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Editorial - 1 febrero, 2024

Una reunión de buen ambiente 

La celebración de una reunión entre el importante colectivo de ambientalistas y el alcalde Ernesto Orozco y la secretaria de Desarrollo Económico, MedioAmbiente  y Turismo,  María Marta Lacouture, es un buen comienzo para hacer visible un factor clave en el gobierno de la ciudad: el medio ambiente.

La celebración de una reunión entre el importante colectivo de ambientalistas y el alcalde Ernesto Orozco y la secretaria de Desarrollo Económico, MedioAmbiente  y Turismo,  María Marta Lacouture, es un buen comienzo para hacer visible un factor clave en el gobierno de la ciudad: el medio ambiente.

La complejidad y amplitud de la agenda muestra que Orozco deberá tener un alto grado de atención y de fortalecimiento de la Secretaría pues cada día se tornan en más llamativos ante la ciudadanía  problemas como los del río y del agua que entra y sale de la ciudad, de las basuras, de las podas y de los escombros de la construcción, entre otros dolores de cabeza diarios del alcalde municipal.

Todos esos frentes deben conducir a que dentro de la Secretaría se crezca el brazo administrativo del subsector ambiental o definitivamente se constituya, por el Concejo, una Secretaría; petición que hemos pedido desde este diario y desde los seis foros anuales del Árbol que hacemos junto a la Mesa del Árbol, grupo que surgió de esos eventos para abordar los temas ambientales en la localidad.   

Esta vez, ha sido el colectivo reunido con el alcalde el pasado martes, organizado en el Foro Ambiental, que llevó también esa petición  dentro de  una detallada agenda, que incluyó temas como la pertinencia de cambiar la modificación del POT aprobada recientemente en diciembre; la  no urbanización del cerro Hurtado; implementación de la  educación ambiental; implementar, en un plazo no mayor de cuatro años, el Plan de Manejo de los balnearios; el control a las edificaciones que se desarrollan actualmente en las riberas del río Guatapurí y resolver seriamente el reasentamiento de los pobladores de la Margen Derecha; en aplicación de un fallo de Acción Popular, la protección y conservación de la corriente, desde el nacimiento hasta su desembocadura, así como el suministro de agua potable, y reactivar la mesa del Río, ordenada en un acuerdo del 2013; resolución de la problemática de los distintos tipos de residuos sólidos mal dispuestos en 60 sitios de la ciudad,  y los residuos de las demoliciones y construcciones, a través de una escombrera municipal; abrir una instancia de comunicación  y de participación ciudadana del componente ambiental; un programa de adaptabilidad al Cambio Climático e impulsar nuevas áreas de protección ambiental y conservación de  las actuales. 

Algunos aspectos pueden ser discutibles por su poca viabilidad inmediata, como el cambio del POT acabado de aprobar, o que el plan de balnearios debe diseñarse y ejecutarse en estos meses de inicio de año y no en 4 años como se plantea. 

De nuestro lado, hacemos ver que la agenda es más copiosa aún, y entre ellas mencionamos la sustitución de vehículos(carromulas), conservación del recurso hídrico y biodiversidad a través de pagos por servicios ambientales, PSA, protección y conservación del arbolado urbano (ley 2173 del 2021) —para no hablar del rural afectado por  los incendios —, fortalecimiento de las empresas recicladoras a través del incentivo de aprovechamiento e implementación del código de colores, el plan de manejo de humedales, componentes como ruido, aire y fauna silvestre y bienestar animal, el macroproyecto de la PTAR, los negocios verdes, las energías renovables, también expuestos por la Mesa del Árbol y EL PILON, en editoriales e informes especiales.

Editorial
1 febrero, 2024

Una reunión de buen ambiente 

La celebración de una reunión entre el importante colectivo de ambientalistas y el alcalde Ernesto Orozco y la secretaria de Desarrollo Económico, MedioAmbiente  y Turismo,  María Marta Lacouture, es un buen comienzo para hacer visible un factor clave en el gobierno de la ciudad: el medio ambiente.


La celebración de una reunión entre el importante colectivo de ambientalistas y el alcalde Ernesto Orozco y la secretaria de Desarrollo Económico, MedioAmbiente  y Turismo,  María Marta Lacouture, es un buen comienzo para hacer visible un factor clave en el gobierno de la ciudad: el medio ambiente.

La complejidad y amplitud de la agenda muestra que Orozco deberá tener un alto grado de atención y de fortalecimiento de la Secretaría pues cada día se tornan en más llamativos ante la ciudadanía  problemas como los del río y del agua que entra y sale de la ciudad, de las basuras, de las podas y de los escombros de la construcción, entre otros dolores de cabeza diarios del alcalde municipal.

Todos esos frentes deben conducir a que dentro de la Secretaría se crezca el brazo administrativo del subsector ambiental o definitivamente se constituya, por el Concejo, una Secretaría; petición que hemos pedido desde este diario y desde los seis foros anuales del Árbol que hacemos junto a la Mesa del Árbol, grupo que surgió de esos eventos para abordar los temas ambientales en la localidad.   

Esta vez, ha sido el colectivo reunido con el alcalde el pasado martes, organizado en el Foro Ambiental, que llevó también esa petición  dentro de  una detallada agenda, que incluyó temas como la pertinencia de cambiar la modificación del POT aprobada recientemente en diciembre; la  no urbanización del cerro Hurtado; implementación de la  educación ambiental; implementar, en un plazo no mayor de cuatro años, el Plan de Manejo de los balnearios; el control a las edificaciones que se desarrollan actualmente en las riberas del río Guatapurí y resolver seriamente el reasentamiento de los pobladores de la Margen Derecha; en aplicación de un fallo de Acción Popular, la protección y conservación de la corriente, desde el nacimiento hasta su desembocadura, así como el suministro de agua potable, y reactivar la mesa del Río, ordenada en un acuerdo del 2013; resolución de la problemática de los distintos tipos de residuos sólidos mal dispuestos en 60 sitios de la ciudad,  y los residuos de las demoliciones y construcciones, a través de una escombrera municipal; abrir una instancia de comunicación  y de participación ciudadana del componente ambiental; un programa de adaptabilidad al Cambio Climático e impulsar nuevas áreas de protección ambiental y conservación de  las actuales. 

Algunos aspectos pueden ser discutibles por su poca viabilidad inmediata, como el cambio del POT acabado de aprobar, o que el plan de balnearios debe diseñarse y ejecutarse en estos meses de inicio de año y no en 4 años como se plantea. 

De nuestro lado, hacemos ver que la agenda es más copiosa aún, y entre ellas mencionamos la sustitución de vehículos(carromulas), conservación del recurso hídrico y biodiversidad a través de pagos por servicios ambientales, PSA, protección y conservación del arbolado urbano (ley 2173 del 2021) —para no hablar del rural afectado por  los incendios —, fortalecimiento de las empresas recicladoras a través del incentivo de aprovechamiento e implementación del código de colores, el plan de manejo de humedales, componentes como ruido, aire y fauna silvestre y bienestar animal, el macroproyecto de la PTAR, los negocios verdes, las energías renovables, también expuestos por la Mesa del Árbol y EL PILON, en editoriales e informes especiales.