Alex Francisco Giraldo Ramírez y Mauricio Santana Gallego, recobrarán la libertad luego de que el Juzgado Segundo Penal Municipal de Valledupar anunció que los absuelve del proceso que les adelantaba la Fiscalía por el delito de homicidio, como principales sospechosos de haber asesinado al abogado Efraín José Valera, primo del senador cesarense Félix Valera Ibáñez.

Los dos sujetos, oriundos del departamento de Antioquía, fueron capturados el 16 de febrero de 2011, por la Policía cuando se movilizaban en dos motos por la calle 14, entre carreras 4 y 5 del barrio Cañaguate de Valledupar, a las 2:57 de la tarde, instantes después de que Efraín José Valera Valera, de 55 años, fue asesinado a tiros por sicarios que lo abordaron en el momento que subía a su camioneta Ford Explorer doble cabina, con placas GOD 267, de Puerto Colombia, la cual estaba parqueada en las afueras de la residencia, ubicada en la calle 13 con carrera 6, del mismo sector.

Para las autoridades los capturados eran los responsables del crimen y fueron recluidos en la Penitenciaría de Alta y Mediana Seguridad de Valledupar por los delitos de homicidio agravado en concurso heterogéneo con tráfico, fabricación y porte ilegal de armas de fuego.

Sin embargo, al ser arrestados no se les incautó armas de fuego alguna, sólo las dos motocicletas en las que se movilizaban cada uno.

A lo largo del juicio empezaron a conocerse inconsistencias en las acusaciones de la Fiscalía 16 seccional de Valledupar que vislumbraban la absolución de los dos antioqueños, quienes siempre pregonaron su inocencia.

Uno de los elementos decisivos del proceso que favoreció a los enjuiciados, fueron las pruebas genéticas realizadas a la gorra que al parecer portaba uno de los hombres que disparó contra Efraín José Valera y que se le cayó en la escena del crimen. Las muestras de tejidos encontradas en la gorra del asesino no corresponden genéticamente a los dos detenidos, Alex Francisco Giraldo Ramírez y Mauricio Santana Gallego.

Además las pruebas de ADN por absorción atómica para demostrar si los sospechosos dispararon armas antes de ser capturados, también resultaron negativas.

En las próximas semanas el Juzgado Segundo Penal Municipal con funciones de conocimiento emitirá el fallo absolutorio. Sin embargo, ordenó la libertad de los procesados que llevan un año y cuatro meses en la cárcel por un crimen del que al final no se les halló culpables.