Seguimos de celebración hasta fin de año, pues 25 septiembres no se alcanzan todos los días, y no nos alcanzarían los 365 que tiene el calendario para agradecer a todas las personas que nos apoyan en la tarea diaria de garantizar el derecho constitucional a estar informados, a expresar libremente.
Seguimos de celebración hasta fin de año, pues 25 septiembres no se alcanzan todos los días, y no nos alcanzarían los 365 que tiene el calendario para agradecer a todas las personas que nos apoyan en la tarea diaria de garantizar el derecho constitucional a estar informados, a expresar libremente.
Así como hemos agradecido a los columnistas, periodistas, personal administrativo, Junta Directiva, Consejo Editorial, todo el equipo de producción y circulación, existen unos personajes singulares pues cada uno de ellos, con estilo propio, presenta a todos los ciudadanos los ejemplares del periódico EL PILÓN.
Se trata de los voceadores de prensa o de periódicos. A sol y a sombra, desde muy temprano se ubican en sus puntos de venta, algunos caminan o recorren en bicicleta la ciudad para llevarle a los lectores como pan caliente la edición del día.
Anoche, en el marco de nuestra celebración de aniversario, decidimos entregar reconocimientos a algunos de ellos, a los más veteranos que aún nos acompañan.
Don Hector Arroyo en el parque de Las Madres, quien fue protagonista de uno de nuestros documentales audiovisuales, fue reconocido con mención en el acto solemne llevado a cabo en el Centro de Convenciones Crispín Villazón de Armas.
Y especial reconocimiento a doña Amanda Afanador, esposa de don Manuel Antonio Otero, fallecido hace “14 meses y ocho días”. Esta familia es reconocida por completar tres décadas ubicada en lo que se conocía como la sede de Telecom, diagonal a la iglesia Inmaculada Concepción, plaza Alfonso López de Valledupar.
Venden el periódico EL PILÓN en una chasa, en la que también venden dulces, y otros productos de merienda para los transeúntes, visitantes de los tribunales, y otros lugares aledaños a la emblemática plaza.
EL PILÓN cuenta con más de 60 familias de voceadores que venden el periódico en distintas partes de la ciudad, sin contar los puntos en tiendas y droguerías.
A ellos nuestros agradecimientos, últimos pero no menos importantes en la cadena de distribución del periódico impreso. Sus consejos sobre lo que el público quiere leer son fundamentales. Tienen la clave del querer ciudadano a través de un contacto directo y eso para nosotros es muy valioso.
Le pedimos a la ciudadanía que valore a estas personas cuyo conocimiento sobre su producto se basa en información, educación y entretenimiento que en las páginas de los periódicos se puede hallar. Son testigos del desarrollo de las ciudades a través de sus medios de comunicación escritos, su visión es de interesante criterio.
A todos los voceadores de periódicos que están vinculados a EL PILÓN mil gracias, los apreciamos y no los olvidamos. Tenemos pendiente una reunión con ellos para seguir midiéndole el pulso al sentimiento ciudadano con el fin de mejorar.
Seguimos de celebración hasta fin de año, pues 25 septiembres no se alcanzan todos los días, y no nos alcanzarían los 365 que tiene el calendario para agradecer a todas las personas que nos apoyan en la tarea diaria de garantizar el derecho constitucional a estar informados, a expresar libremente.
Seguimos de celebración hasta fin de año, pues 25 septiembres no se alcanzan todos los días, y no nos alcanzarían los 365 que tiene el calendario para agradecer a todas las personas que nos apoyan en la tarea diaria de garantizar el derecho constitucional a estar informados, a expresar libremente.
Así como hemos agradecido a los columnistas, periodistas, personal administrativo, Junta Directiva, Consejo Editorial, todo el equipo de producción y circulación, existen unos personajes singulares pues cada uno de ellos, con estilo propio, presenta a todos los ciudadanos los ejemplares del periódico EL PILÓN.
Se trata de los voceadores de prensa o de periódicos. A sol y a sombra, desde muy temprano se ubican en sus puntos de venta, algunos caminan o recorren en bicicleta la ciudad para llevarle a los lectores como pan caliente la edición del día.
Anoche, en el marco de nuestra celebración de aniversario, decidimos entregar reconocimientos a algunos de ellos, a los más veteranos que aún nos acompañan.
Don Hector Arroyo en el parque de Las Madres, quien fue protagonista de uno de nuestros documentales audiovisuales, fue reconocido con mención en el acto solemne llevado a cabo en el Centro de Convenciones Crispín Villazón de Armas.
Y especial reconocimiento a doña Amanda Afanador, esposa de don Manuel Antonio Otero, fallecido hace “14 meses y ocho días”. Esta familia es reconocida por completar tres décadas ubicada en lo que se conocía como la sede de Telecom, diagonal a la iglesia Inmaculada Concepción, plaza Alfonso López de Valledupar.
Venden el periódico EL PILÓN en una chasa, en la que también venden dulces, y otros productos de merienda para los transeúntes, visitantes de los tribunales, y otros lugares aledaños a la emblemática plaza.
EL PILÓN cuenta con más de 60 familias de voceadores que venden el periódico en distintas partes de la ciudad, sin contar los puntos en tiendas y droguerías.
A ellos nuestros agradecimientos, últimos pero no menos importantes en la cadena de distribución del periódico impreso. Sus consejos sobre lo que el público quiere leer son fundamentales. Tienen la clave del querer ciudadano a través de un contacto directo y eso para nosotros es muy valioso.
Le pedimos a la ciudadanía que valore a estas personas cuyo conocimiento sobre su producto se basa en información, educación y entretenimiento que en las páginas de los periódicos se puede hallar. Son testigos del desarrollo de las ciudades a través de sus medios de comunicación escritos, su visión es de interesante criterio.
A todos los voceadores de periódicos que están vinculados a EL PILÓN mil gracias, los apreciamos y no los olvidamos. Tenemos pendiente una reunión con ellos para seguir midiéndole el pulso al sentimiento ciudadano con el fin de mejorar.