Publicidad
Categorías
Categorías
Columnista - 5 febrero, 2024

Un Instituto de Cultura y Turismo para Valledupar, muy necesario

Vamos al grano con respecto a este tema, doctor Ernesto Orozco, alcalde de Valledupar, ya se iniciaron las mesas de trabajo para desarrollar y plasmar el sentir del pueblo en su programa de gobierno, el deber ser. Pues bien, una de las cosas que el Consejo Municipal de Cultura lleva como propuesta y aconseja de manera […]

Boton Wpp

Vamos al grano con respecto a este tema, doctor Ernesto Orozco, alcalde de Valledupar, ya se iniciaron las mesas de trabajo para desarrollar y plasmar el sentir del pueblo en su programa de gobierno, el deber ser.

Pues bien, una de las cosas que el Consejo Municipal de Cultura lleva como propuesta y aconseja de manera especial, es la creación del Instituto de Cultura y Turismo para nuestra capital.

Son varias las razones que queremos exponerle en esta solicitud que se convierte en una propuesta formal. Lo primero es que la cultura tenga un doliente, alguien que pueda trabajar con autonomía, que represente con criterio y autoridad la cultura y el desarrollo turístico de nuestra ciudad.

Segundo, los procesos culturales no deben ser manejados como una colcha de retazos y dependiendo del estado de ánimo del alcalde del momento, no es la razón; esto nos permite analizar que no existe una política pública a mediano y largo plazo que nos indique la ruta, es necesaria; hay que pensar de manera urgente en un barco con timonel y que ese barco tenga un capitán que cuente con una brújula que le ayuda en esa labor de capitanear, de guiar, de orientar.

En este momento lo que sucede es que el presupuesto de la cultura se distribuye con la famosa ‘viveza indígena’, quien tenga más saliva traga más harina.

Lo hemos dicho desde antes, que las administraciones tienen la oficina de cultura como la caja menor, para organizar parrandas y para atenciones personales; esto se evidencia en el disgusto de los líderes culturales, los artistas y gestores que nunca han estado conformes con la manera como se maneja la cultura y el turismo en Valledupar.

Comenzamos muy bien con la actual directora de la oficina de Cultura, doctora Yanelis González Maestre. Antes, el Consejo Municipal de Cultura era un saludo a la bandera, o peor, ignorado totalmente; para el caso y en lo que va corrido de este mandato, un mes y unos días, hemos hecho más de lo que se hizo con el Mello Castro en cuatro años.

Desde este espacio en EL PILÓN, queremos pedirle al señor alcalde, de manera formal que tenga en cuenta nuestra solicitud; no es un capricho, no es fomentar la burocracia, es brindarnos la oportunidad de trabajar de manera más decidida en las políticas públicas culturales. Ya tenemos un folclor que nos visibiliza a nivel nacional e internacional, pero hay más: hay teatro, cine, danzas, artes plásticas, artesanía, gastronomía y mucha literatura, en todo su contexto. 

El instituto de Cultura y Turismo es una necesidad, no un capricho señor alcalde.

No es borrando murales, no es haciendo casas en el aire, ni remodelando plazas, como se trabaja la cultura y el turismo.

Hay que ser sensatos y darle real importancia para convertir a Valledupar en el epicentro cultural del mundo.

Sólo Eso.

Eduardo Santos Ortega Vergara

Columnista
5 febrero, 2024

Un Instituto de Cultura y Turismo para Valledupar, muy necesario

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Eduardo S. Ortega Vergara

Vamos al grano con respecto a este tema, doctor Ernesto Orozco, alcalde de Valledupar, ya se iniciaron las mesas de trabajo para desarrollar y plasmar el sentir del pueblo en su programa de gobierno, el deber ser. Pues bien, una de las cosas que el Consejo Municipal de Cultura lleva como propuesta y aconseja de manera […]


Vamos al grano con respecto a este tema, doctor Ernesto Orozco, alcalde de Valledupar, ya se iniciaron las mesas de trabajo para desarrollar y plasmar el sentir del pueblo en su programa de gobierno, el deber ser.

Pues bien, una de las cosas que el Consejo Municipal de Cultura lleva como propuesta y aconseja de manera especial, es la creación del Instituto de Cultura y Turismo para nuestra capital.

Son varias las razones que queremos exponerle en esta solicitud que se convierte en una propuesta formal. Lo primero es que la cultura tenga un doliente, alguien que pueda trabajar con autonomía, que represente con criterio y autoridad la cultura y el desarrollo turístico de nuestra ciudad.

Segundo, los procesos culturales no deben ser manejados como una colcha de retazos y dependiendo del estado de ánimo del alcalde del momento, no es la razón; esto nos permite analizar que no existe una política pública a mediano y largo plazo que nos indique la ruta, es necesaria; hay que pensar de manera urgente en un barco con timonel y que ese barco tenga un capitán que cuente con una brújula que le ayuda en esa labor de capitanear, de guiar, de orientar.

En este momento lo que sucede es que el presupuesto de la cultura se distribuye con la famosa ‘viveza indígena’, quien tenga más saliva traga más harina.

Lo hemos dicho desde antes, que las administraciones tienen la oficina de cultura como la caja menor, para organizar parrandas y para atenciones personales; esto se evidencia en el disgusto de los líderes culturales, los artistas y gestores que nunca han estado conformes con la manera como se maneja la cultura y el turismo en Valledupar.

Comenzamos muy bien con la actual directora de la oficina de Cultura, doctora Yanelis González Maestre. Antes, el Consejo Municipal de Cultura era un saludo a la bandera, o peor, ignorado totalmente; para el caso y en lo que va corrido de este mandato, un mes y unos días, hemos hecho más de lo que se hizo con el Mello Castro en cuatro años.

Desde este espacio en EL PILÓN, queremos pedirle al señor alcalde, de manera formal que tenga en cuenta nuestra solicitud; no es un capricho, no es fomentar la burocracia, es brindarnos la oportunidad de trabajar de manera más decidida en las políticas públicas culturales. Ya tenemos un folclor que nos visibiliza a nivel nacional e internacional, pero hay más: hay teatro, cine, danzas, artes plásticas, artesanía, gastronomía y mucha literatura, en todo su contexto. 

El instituto de Cultura y Turismo es una necesidad, no un capricho señor alcalde.

No es borrando murales, no es haciendo casas en el aire, ni remodelando plazas, como se trabaja la cultura y el turismo.

Hay que ser sensatos y darle real importancia para convertir a Valledupar en el epicentro cultural del mundo.

Sólo Eso.

Eduardo Santos Ortega Vergara