La tradicional Feria del Juguete, que cada año instalaban pequeños e informales comerciantes en inmediaciones de la Galería Popular, no va este año o por lo menos en esta zona de la ciudad.

Así lo dio a conocer el secretario de gobierno municipal, Víctor Martínez Gutiérrez, quien informó que cumpliendo con los reglamentos de Ley, no se puede seguir permitiendo la invasión del espacio público y menos bajo las actuales circunstancias de movilidad que atraviesa la ciudad a causa de diferentes obras que se están realizando en varias calles.

“Quien otorgue este permiso está expuesto a que lo investiguen y eventualmente lo puedan sancionar. Si bien es cierto que se venía en un plan de tolerancia con estas personas, ya no se puede porque no son sólo ellos los que solicitan el permiso este año, sino cuatro organizaciones más con el mismo objetivo que parten con la feria del juguete y que después siguen con la feria de los libros, es un tiempo que realmente no permite que se pueda ocupar el espacio de los vehículos y de las personas, sobre todo en una época donde hay tanta congestión y que justamente por las obras que se están realizando en la ciudad y hay tanta queja de esa falta de garantía de la circulación por parte de los peatones y los vehículos”.

Agregó Martínez, que no es un capricho de la Administración el no dar la autorización para utilizar este espacio, sino también una solicitud del comercio formal.

“Tenemos solicitudes de los mismos comerciantes formales, quienes nos han anunciado que estarán muy vigilantes de que nosotros demos esos permisos, ellos todos los años hacen objeciones al respecto y por una sola persona que alegue la violación a la circulación hay que desalojar eso enseguida. Entonces nosotros no nos vamos a dejar presionar por ninguna organización que quiera bajo el argumento del derecho al trabajo pasar por encima de la Ley”.

Pese a estos argumentos, el jefe de la cartera de gobierno anunció que la Administración tiene pensadas varias propuestas para estos comerciantes para que no sean los ‘perdedores’ ante esta situación. Entre ellas es que alquilen algún área abierta de la ciudad como un parque o un lote.

También, bajar el cobro del impuesto por el montaje de este tipo de negocios reduciéndolos a algo ‘simbólico’ y finalmente, apoyarlos con publicidad y seguridad en el sitio en el que decidan montar su negocio.