Felicitaciones al polifacético escritor villanuevero Juan Celedón, por la tenacidad y el empeño que desarrolló para realizar el gran homenaje que se le rindió a uno de los hijos más brillantes de La Guajira, con la participación particular de los municipios de Villanueva, San Juan, El Molino, Urumita, La Jagua y esta capital Valledupar. El Gobernador Jairo Aguilar de Luque le hizo entrega de la condecoración José Prudencio Padilla, la más alta distinción que tiene el departamento y los demás municipios lo premiaron y distinguieron con Decretos de agradecimiento y exaltación de sus virtudes y sus servicios prestados a su región.

Los actos se iniciaron con una misa en la antiquísima iglesia de El Molino y después en las instalaciones de la Universidad de La Guajira en Villanueva se desarrollaron todas las actividades para rendirle y reconocerle la grandeza que lo rodea y los servicios que le ha prestado a la Península; agotados los discursos y felicitaciones se le brindó una parranda, con sabor a Villanueva, que es único, en el bello y cómodo kiosco de José Félix Lafaurie, donde el ron, la comida y la música en abundancia y calidad brillaron.

Jorge Juan estaba feliz, alegre como hacía mucho tiempo no estaba, rodeado de muchos amigos y familiares que lo saludaban con fuertes y efusivos abrazos, a él y a Gloria su bella y dulce esposa, a sus hijos Jorge Juan, Gisela y Ricardo quien vino acompañado de su bonita cónyuge Erika Santamaría. De verdad que fue un rato inolvidable en donde gozaron y estuvieron contentos y que ojalá lo podamos repetir.

Para terminar, ya en el Valle, el doctor Rafael Castro Socarrás, amigo y vecino de vieja data, le brindó un almuerzo en los elegantes salones del Club Valledupar, acompañado de los amigos de infancia, su hermano el historiador Álvaro Castro y su esposa Leonor, el doctor Rodolfo Araújo Noguera y Elsita, Rodrigo López Barros y Josefina, que merecen un premio, pues asistieron a todos los actos; Rodolfo Campo Soto y Maocha, su hija, Alvarito Araújo Castro, Carlos y Chichí Quintero y otros “muchachos”, que no recuerdo, en donde Jorge Juan recordó anécdotas y momentos felices de su juventud en esta ciudad, hasta cuando terminó cuarto de bachillerato y se trasladó a Bogotá al Rosario y lo completó y obtuvo su cartón de bachiller. De ahí a Medellín, donde terminó Ingeniería de Petróleos y culminada su carrera su vida ha sido un rosario de triunfos profesionales y académicos que le han dado muchas satisfacciones y que en buen momento vino a compartir en su tierra natal, en nuestro Villanueva, con los amigos y familiares que aún están vivos, entre ellos yo, que orgullosamente me encuentro en la lista de sus buenos amigos y me lo manifiesta con mucho entusiasmo y afecto cada vez que nos encontramos y me abraza con fortaleza y me dice: “Hermano, como estás”.

Merecido, muy merecido ese gran homenaje que La Guajira, Villanueva, El Molino, San Juan, La Jagua, Urumita y El Valle le dieron a Jorge Juan. Nuevamente gracias pariente Juan Celedón por tan buena idea y ojalá otros tengan la misma iniciativa con personajes guajiros que injustamente han sido ignorados. Yo tengo en salsa aquí en Valledupar a unos que los voy a sorprender.

Doctor Jorge Juan Bendeck Olivella, definitivamente usted es un villanuevero famoso, gracias, gracias Gloria, Gisela, Jorge Juan, Francisco y Erika por haber venido y tener el gusto de atenderlos y ustedes de hacernos felices con su presencia.

Por: José Manuel Aponte Martínez.