A ellos falsamente los presentaron como ‘dados de baja’ en un combate con el ELN.
Después de haber presentado como muertos en combate a cinco hombres y de haber disfrutado de un permiso en el mes de octubre del año 2004, el pelotón Bombarda 1, al mando del teniente Carlos Yobany Medina Bayona, se dispuso a buscar un resultado operacional que presuntamente calmara las presiones del entonces comandante del Batallón La Popa, el teniente coronel Juan Carlos Figueroa Suárez.
“(…) más o menos, los primeros días de octubre creería yo, (…) otra vez empieza el mismo (…) sonsonete, (…) que mire, que no se van a quedar con eso, que los programas, (…) que nos toca buscar los resultados (…) que busque (…) los resultados (…) y recalcaba siempre entonces: «recuerden (…) que por una… por una neutralización en operaciones es una semana, por dos son dos semanas»”, contó Carlos Yobany Medina Bayona, en una versión libre ante la Jurisdicción Especial para la Paz, JEP, entregada el 17 de diciembre de 2018.
De ahí surgió un macabro plan que consistía en conseguir víctimas para presentarlas como guerrilleras caídas en un combate con ese pelotón del Batallón La Popa, adscrito a la Décima Brigada del Ejército Nacional.
Y uno de los presuntos participantes fueron, según lo documentado por la JEP, el soldado Neiro Quintero Castro, quien al parecer actuó en compañía de su hermano Jaider Quintero; ellos debieron localizar a un campesino del corregimiento de Media Luna, jurisdicción del municipio de San Diego, Cesar, con el fin de llevarlo hasta donde estaba la tropa.
“[A] él lo trajeron bajo engaños (…) ¿qué le dijeron? (…) que iba a trabajar con nosotros un tiempo (…) sirviéndonos de guía, de orientador, o sea engañado total (sic)”, agregó Medina Bayona en su versión libre.
Mientras tanto un grupo del mismo pelotón se encargó de retener de manera ilegal a otro ciudadano que residía en la parcela denominada La Esperanza – Paraíso ubicada en zona rural del municipio de Agustín Codazzi.
Al hombre lo bajaron para agruparse con los demás en inmediaciones de la vereda Gloria de esa misma municipalidad, donde al poco tiempo el cabo Luis Carlos Morales insinuó que había que matarlos.
“[E]l cabo tenía contacto, sé que tenía contacto con… paramilitares (…) entonces él me dijo que sacáramos de la plata de los víveres, para pagar unas armas ahí y colocárselas a esos dos que ya venían en camino. Entonces yo le dije que sí, que bueno. (…) Él las obtuvo, no tuvo que irse a Valledupar, eso fue algo como muy cerca (…) él la recibió de un grupo paramilitar, que se encontraba destacado en ese sector (sic)”, reconoció Medina Bayona en la versión libre.
Confesó también que dio la orden de matar a las dos víctimas y el soldado Jhony Enrique Carmona la cumplió tras ofrecerse.
EL RESULTADO
Al obtener el resultado planeado, el teniente Carlos Yobany Medina reportó que siendo aproximadamente las 4:10 a.m., del 1 de noviembre de 2004, sostuvo un enfrentamiento con integrantes del frente ‘José Manuel Martínez Quiroz’ del ELN, donde resultaron muertas dos personas en inmediaciones de la finca Nueva Granada.
Indicaron la incautación de una pistola calibre 7.65 milímetros, una pistola calibre 9 milímetros con 2 proveedores, 7 cartuchos calibre 7.65 milímetros y 1 cartucho calibre 9 milímetros.
“De acuerdo con las declaraciones de los integrantes de las tropas involucradas en estos hechos, todos reunían el dinero necesario para reclutar a las víctimas y para la compra de las armas, es decir, para el llamado ‘kit de legalización’, en su mayoría compuesto por armas cortas”, puntualizó la JEP en un auto sobre el caso.
