Entre la diversidad de problemas que sufre Valledupar, el desempleo se constituye en un piano muy pesado para el alcalde de la ciudad. El alcalde elegido el próximo 29 de octubre de la vigencia, como es habitual tendrá en el Departamento Administrativo Nacional de Estadística – DANE, un gestor de seguimiento para el indicador de […]
Entre la diversidad de problemas que sufre Valledupar, el desempleo se constituye en un piano muy pesado para el alcalde de la ciudad. El alcalde elegido el próximo 29 de octubre de la vigencia, como es habitual tendrá en el Departamento Administrativo Nacional de Estadística – DANE, un gestor de seguimiento para el indicador de desempleo.
Es importante resaltar que, de acuerdo con el DANE, entre julio de 2022 y julio de 2023, la tasa de desempleo pasó de 16,4 % a 12,6 % en Valledupar, lo que representa una reducción de 3,9 %.
Que el desempleo esté cediendo permite que la ciudad salga temporalmente del angustiante top 5. No obstante, hay mucho por hacer, sigue siendo alta la tasa de desempleo, asimismo, la informalidad que en la actualidad indica que Valledupar es la segunda ciudad del país con mayor informalidad con un 65 %. Y son los jóvenes los más afectados con una tasa de 19 %, para el trimestre mayo-julio, según el mismo reporte del DANE.
Está planteada la descripción del problema, el nuevo alcalde debe utilizar esa caracterización con el objetivo de describir una serie de escenarios que permitan avizorar soluciones en distintos periodos de tiempo mediante la gestión facilitadora de las estrategias del gobierno. Alinear, articular y aunar esfuerzos debe constituirse en política institucional del equipo encargado de desarrollarla, esto implica análisis del contexto, revisión del Plan Nacional de Desarrollo, para ser puntual con el gobierno nacional en lo relacionado con la implementación de planes, programas y proyectos en materia de generación de empleos, disponibilidad presupuestal, y fundamentalmente, convocar y entenderse con las universidades, gremios, Cámara de Comercio y demás partes interesadas domiciliadas en el territorio, en aras de definir los aspectos que determinen la vocación empresarial de la ciudad, y sobre todo, para indagar por qué la ciudad no es atractiva para el inversionista.
La visión interinstitucional del problema de desempleo concibe no solo una revisión interior, sino que requiere comprensión global. Es decir, revisar las tendencias económicas, sanitarias y geopolíticas creadas en los mercados laborales a nivel mundial en 2023.
Un elemento de consulta es el Informe sobre el futuro del empleo 2023, el cual explora cómo evolucionarán los empleos y las habilidades en los próximos cinco años. La cuarta edición de la serie continúa el análisis de las expectativas de los empleadores para brindar nuevos conocimientos sobre cómo las tendencias socioeconómicas y tecnológicas darán forma al lugar de trabajo del futuro.
También es importante valorar las memorias del reciente foro ¿Para dónde va la reforma a la educación superior en Colombia?, realizado por la Universidad de los Andes. Esta información es muy importante para construir el estado del arte que procura la reforma a la Ley 30 de 1992. A propósito, Raquel Bernal, rectora de la Universidad de los Andes, hizo un llamado a mirar hacia el futuro con contundencia: “En este momento, la clasificación de ocupaciones en Colombia dice que 65 % son de nivel práctico y técnico, de mediana y alta complejidad; es decir, trabajos operativos. Las ocupaciones del sistema productivo colombiano de alta gerencia son solo el 28 %. La oferta académica del país es al revés, es 70 % académica teórica y 30 % técnica y tecnológica, con el agravante de que la técnica y la tecnológica no son de la mejor calidad, no cumplen la promesa de empleabilidad que deberían tener, por lo tanto, no tiene alta valoración social, que es un gran problema que tiene este país.
Entonces, aparte del futuro del mundo, la tecnología, la inteligencia artificial, etc., debemos cruzar esa reforma con la situación del país. El crecimiento de la productividad en Colombia es muy bajo y en parte eso se debe al desfase que hay entre lo que formamos y lo que hay”.
Moisés Wasserman, experto en educación, exrector de la Universidad Nacional de Colombia, dijo en el foro “Yo conozco nuestra historia y tenemos una gran tendencia a preferir las declaraciones a las acciones“. Ese ritmo debe evitarlo el nuevo alcalde de Valledupar, es mejor, entender los cambios y los fenómenos de las tendencias socioeconómicas que marcan derroteros en la humanidad, inherentes a las irrupciones de la evolución tecnológica, el impacto ambiental y el crecimiento poblacional. Este es el punto de partida para encarar la solución de un problema creciente y preocupante, desde luego, con perspectiva holística.
Por Luis Elquis Díaz