La escena donde María Atencio apareció halagando al cantante nacido en Urumita, La Guajira, no estaba en el libreto del director José Vergara. Finalmente, el episodio fue incluido y luego del lanzamiento del video los comentarios son a favor del frágil momento.
Dándole toda una participación a los paisajes de la serranía de Perijá, sus amigos más cercanos y mostrándose como un habitante más de Urumita, Silvestre Dangond aparece en el vídeo de su canción ‘Si yo supiera’.
Fueron tres días de grabaciones, donde el primero sirvió para que durante una mañana Silvestre recorriera las principales calles del municipio ubicado al sur de la península haciendo deporte; trotó en solitario más de 20 kilómetros.
También fue a la Institución Educativa Inmaculada Liñán, la primera en la que estudió y quiso compartir con los estudiantes más pequeños, dialogar con los docentes y además captar algunos momentos en los salones de clases, donde se sentó en una silla como cualquier otro alumno e interactuó con sus compañeros.
En las imágenes quedó además una noche de billar, allí el cantante aparece acompañado de personajes como su mánager Carlos Bloom, Iván Daza, ‘Coquito’ Maya, entre otros amigos de infancia.
Dangond mostró además las aguas del río Marquesote, anclado en las estribaciones de la serranía de Perijá, como fue su regreso a la primera peluquería y hasta terminó en una parranda.
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En la alta montaña, mientras rodaban las cámaras, María Atencio apareció con un bastón sobre su mano derecha y una botella con agua. “Vengo a darte un abrazo porque tú te lo mereces. No hay nada imposible para mí. Te amo, soy María Atencio y quiero que esto te lo lleves en tu mente, porque no hay nada imposible para mí. Párate que te voy a dar un abrazo para decir que te toqué, que vine al cerrito del Viejo Moli”, narra la mujer al cantautor, quien no pudo contener las lágrimas al notar el gesto y consideró incluirlo en el vídeo.
“Teníamos planeado y pensado que el vídeo tardaría el tiempo que emplea la canción, pero no contemplamos la parte de la señora María Atencio y entonces alargamos la producción de casi cinco minutos a seis. Era vital para el mundo conocer este tipo de gestos y yo con la única manera de pagarle el cariño al público, especialmente a personas como ella, era que la gente conociera de ella y por lo menos se pregunte quién es y de dónde viene, así conocerán también a mi pueblo Urumita”, dijo Silvestre Dangond desde España, donde cumple una gira de tres conciertos.
La conjugación de amor, vitalidad y tradición se ve en el vídeo de ‘Si yo supiera’, una canción dedicada a la muerte. El cantautor aprovechó para rodar imágenes en un restaurante, comiendo arepa de maíz con carne molida, un desayuno típico de esta región. También se paseó por las calles con Carlos Bloom a bordo de una motocicleta, evocando los tiempos de inicios musicales.
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Recalcó a Salvadora Rojas, quien le cortaba el cabello cuando Silvestre era un niño; allí le hicieron un servicio de peluquería, cepillado y hasta planchado. La verdadera parranda se vivió en la Hamaca Grande con personajes como ‘Monín’ Ramos, ‘El Congo’, ‘Nancho CD’, ‘Cayo’ López, José Suárez y por supuesto su acordeonero, Lucas Dangond, entre otros, recordando momentos vividos durante sus inicios de carrera. Los invitados especiales fueron sus padres, William Dangond y Delis Corrales.
Los juglares aparecen con la participación del décimo rey vallenato, José María ‘Chema’ Ramos, el 33 ‘Chemita’ Ramos Jr., y músicos tradicionales como ‘Chelo’ Alvarado, ‘Armando Timba’ y ‘El Negro de Juya’. Pero no solo fueron esos actores de la música vallenata. Quedó como evidencia la invitación de sus excompañeros de colegio y lo más especial, compartir con su abuela Josefina Baquero, la madre de su padre William Dangond, quien le dio la bendición, así como lo pide el intérprete en su canción.
Al final del filme, Silvestre dejó un mensaje para sus seguidores: “No hay un día de mi vida que no los piense. Ustedes serán por la eternidad la base primordial de mi vida. Mi pueblo, mis amigos, mi familia, todo lo que aprendí de ustedes. El tiempo pasa y siento que soy el mismo en diferentes circunstancias”.