LA FAMILIA E IDENTIFICACIÓN
Las víctimas ingresaron como N.N., a Medicina Legal donde los sometieron a un procedimiento forense para poderlos identificar.
El primero en identificar fue a Yovanny Quintero Donado, de 21 años de edad, residenciado en el corregimiento de Media Luna.
“Luego de transcurridos cerca de 3 años sin que sus familiares tuvieran noticias de su paradero, su progenitora se enteró que había sido muerto en un presunto enfrentamiento armado con miembros del ejército [sic] y su cuerpo inhumado como N.N”, determinó la Fiscalía en un proceso en la justicia ordinaria.
De igual manera, en el año 2011 conocieron que la segunda víctima correspondía al nombre de Rafael Mario Bernal Real, de 62 años de edad, residenciado en Codazzi.
A este último lo reconocieron cuando Medicina Legal ventiló las identidades de siete muertos que estaban como N.N., en Codazzi.
El diario EL PILÓN registró la noticia el 6 de septiembre, motivo por el que otras familias pudieron conocer sobre el paradero de sus seres queridos.
Desde entonces denunciaron que Yovanny Quintero y Rafael Mario Bernal no pertenecían a ningún grupo armado, originándose la investigación que adelantó la Fiscalía General de la Nación.
LOS INVOLUCRADOS
El exteniente Carlos Yobany Medina Bayona reconoció las ejecuciones extrajudiciales al acogerse a la Jurisdicción Especial para la Paz.
Otros exmilitares como Isaac César González y Edwin Oviedo por no ser máximos responsables no fueron vinculados en el subcaso 03 Costa Caribe, sino que sus casos, la Sala de Reconocimiento de la JEP los remitió a la Sala de Definición de Situaciones Jurídicas para que ésta se pronuncie sobre el particular y continúe con el seguimiento y vigilancia del cumplimiento del régimen de condicionalidad y las demás decisiones que corresponda.
Por Marllelys Salinas / EL PILÓN
A ellos falsamente los presentaron como ‘dados de baja’ en un combate con el ELN.
Después de haber presentado como muertos en combate a cinco hombres y de haber disfrutado de un permiso en el mes de octubre del año 2004, el pelotón Bombarda 1, al mando del teniente Carlos Yobany Medina Bayona, se dispuso a buscar un resultado operacional que presuntamente calmara las presiones del entonces comandante del Batallón La Popa, el teniente coronel Juan Carlos Figueroa Suárez.
“(…) más o menos, los primeros días de octubre creería yo, (…) otra vez empieza el mismo (…) sonsonete, (…) que mire, que no se van a quedar con eso, que los programas, (…) que nos toca buscar los resultados (…) que busque (…) los resultados (…) y recalcaba siempre entonces: «recuerden (…) que por una… por una neutralización en operaciones es una semana, por dos son dos semanas»”, contó Carlos Yobany Medina Bayona, en una versión libre ante la Jurisdicción Especial para la Paz, JEP, entregada el 17 de diciembre de 2018.
De ahí surgió un macabro plan que consistía en conseguir víctimas para presentarlas como guerrilleras caídas en un combate con ese pelotón del Batallón La Popa, adscrito a la Décima Brigada del Ejército Nacional.
Y uno de los presuntos participantes fueron, según lo documentado por la JEP, el soldado Neiro Quintero Castro, quien al parecer actuó en compañía de su hermano Jaider Quintero; ellos debieron localizar a un campesino del corregimiento de Media Luna, jurisdicción del municipio de San Diego, Cesar, con el fin de llevarlo hasta donde estaba la tropa.
“[A] él lo trajeron bajo engaños (…) ¿qué le dijeron? (…) que iba a trabajar con nosotros un tiempo (…) sirviéndonos de guía, de orientador, o sea engañado total (sic)”, agregó Medina Bayona en su versión libre.
