Para mejorar la situación del Hospital Rosario Pumarejo de López, el nuevo gerente, tiene tres puntos que considera claves y en los que hay que trabajar cuanto antes.
Por Pepe Morón Reales
[email protected]
Al tomar posesión como gerente del hospital más importante del Cesar, Rubén Sierra aseguró que estaba preocupado por las condiciones en las que recibía este centro asistencial. Por esa razón indicó que tenía estipulados o establecidos tres pilares que, a su juicio, requieren una atención preminente e inmediata.
Según informó Sierra en una entrevista con EL PILON, una de las prioridades es reducir a su mínima expresión, el alto gasto que tiene la entidad.
En este sentido, el gerente aclaró que no se trata de sacar empleados porque sí. Simplemente, en el mes de junio, cuando termine el contrato, piensa revisar con detalle para ver cuáles son realmente necesarios y cuáles no deben continuar. Esta acción, reduciría los 480.000.000 millones de pesos que actualmente hay de gasto en el área administrativa.
El segundo punto, en el que hay que trabajar y que viene con problemas desde las administraciones anteriores es la atención humanitaria. Un renglón fundamental, según indicó Sierra, que intenta mejorar la calidad del servicio y el trato de los médicos con los pacientes.
Como caso particular, el Gerente refirió el de un menor de meses que fue atendido por un ortopedista que estaba bajo los efectos del alcohol y que llegó en reemplazo del especialista de turno, que no apareció durante su horario de trabajo.
“No digo los nombres de los médicos porque eso está en investigación pero la Sociedad de Ortopedia está quedando mal por especialistas como estos” afirmó Sierra.
El tercer punto, quizás el que más preocupa al nuevo gerente, es el estado de las deudas y cuentas por pagar del Hospital Rosario Pumarejo.
Para sorpresa de muchos, la cartera de la ESE supera los 130 mil millones de pesos y aún faltan algunas glosas por sumar.
“La sección de cartera es un desastre. Las personas que estaban antes se ve que no tenían ni idea de cómo manejar un hospital, por eso ahora es necesario hacer una depuración de cartera”, aseguró el gerente.
De acuerdo con Rubén Sierra, la administración realiza las investigaciones pertinentes para descubrir la fórmula que cure la enfermedad mortal que tiene atrapado al hospital. Una vez tenga los resultados, planea realizar una rueda de prensa, para dar a conocer en detalle qué fue lo que quedó de este centro asistencial.
Para mejorar la situación del Hospital Rosario Pumarejo de López, el nuevo gerente, tiene tres puntos que considera claves y en los que hay que trabajar cuanto antes.
Por Pepe Morón Reales
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Al tomar posesión como gerente del hospital más importante del Cesar, Rubén Sierra aseguró que estaba preocupado por las condiciones en las que recibía este centro asistencial. Por esa razón indicó que tenía estipulados o establecidos tres pilares que, a su juicio, requieren una atención preminente e inmediata.
Según informó Sierra en una entrevista con EL PILON, una de las prioridades es reducir a su mínima expresión, el alto gasto que tiene la entidad.
En este sentido, el gerente aclaró que no se trata de sacar empleados porque sí. Simplemente, en el mes de junio, cuando termine el contrato, piensa revisar con detalle para ver cuáles son realmente necesarios y cuáles no deben continuar. Esta acción, reduciría los 480.000.000 millones de pesos que actualmente hay de gasto en el área administrativa.
El segundo punto, en el que hay que trabajar y que viene con problemas desde las administraciones anteriores es la atención humanitaria. Un renglón fundamental, según indicó Sierra, que intenta mejorar la calidad del servicio y el trato de los médicos con los pacientes.
Como caso particular, el Gerente refirió el de un menor de meses que fue atendido por un ortopedista que estaba bajo los efectos del alcohol y que llegó en reemplazo del especialista de turno, que no apareció durante su horario de trabajo.
“No digo los nombres de los médicos porque eso está en investigación pero la Sociedad de Ortopedia está quedando mal por especialistas como estos” afirmó Sierra.
El tercer punto, quizás el que más preocupa al nuevo gerente, es el estado de las deudas y cuentas por pagar del Hospital Rosario Pumarejo.
Para sorpresa de muchos, la cartera de la ESE supera los 130 mil millones de pesos y aún faltan algunas glosas por sumar.
“La sección de cartera es un desastre. Las personas que estaban antes se ve que no tenían ni idea de cómo manejar un hospital, por eso ahora es necesario hacer una depuración de cartera”, aseguró el gerente.
De acuerdo con Rubén Sierra, la administración realiza las investigaciones pertinentes para descubrir la fórmula que cure la enfermedad mortal que tiene atrapado al hospital. Una vez tenga los resultados, planea realizar una rueda de prensa, para dar a conocer en detalle qué fue lo que quedó de este centro asistencial.