Por: Lida Mendoza Orozco
Rafael Atanasio Mendoza fue uno de los campesinos del corregimiento de Río Seco, que no vio otra opción sino matar a un jaguar, para acabar con esa fiera que se comió a 25 de sus animales, entre vacas, chivos y burros, y que ha acabado con el ganado de sus vecinos de la zona rural.
“Tuve que matar uno porque en una sola noche mató 7 de mis terneros, 12 animales adultos y 40 chivos, acabó con todo  lo que me ha costado tanto trabajo tener” , dijo don Rafael, quien advirtió que esta problemática no es nueva sino que viene desde hace más de 7 años, cuando por primera vez atacaron en la región.
El campesino relató que hace varios años llegó hasta las instalaciones de Corpocesar a pedir ayuda, pero en esa oportunidad sólo recibió recomendaciones como la de instalar trampas, lo  que no pudo cumplir por falta de conocimientos.

Contra el ganado

Ayer, campesinos que han sido víctimas de los ataques de jaguares, pumas y otros felinos a sus ganados, participaron de la primera jornada de talleres para evaluar la problemática que se está registrando en varios corregimientos del Cesar, donde un número indeterminado de ganado ha muerto a mano de estas fieras.
Los talleres continuarán en Bosconia, El Copey y Codazzi, según lo anunció José Fernando González, Director del Proyecto de Conservación de Aguas y Tierras – Procat -.
El funcionario dio a conocer que con delegados de Corpocesar, se está adelantando un proyecto de diagnóstico, que permitirá conocer la magnitud del problema y la incidencia en la zona. Por ello, se ha involucrado a los directamente afectados, para que cuenten sus experiencias, cuáles han sido los conflictos con estos felinos y qué tipo de solución plantean.
“A partir de esto lo que  estamos generando es un  proyecto para trabajar el tema productivo, mejorar el tema de producción de las fincas y  minimizar la problemática con estos felinos y con la  fauna en general, es decir, reducir la  cacería y  mejorar las condiciones de las fincas”, dijo el funcionario.
Con este proyecto, se pretende mejorar los sistemas productivos y el manejo de pastos, al tiempo que se podrán incorporar alternativas productivas como pastos mejorados, bancos forrajeros, sistemas silvopastoriles .
Sabanización
El Director de Procat reveló que el Cesar presenta problemas  en materia de cobertura vegetal, toda vez que ésta se ha perdido por la construcción de potreros y  por el fenómeno de la sabanización. Ante este panorama, lo que se pretende con este proyecto, es restaurar esos hábitat y minimizar la cacería.
Luego de las denuncias presentadas por varios campesinos que han sido testigo de la muerte de su ganado en manos de los felinos, el funcionario advirtió que en esta región es muy común y frecuente que los campesinos manejen el ganado de manera muy suelto y libre, esto permite que ande libremente por los bosques sin ningún control, lo que lo hace presa fácil de este tipo de animales.
Otro de los factores que contribuyen a que se presente este conflicto es el de la cacería, que  en el departamento, según  José Fernando González director de Procat, es  muy crítico.  “Lo que sucede con la cacería es que se reducen las presas silvestres que son la base de la alimentación de tigres y pumas y ellos al quedarse sin comida, les toca salir a buscar otro tipo de animales”.
El rol del jaguar en la cadena alimenticia
Según el Director de Procat los jaguares son animales muy especiales porque tienen un rol muy importante y son indicadores de la calidad del bosque. Los jaguares son considerados depredadores tope, es decir, la cabeza de la cadena alimenticia y al estar allí, cumplen con la función de controlar especies de presa como los ñeques,  guartinajas,  venados o  animales depredadores de semilla “cuando estamos regenerando una zona, por ejemplo de recarga de agua, este proceso demora mucho más porque hay mucho depredador de semilla y esto se convierte en un problema que viene en cascada, desde que se pierde el depredador”, sostuvo el funcionario, quien manifestó que en el Cesar se mantienen las seis especies de felinos con las que cuenta el país; sin embargo, están desapareciendo de manera muy rápida, por lo que se está trabajando en tomar acciones inmediatas para frenar esta problemática.
El departamento del Cesar sobresale por ser uno de los más ricos en biodiversidad, toda vez que está ubicado estratégicamente,  al sur, cuenta con  todos los humedales  de la ciénaga de Zapatosa y del valle del Magdalena, lo mismo que con los ecosistemas de la Sierra Nevada de Santa Marta y la Serranía del Perijá, lo que hacen que el departamento sea un lugar importante  en términos de biodiversidad; sin embargo, presenta un grave problema de degradación  en términos naturales, generado  por toda la conversión que ha habido  por el uso del suelo.