La escena donde María Atencio apareció halagando al cantante nacido en Urumita, La Guajira, no estaba en el libreto del director José Vergara. Finalmente, el episodio fue incluido y luego del lanzamiento del video los comentarios son a favor del frágil momento.
Dándole toda una participación a los paisajes de la serranía de Perijá, sus amigos más cercanos y mostrándose como un habitante más de Urumita, Silvestre Dangond aparece en el vídeo de su canción ‘Si yo supiera’.
Fueron tres días de grabaciones, donde el primero sirvió para que durante una mañana Silvestre recorriera las principales calles del municipio ubicado al sur de la península haciendo deporte; trotó en solitario más de 20 kilómetros.
También fue a la Institución Educativa Inmaculada Liñán, la primera en la que estudió y quiso compartir con los estudiantes más pequeños, dialogar con los docentes y además captar algunos momentos en los salones de clases, donde se sentó en una silla como cualquier otro alumno e interactuó con sus compañeros.
En las imágenes quedó además una noche de billar, allí el cantante aparece acompañado de personajes como su mánager Carlos Bloom, Iván Daza, ‘Coquito’ Maya, entre otros amigos de infancia.
Dangond mostró además las aguas del río Marquesote, anclado en las estribaciones de la serranía de Perijá, como fue su regreso a la primera peluquería y hasta terminó en una parranda.
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En la alta montaña, mientras rodaban las cámaras, María Atencio apareció con un bastón sobre su mano derecha y una botella con agua. “Vengo a darte un abrazo porque tú te lo mereces. No hay nada imposible para mí. Te amo, soy María Atencio y quiero que esto te lo lleves en tu mente, porque no hay nada imposible para mí. Párate que te voy a dar un abrazo para decir que te toqué, que vine al cerrito del Viejo Moli”, narra la mujer al cantautor, quien no pudo contener las lágrimas al notar el gesto y consideró incluirlo en el vídeo.
“Teníamos planeado y pensado que el vídeo tardaría el tiempo que emplea la canción, pero no contemplamos la parte de la señora María Atencio y entonces alargamos la producción de casi cinco minutos a seis. Era vital para el mundo conocer este tipo de gestos y yo con la única manera de pagarle el cariño al público, especialmente a personas como ella, era que la gente conociera de ella y por lo menos se pregunte quién es y de dónde viene, así conocerán también a mi pueblo Urumita”, dijo Silvestre Dangond desde España, donde cumple una gira de tres conciertos.
La conjugación de amor, vitalidad y tradición se ve en el vídeo de ‘Si yo supiera’, una canción dedicada a la muerte. El cantautor aprovechó para rodar imágenes en un restaurante, comiendo arepa de maíz con carne molida, un desayuno típico de esta región. También se paseó por las calles con Carlos Bloom a bordo de una motocicleta, evocando los tiempos de inicios musicales.
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Recalcó a Salvadora Rojas, quien le cortaba el cabello cuando Silvestre era un niño; allí le hicieron un servicio de peluquería, cepillado y hasta planchado. La verdadera parranda se vivió en la Hamaca Grande con personajes como ‘Monín’ Ramos, ‘El Congo’, ‘Nancho CD’, ‘Cayo’ López, José Suárez y por supuesto su acordeonero, Lucas Dangond, entre otros, recordando momentos vividos durante sus inicios de carrera. Los invitados especiales fueron sus padres, William Dangond y Delis Corrales.
Los juglares aparecen con la participación del décimo rey vallenato, José María ‘Chema’ Ramos, el 33 ‘Chemita’ Ramos Jr., y músicos tradicionales como ‘Chelo’ Alvarado, ‘Armando Timba’ y ‘El Negro de Juya’. Pero no solo fueron esos actores de la música vallenata. Quedó como evidencia la invitación de sus excompañeros de colegio y lo más especial, compartir con su abuela Josefina Baquero, la madre de su padre William Dangond, quien le dio la bendición, así como lo pide el intérprete en su canción.
Al final del filme, Silvestre dejó un mensaje para sus seguidores: “No hay un día de mi vida que no los piense. Ustedes serán por la eternidad la base primordial de mi vida. Mi pueblo, mis amigos, mi familia, todo lo que aprendí de ustedes. El tiempo pasa y siento que soy el mismo en diferentes circunstancias”.