Mientras tanto un grupo del mismo pelotón se encargó de retener de manera ilegal a otro ciudadano que residía en la parcela denominada La Esperanza – Paraíso ubicada en zona rural del municipio de Agustín Codazzi.
Al hombre lo bajaron para agruparse con los demás en inmediaciones de la vereda Gloria de esa misma municipalidad, donde al poco tiempo el cabo Luis Carlos Morales insinuó que había que matarlos.
“[E]l cabo tenía contacto, sé que tenía contacto con… paramilitares (…) entonces él me dijo que sacáramos de la plata de los víveres, para pagar unas armas ahí y colocárselas a esos dos que ya venían en camino. Entonces yo le dije que sí, que bueno. (…) Él las obtuvo, no tuvo que irse a Valledupar, eso fue algo como muy cerca (…) él la recibió de un grupo paramilitar, que se encontraba destacado en ese sector (sic)”, reconoció Medina Bayona en la versión libre.
Confesó también que dio la orden de matar a las dos víctimas y el soldado Jhony Enrique Carmona la cumplió tras ofrecerse.
EL RESULTADO
Al obtener el resultado planeado, el teniente Carlos Yobany Medina reportó que siendo aproximadamente las 4:10 a.m., del 1 de noviembre de 2004, sostuvo un enfrentamiento con integrantes del frente ‘José Manuel Martínez Quiroz’ del ELN, donde resultaron muertas dos personas en inmediaciones de la finca Nueva Granada.
Indicaron la incautación de una pistola calibre 7.65 milímetros, una pistola calibre 9 milímetros con 2 proveedores, 7 cartuchos calibre 7.65 milímetros y 1 cartucho calibre 9 milímetros.
“De acuerdo con las declaraciones de los integrantes de las tropas involucradas en estos hechos, todos reunían el dinero necesario para reclutar a las víctimas y para la compra de las armas, es decir, para el llamado ‘kit de legalización’, en su mayoría compuesto por armas cortas”, puntualizó la JEP en un auto sobre el caso.
LA FAMILIA E IDENTIFICACIÓN
Las víctimas ingresaron como N.N., a Medicina Legal donde los sometieron a un procedimiento forense para poderlos identificar.
El primero en identificar fue a Yovanny Quintero Donado, de 21 años de edad, residenciado en el corregimiento de Media Luna.
“Luego de transcurridos cerca de 3 años sin que sus familiares tuvieran noticias de su paradero, su progenitora se enteró que había sido muerto en un presunto enfrentamiento armado con miembros del ejército [sic] y su cuerpo inhumado como N.N”, determinó la Fiscalía en un proceso en la justicia ordinaria.
De igual manera, en el año 2011 conocieron que la segunda víctima correspondía al nombre de Rafael Mario Bernal Real, de 62 años de edad, residenciado en Codazzi.
A este último lo reconocieron cuando Medicina Legal ventiló las identidades de siete muertos que estaban como N.N., en Codazzi.
El diario EL PILÓN registró la noticia el 6 de septiembre, motivo por el que otras familias pudieron conocer sobre el paradero de sus seres queridos.
Desde entonces denunciaron que Yovanny Quintero y Rafael Mario Bernal no pertenecían a ningún grupo armado, originándose la investigación que adelantó la Fiscalía General de la Nación.
LOS INVOLUCRADOS
El exteniente Carlos Yobany Medina Bayona reconoció las ejecuciones extrajudiciales al acogerse a la Jurisdicción Especial para la Paz.
Otros exmilitares como Isaac César González y Edwin Oviedo por no ser máximos responsables no fueron vinculados en el subcaso 03 Costa Caribe, sino que sus casos, la Sala de Reconocimiento de la JEP los remitió a la Sala de Definición de Situaciones Jurídicas para que ésta se pronuncie sobre el particular y continúe con el seguimiento y vigilancia del cumplimiento del régimen de condicionalidad y las demás decisiones que corresponda.
Por Marllelys Salinas / EL PILÓN