Medidas drásticas

La pérdida de valores fundamentales en la vida como el respeto mutuo, el respeto hacia los padres y los mayores, y el respeto hacia la autoridad, han obligado al alcalde de Valledupar Luis Fabián Fernández Maestre y al comandante de la policía Coronel Ramiro Orlando Tobo Peña, a iniciar una serie de prohibiciones y acciones para evitar que los menores de edad anden a altas horas de la noche por las calles de la ciudad y en sitios públicos consumiendo bebidas embriagantes, además para que no ingresen armas y sustancias alucinógenas a los planteles educativos.
Recientemente el mandatario municipal ordenó el toque de queda para los menores de edad, quienes no podrán estar en sitios públicos después de once de la noche. Además, les queda prohibido conducir vehículos en horas de la noche, salvo que viajen acompañados de sus padres.
La medida fue establecida con el fin de controlar la participación de esta población en hechos delincuenciales y el riesgo que corren al estar en la calles a altas horas de la madrugada.
Por su parte, el Departamento de Policía Cesar a través del Grupo de Protección a la Infancia y Adolescencia, viene adelantando allanamientos en los diferentes planteles educativos de Valledupar debido a las denuncias por lesiones personales y los enfrentamientos que se vienen presentando entre los estudiantes.