Cuatro ocupantes de una ambulancia viajaban en busca de salud y en el camino se encontraron con la muerte. Al parecer, el conductor del vehículo, Roiman Parejo, intentó adelantar en la carretera y se estrelló de frente con un camión sobre la vía que de Agustín Codazzi conduce al municipio de Becerril. 

El impacto fue letal. La imprudencia vial cobró la vida del conductor y sus tres acompañantes: la enfermera Yalibeth Cárnica, de 23 años, la paciente Sara Sofía Sánchez, de 4 años, y la de su madre María Fernanda Martínez.   

“Ellos venían de remisión del hospital del municipio de San Martín hacia la Clínica Médicos centro de Valledupar, pero lamentablemente en el camino sufrieron el accidente”, manifestó Edita Portillo, coordinadora encargada del CRUE. 

Personal de criminalística de la Policía Seccional de Tránsito y Transporte inspeccionó los cuerpos de las víctimas para trasladarlos a la morgue de Valledupar. 

Los peritos también analizaron el escenario violento llegando a la conclusión, como primera hipótesis, de que la tragedia sucedió por imprudencia del conductor de la ambulancia.  

Entre tanto, Yohander Antonio Sanguino Muños, de 22 años, quien conducía el camión de placas UVJ-080 con ruta Santa Isabel – Casacará, resultó ileso.  

Pero en el hecho salió herido el conductor, no identificado, de una motocicleta que chocó con la parte trasera del camión cuando este colisionó con la ambulancia. El motociclista fue trasladado a un centro asistencial y las autoridades desconocían su estado de salud.    

UNA TRAGEDIA SE REPITE 

No es la primera vez que una misión médica termina en tragedia por imprudencias viales. Hace un año, en el mes de octubre de 2020, una paciente murió en un accidente de tránsito que sufrió la ambulancia que la trasladaba por carreteras del departamento del Cesar.  

La víctima fue María Del Carmen Carrascal Meza, de 62 años, remitida de Bolívar hacia un centro de mayor complejidad en la capital del Cesar. 

De igual manera, en el año 2019, una ambulancia que chocó contra un árbol enlutó a tres familias del sur del Cesar.   En el acto murió la pequeña María Belén Olmedo Martínez, de un año y 10 meses de edad, quien era remitida desde Pailitas por una fractura en un dedo; igual suerte corrió su madre, Kelly Johanna Martínez Orozco, de 23 años, y la auxiliar de enfermería, Yarimes Castillejo Pontón, de 38 años.

La otra víctima fatal fue Esmely Arias Díaz, de 37 años, quien acompañaba a su hermana enferma en la misma ambulancia.