Carbón, CSIR, María Clara Quintero, quien dijo que han pasado casi cuatro años y todavía no se ha terminado de ejecutar.
Lo peor de todo, según la doctora Quintero, es que para la época de los hechos, sobre La Jagua estaban puestos todos los ojos, “debido a que tenía los recursos de regalías congelados y tenía al DNP y Bogotá encima y ni siquiera así dieron con un feliz término de este contrato. Realmente esto lo que muestra es una gran falla en planeación y hoy lógicamente en ejecución y calidad de la obra, esto es una muestra más del despilfarro que La Jagua ha tenido que aguantar”.
Las acciones
Ante esta serie de situaciones, el alcalde actual de La Jagua de Ibirico, Didier Lobo tomó la determinación de liquidar el contrato.
La esperanza
Para evitar estos problemas, el gobierno modificó el manejo de las regalías, por lo que la nueva reglamentación evitará que se ‘ferien’ de esta manea los recursos. Según María Clara Quintero el nuevo sistema está concebido para que se presente menos desperdicio de dinero.
En Chiriguaná
El jefe del control en el Cesar, dijo que otro de los municipios en donde están revisando el contrato de infraestructura educativa es Chiriguaná.
El año pasado, la Contraloría encontró unas hallazgos del contrato de infraestructura educativa, al cual le hicieron función de advertencia, por lo que van a mirar en qué estado se encuentra el proceso de liquidación que habían iniciado. En Chiriguaná el contrato es por 17 mil millones de pesos.
Una inversión en infraestructura educativa para el corregimiento de Boquerón, población que está en proceso de reubicación por la contaminación del carbón, demuestra que en el municipio de La Jagua de Ibirico hicieron ‘fiesta' con los recursos de regalías.
Adicional a esto, durante la vigencia de 2009, la administración local adicionó un 30 por ciento para mayores cantidades de obras por actividades no previstas dentro del contrato.
Según un informe de auditoría de la Contraloría General de la República, Gerencia Cesar, el alcalde de la época, Alfonso Palacio Niño realizó un convenio con la Unión Temporal Segundo Centenario La Jagua por 24 mil 995 millones de pesos, en el cual se presenta un presunto detrimento patrimonial por cuatro mil 600 millones de pesos.
El contralor General gerencia Cesar, José Antonio Soto Murgas explicó que el contrato tuvo un adicional de más de seis mil 200 millones de pesos.
“El reporte de los ingenieros establece un presunto sobrecosto o un presunto detrimento patrimonial a este contrato, la Gerencia Departamental de la Contraloría determinó hallazgos de connotación penal, fiscal y disciplinaria, esta gerencia está obligada a trasladar a la Fiscalía General de la Nación y Procuraduría, los hallazgos para que se inicien los procesos de responsabilidad fiscal”, manifestó Soto Murgas.
El convenio con la Unión Temporal tuvo como objeto la construcción y mejoramiento de las instituciones educativas José Guillermo Castro Castro, escuela mixta número uno y dos; Ana Aguilar, Luis Carlos Galán, Timotea Meneses, José Castro, Agropecuario de La Victoria y Boquerón.
Entre las situaciones detectadas por el ente de control se encuentra también que en los pliegos no están establecidas las cantidades de obra del contrato, solo el presupuesto total, lo que presuntamente viola los principios de transparencia y economía.
El contrato se inició el 15 de marzo de 2010 con un pazo de ejecución de 420 días, pero sufrió tres modificaciones en tiempo de 195 días para un total de 615 días.
Preocupante
Los hallazgos hechos por la Contraloría fueron calificados de preocupantes por la secretaria del Comité de Seguimiento a la Inversión de las Regalías del Carbón, CSIR, María Clara Quintero, quien dijo que han pasado casi cuatro años y todavía no se ha terminado de ejecutar.
Lo peor de todo, según la doctora Quintero, es que para la época de los hechos, sobre La Jagua estaban puestos todos los ojos, “debido a que tenía los recursos de regalías congelados y tenía al DNP y Bogotá encima y ni siquiera así dieron con un feliz término de este contrato. Realmente esto lo que muestra es una gran falla en planeación y hoy lógicamente en ejecución y calidad de la obra, esto es una muestra más del despilfarro que La Jagua ha tenido que aguantar”.
Las acciones
Ante esta serie de situaciones, el alcalde actual de La Jagua de Ibirico, Didier Lobo tomó la determinación de liquidar el contrato.
La esperanza
Para evitar estos problemas, el gobierno modificó el manejo de las regalías, por lo que la nueva reglamentación evitará que se ‘ferien’ de esta manea los recursos. Según María Clara Quintero el nuevo sistema está concebido para que se presente menos desperdicio de dinero.
En Chiriguaná
El jefe del control en el Cesar, dijo que otro de los municipios en donde están revisando el contrato de infraestructura educativa es Chiriguaná.
El año pasado, la Contraloría encontró unas hallazgos del contrato de infraestructura educativa, al cual le hicieron función de advertencia, por lo que van a mirar en qué estado se encuentra el proceso de liquidación que habían iniciado. En Chiriguaná el contrato es por 17 mil millones de pesos.