Nuestro amigo Eduardo Dangond Castro tuvo a bien enviarme vía WhatsApp, un escrito que debido a su relevante importancia nos permitimos propalar. El documento recibe el nombre de Allan Savory y es considerado como el más grande y perfecto tsunami que cierne sobre nosotros los seres humanos.

“Empezamos diciendo que esta tormenta perfecta está creando una triste realidad, cada vez más sombría y nos enfrentamos a esa realidad con la plena convicción de que podemos resolver nuestros problemas con la tecnología y eso es muy comprensible. Bien, esta tormenta perfecta a la que nos enfrentamos es el resultado del aumento de la población, elevándose hacia los 10 mil millones de personas; el suelo se está volviendo desértico y, por supuesto, el clima está cambiando.

Ahora no hay duda de eso, en absoluto: solo resolveremos el problema de sustituir los combustibles fósiles con la tecnología. Pero los combustibles fósiles, carbono y gas, no son en absoluto la única cosa que está causando el cambio climático.

La desertificación es una forma elegante de decir que el suelo se está volviendo un desierto y esto sólo pasa cuando creamos demasiados terrenos baldíos. No hay otra causa. Tengo la intención de enfocarme en la mayoría de los terrenos del mundo que se están volviendo desérticos.

Pero tengo un sencillo mensaje para ustedes que ofrece más esperanza de la que pueden imaginar. Contamos con ambientes donde la humedad está garantizada durante todo el año.

En esos lugares es casi imposible crear grandes áreas de terreno baldío. No importa lo que se haga, la naturaleza los cubre rápidamente y tenemos meses de humedad seguidos por meses de sequía y ahí es donde está ocurriendo la desertificación.

Afortunadamente, con la tecnología espacial actual podemos verlo desde el espacio y cuando lo hacemos se pueden ver las proporciones bastante bien. Generalmente, lo que está en verde no está en proceso de desertificación y lo que está en marrón sí lo está, y estas son por mucho las áreas más grandes de la Tierra.

Aproximadamente dos tercios, diría yo, del mundo están en proceso de desertificación. Se nos ha dicho una y otra vez, repetidamente, que la desertificación sólo está ocurriendo en áreas áridas y semiáridas del mundo y que los pastizales de altura en áreas de alta precipitación no tienen ningún problema.

Pero si apartamos la atención de los pastizales y miramos al terreno vemos que la mayor parte del suelo bajo el pastizar está baldío y cubierto con una corteza de algas, dando lugar a mayor escorrentía y evaporación. Ese es el cáncer de la desertificación que no reconocemos hasta que está en forma terminal.

Bien sabemos que la desertificación es causada por el ganado, vacuno, ovino y caprino que sobre pastorean las plantas, dejando el suelo descubierto y emanando metano. Casi todos saben esto.

Ahora, en ambiente como el que se ve aquí, con mucho polvo, en África donde me críe llegue amar la vida silvestre y crecí odiando al ganado debido al daño que estaban haciendo. Y luego mi educación universitaria como ecologista reforzó mis creencias”.