En Valledupar el negocio de community manager está pisando con fuerza entre los jóvenes profesionales y las empresas.
Por Pepe Morón/ EL PILÓN
[email protected]
Entre las generaciones de hoy, existen términos que hacen abismal las diferencias entre las personas de diferentes edades.
Una forma de escribir distinto, adecuada a las nuevas tecnologías, acompañada del aumento de extranjerismos propios de una sociedad globalizada, ayudan a marcar las diferencias entre los padres y los hijos y complica aún más, el ya difícil camino de las relaciones parentales.
En Valledupar existe un nuevo término que poco a poco toma fuerza y empieza a hacer parte del léxico común, no solo de los jóvenes sino de las empresas, los productos comerciales y hasta los políticos y famosos del espectáculo: el ‘community manager’.
Este anglicismo hace referencia a la persona responsable de la comunidad virtual, digital, en línea o de internet, de un individuo, empresa o grupo comercial. En otras palabras es quien actúa como auditor de la marca en los medios sociales.
Esta nueva figura que cada vez es más común, cumple un nuevo rol dentro de la mercadotecnia, la publicidad online y la documentación, pues es una profesión emergente que da muy buenos dividendos y que no requiere esfuerzos físicos de alto impacto, incluso es una actividad que se puede realizar desde casa o combinar con otras funciones.
En este campo, Valledupar tiene a @DrLadilla uno de los ‘Twitteros’ más influyentes del país, capaz de convertir un tema simple y banal en un contenido visitado por más de 50 mil personas en solo unos minutos.
Su verdadero nombre es Eliécer Padilla, un abogado vallenato, egresado de la Universidad Popular del Cesar que además de ser el ‘Twittero’ más importante de la región con más de 400 mil seguidores, trabaja como Community Manager de importantes empresas nacionales e internacionales.
Este joven profesional, nunca ha ejercido el título que dice su diploma de la UPC. De forma fácil ha encontrado en las redes sociales una forma de vivir sin trabajar en juzgados lidiando con procesos penales.
Según explicaba Drladilla, su trabajo no es algo simple y plano; al contrario, dentro de sus funciones se distingue como el responsable de sostener, acrecentar y, en cierta forma, defender las relaciones de la empresa con sus clientes en el ámbito digital, gracias al conocimiento de las necesidades y los planteamientos estratégicos de la organización y los intereses de los clientes.
De manera concreta, Eliécer, como es conocido por sus amigos y familiares, quienes a veces ignoran su trabajo; dice que disfruta al crear, analizar, entender y direccionar la información producida para las redes sociales, además de monitorear acciones que se ejecutan y crear estrategias de comunicación digital.
El único objetivo de estos funcionarios de la red, será establecer una comunicación que lejos de silenciar, censurar o ignorar a sus clientes, sea transparente, abierta y honesta, acercando nuevos públicos afines con la marca; permitiendo motivar las posibilidades de un nuevo modelo de “innovación abierta”, ofreciendo así nuevas formas de comunicación más relevantes en las que el cliente se sienta parte activa de la clasificación.
En Valledupar el negocio de community manager está pisando con fuerza entre los jóvenes profesionales y las empresas.
Por Pepe Morón/ EL PILÓN
[email protected]
Entre las generaciones de hoy, existen términos que hacen abismal las diferencias entre las personas de diferentes edades.
Una forma de escribir distinto, adecuada a las nuevas tecnologías, acompañada del aumento de extranjerismos propios de una sociedad globalizada, ayudan a marcar las diferencias entre los padres y los hijos y complica aún más, el ya difícil camino de las relaciones parentales.
En Valledupar existe un nuevo término que poco a poco toma fuerza y empieza a hacer parte del léxico común, no solo de los jóvenes sino de las empresas, los productos comerciales y hasta los políticos y famosos del espectáculo: el ‘community manager’.
Este anglicismo hace referencia a la persona responsable de la comunidad virtual, digital, en línea o de internet, de un individuo, empresa o grupo comercial. En otras palabras es quien actúa como auditor de la marca en los medios sociales.
Esta nueva figura que cada vez es más común, cumple un nuevo rol dentro de la mercadotecnia, la publicidad online y la documentación, pues es una profesión emergente que da muy buenos dividendos y que no requiere esfuerzos físicos de alto impacto, incluso es una actividad que se puede realizar desde casa o combinar con otras funciones.
En este campo, Valledupar tiene a @DrLadilla uno de los ‘Twitteros’ más influyentes del país, capaz de convertir un tema simple y banal en un contenido visitado por más de 50 mil personas en solo unos minutos.
Su verdadero nombre es Eliécer Padilla, un abogado vallenato, egresado de la Universidad Popular del Cesar que además de ser el ‘Twittero’ más importante de la región con más de 400 mil seguidores, trabaja como Community Manager de importantes empresas nacionales e internacionales.
Este joven profesional, nunca ha ejercido el título que dice su diploma de la UPC. De forma fácil ha encontrado en las redes sociales una forma de vivir sin trabajar en juzgados lidiando con procesos penales.
Según explicaba Drladilla, su trabajo no es algo simple y plano; al contrario, dentro de sus funciones se distingue como el responsable de sostener, acrecentar y, en cierta forma, defender las relaciones de la empresa con sus clientes en el ámbito digital, gracias al conocimiento de las necesidades y los planteamientos estratégicos de la organización y los intereses de los clientes.
De manera concreta, Eliécer, como es conocido por sus amigos y familiares, quienes a veces ignoran su trabajo; dice que disfruta al crear, analizar, entender y direccionar la información producida para las redes sociales, además de monitorear acciones que se ejecutan y crear estrategias de comunicación digital.
El único objetivo de estos funcionarios de la red, será establecer una comunicación que lejos de silenciar, censurar o ignorar a sus clientes, sea transparente, abierta y honesta, acercando nuevos públicos afines con la marca; permitiendo motivar las posibilidades de un nuevo modelo de “innovación abierta”, ofreciendo así nuevas formas de comunicación más relevantes en las que el cliente se sienta parte activa de la clasificación.