Otro mes en el que la ciudad de Valledupar está en los primeros lugares de desempleo a nivel nacional, esta vez con un 17,6 % a corte del mes de septiembre. 

El reciente informe trimestral del Departamento Administrativo Nacional de Estadística, DANE, muestra que la capital del Cesar solo es superada por Quibdó (25,0%) e Ibagué (18,1%).

El porcentaje de personas sin empleos en la capital cesarense era levemente menor en agosto pasado con un 17%. 

VOCES DEL DESEMPLEO

Los expertos señalan que el nivel educativo y la pertinencia de los conocimientos están relacionados con las posibilidades de acceso al trabajo “digno”. 

Al hacer un breve sondeo en las calles de la ciudad, EL PILÓN evidenció que la mayoría de personas en esta condición no han logrado culminar sus estudios. 

Marelys Villarreal no terminó la secundaria, pero durante años laboró como empleada doméstica hasta que se cansó. 

“Trabajar en casa de familia no aguanta y mejor me dediqué a vender artesanías y mis cositas en las calles de Valledupar, pero desde que entró la pandemia no he podido retomar”, relató Villareal. 

La mujer de 46 años asegura que ha sido vendedora ambulante porque está a cargo de un niño “y hay que sobrevivir, pero la Alcaldía no deja trabajar a los informales”. 

VARIACIÓN ANUAL

En un año, este problema solo se redujo en un 0,4%, ya que  en septiembre del 2021, el DANE reveló que el desempleo en Valledupar era de 18%, el cuarto más alto en ese entonces a nivel nacional. 

Desde antes de esa fecha Nancy Acosta está desempleada, según contó a esta casa editorial, pero trata de buscar oportunidades de ingresos económicos.  

“Tengo más de año y pico sin trabajo. Me dedico a oficios varios, últimamente vendo bebidas cuando hay fiestas en la ciudad porque tengo que buscar algo que hacer”, explicó.

Acosta tiene clara una de las barreras por las que tiene que ‘rebuscarse’: “Solo llegué hasta cuarto de primaria, no soy profesional, por eso hago lo que me salga”. 

Ambas entrevistadas son madres y afirmaron que tal responsabilidad les exige dedicarse a dichas labores, así sea de manera esporádica, para poder sostener a los menores a su cargo. 

INFORMALIDAD

La Capital Mundial del Vallenato sigue padeciendo la informalidad, según el DANE, con un 67%. El cuarto porcentaje más alto entre 23 entes territoriales. 

Riohacha (68,6%), Sincelejo (68,3) y Cúcuta (67,9) ocupan los primeros lugares en el ‘ranking’. 

Kevin Quintero vende micheladas de mango en el centro histórico de la capital del Cesar entre las nueve de la mañana y las 6:00 p.m., y por ello recibe una contraprestación de $30 mil diarios más el almuerzo. 

“La verdad esto lo aprende uno rápido y como no hay empresas grandes aquí en Valledupar le toca a uno trabajar es así”, señaló el jóven de 21 años. 

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